¿Y si Cambio? Reír, un aliado de la salud mental, emocional y física

¿Has escuchado personas que dicen que no les gusta reír? ¿Que eso no es de gente seria, que las personas que se la pasan riendo no se toman las cosas en serio y peor aún, que quienes se ríen mucho, no las tomarán en serio?

Lo curioso es que, en la mayoría de los casos, se trata de personas que se quejan de la vida constantemente, son perfeccionistas y, generalmente, están enfermas, solas y de muy mal humor.

Tomar la vida con buen humor es fundamental para un mayor bienestar y salud mental, emocional y espiritual.

Algunas risas que no dan risas

La risa, es una de las manifestaciones más genuinas del ser humano. No se puede ocultar o disimular frente a otras personas y aunque el cerebro no sabe diferenciar entre una risa genuina y una simulada, lo cual es una ventaja para cuando queremos activar la farmacia interior, reír a carcajadas ofrece grandes beneficios.

La risa ayuda al bienestar, salud y felicidad de niños, adolescentes, adultos y adultos mayores. Tanto si son mujeres u hombres, independientemente de las circunstancias en las que se encuentren, la risa siempre ofrecerá nuevas oportunidades de plenitud, especialmente cuando se ha hecho de la risa una forma de vida.

Pero, cuidado, hay algunos tipos de risa que no dan risa.

Las risas nerviosas, aunque son muy genuinas, son un reflejo de estrés y ansiedad. En algunos casos, podría ser interpretada como inadecuada, porque se presenta en momentos importantes como, por ejemplo, una petición de matrimonio, un nuevo empleo o la exposición de una tesis.

Las risas inapropiadas, que son genuinas también, pero son socialmente incómodas, porque se dan en un contexto social donde no se esperan. Por ejemplo, en el funeral de un ser querido, un mal momento de alguien o de los abuelos y sus necesidades fisiológicas o emocionales.

Al margen de estas situaciones incómodas donde algunos tipos de risa no dan risa, es importante reconocer los grandes beneficios de reír. Especialmente cuando la risa es genuina, franca y honesta, donde duele el estómago, las lágrimas brotan y el sonido es estruendoso.

La risa alegre y genuina, sana el cuerpo, la mente y fortalece el espíritu

Son muchas las investigaciones que se han hecho con respecto a los beneficios científicos que tiene la risa en el cuerpo físico, mental, emocional y espiritual, producto del involucramiento de diversas regiones del cerebro que impactan positivamente:

• Físicamente, se activan más de 400 músculos que permiten oxigenar los tejidos, mejorar el sistema cardiovascular, aumentar el flujo sanguíneo y reducir la presión sanguínea. Además, se fortalece la capacidad pulmonar, y el sistema inmunológico, por lo que se aumentan las defensas del organismo, ayudando en la prevención de enfermedades y coadyuvando en la sanación de otras.
Para el dr. Hunter Doherty “Patch” Adams, es importante contar con personas que sepan provocar risas en los enfermos y manifiesten la empatía adecuada, enseñando a reír a los pacientes para mejorar su calidad de vida.

• Emocionalmente, la risa actúa en el sistema límbico, donde se encuentran la amígdala y el hipocampo, partes del cerebro encargadas de gestionar las emociones, permitiendo la expresión del amor, el afecto, la amistad y el humor, así como un manejo más flexible y adaptativo de las situaciones estresantes e inherentes a los cambios; fortalece la resiliencia, la adaptación y la actitud positiva frente a los retos y desafíos de la vida; aumenta los niveles de energía; disminuye el estrés y los cuadros depresivos y ansiosos; produce neurotransmisores del bienestar; mejora el estado de ánimo y aumenta la autoestima.

• Neurológicamente, se activa la farmacia gratuita interna. Segregando mayor cantidad de endorfinas, hormona de la felicidad y analgésico natural del cuerpo humano, que permite aumentar la tolerancia al dolor; combatir el estrés, superar la ansiedad y la depresión; Aumenta también la producción de dopamina y serotonina, sustancias que contribuyen disipar las preocupaciones, sentir alivio y potenciar el buen humor, inducen la calma, la creatividad y la imaginación; así mismo aumenta la segregación de catecolamina, la cual permite un mejor funcionamiento del cerebro y con ello, mejorar el rendimiento académico, la agilidad mental y la memoria; Además, se inhibe o reduce los niveles de adrenalina y los niveles de cortisol, hormona que en exceso inducen al estrés.

• Cognitivamente, potencia los procesos de aprendizaje, enfatizando conceptos y pensamientos, cultivando la atención, generando relajados y productivos ambientes de aprendizaje; donde se reduce la ansiedad, se mejora la participación y motivación de los estudiantes.

• Espiritualmente, permite aumentar la esperanza, el optimismo, la resiliencia y la autoeficacia para hacer frente a la adversidad.

• Socialmente, permite mejorar las relaciones interpersonales, especialmente las de pareja, familiares y laborales, al activar áreas del cerebro implicadas en habilidades para establecer lazos con otras personas y reducir la inhibición, la timidez y las tensiones; aumenta la capacidad para resolver problemas; se fortalece la cohesión entre los grupos ya que, la risa al ser contagiosa, se disfruta y potencia más cuando se experimenta en grupos.

¡Reír es en definitiva la mejor medicina para sanar el alma!

Yamiilet Pinto

Psicóloga

FPV 16.092

@yamiletpinto

yamipinto@gmail.com

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