¿Y Si Cambio? El vacío interior, una llamada para volver al sentido de vida

Hablar del vacío existencial o del vacío interior es un tema determinante en la era moderna, cuando el estrés, los estereotipos y las redes sociales presionan al ser humano a ser quien no es y tratar de encajar en una sociedad cada vez más demandante y desconectada del arte de vivir en paz y del sentido o propósito vida.

Independientemente de la edad, sexo, condición social, logros académicos o estatus económico, en algún momento se sufren crisis existenciales que conducen a preguntas profundas, cuyas respuestas no se encuentran afuera, sino dentro sí mismo:

¿Quién soy?

¿De dónde vengo?

¿Hacia dónde voy?

¿Qué es lo realmente importante y significativo para mí?

¿Qué sentido tiene mi existencia?

¿Por qué nada me llena?

¿Habrá algo que me dé felicidad?

¿Qué sentido tiene vivir?

¿Por qué me siento tan insatisfecho (a)

Si estas preguntas no se responden a tiempo, la persona podría entrar en un proceso depresivo, lento y progresivo, sin saberlo y sus consecuencias generan dolor intrapersonal, agotamiento, desmotivación, desgano, ansiedad y/o enfermedad que debilitan y disminuyen la capacidad de voluntad interior de quien lo padece.

Reflexionar, el respiro que necesitamos
Los cambios son dinámicos, acelerados y si no se abre espacio a la reflexión, a la pausa para tomar un respiro, la vida se va consumiendo sin un sentido vital que oxigene la existencia. A lo largo del camino se van creando necesidades que en muchos casos sólo buscan complacer al exterior a costa del bienestar interior.

Una de esas necesidades creadas es el dinero, pero no solo para cubrir necesidades básicas, sino para mantener un estatus social o económico, entrando en una feroz competencia en quién tiene más, pretendiendo con ello mantener el poder perpendicular que da el dinero sobre el poder personal que solo lo da el autoconocimiento, la conciencia y reconocimiento del ser, como la esencia de la plenitud, el bienestar y la felicidad.

¿Te ha pasado que dedicas mucho de tu tiempo a trabajar incansablemente para obtener la plata o el dinero que crees necesitar, empeñando familia, salud, bienestar, relación de pareja y cuando lo obtienes no sientes la felicidad que esperabas ni sabes para qué te sirve, llenándote sólo de desazón, frustración, agotamiento, decepción e insatisfacción con solo sopesar lo empeñado con lo obtenido?

Te das cuenta que el costo ha sido muy alto para el beneficio logrado.

¿Conoces personas que se encuentran, según tu percepción, en una posición “privilegiada”, donde pareciera tener dinero, carros, viajes, fama y todo cuanto alguien alguna vez soñó como la “vida ideal”, pero sin que lo sepas, sienten un hueco en el alma, una insatisfacción crónica y no saben por qué?

Este hueco, ese vacío interior no lo puede llenar nada de afuera. De manera que es necesario, recuperar el oxígeno de la vida, revitalizarse y recargarse de nuevas energías, encontrando nuevos motivos, conectarlos con la esencia espiritual y humana, que está más allá de cualquier deseo material.

Sentido de vida, el camino de vuelta a casa
La clave para recuperar las fuerzas y ganas de vivir, la alegría y el calor del hogar, es enfocarse en encontrar un significado, incluso si éste es precisamente estar en ese limbo, como sucede en la filosofía oriental, donde el vacío representa el camino para la transformación e iluminación interior, perdiendo el enfoque negativo que se la ha dado en la cultura occidental.

Muchos pretenden llenar ese vacío sumergiéndose en adicciones como: el alcohol, las drogas, el sexo, el trabajo, las compras, las redes sociales, el ejercicio o la comida, pero allí no están las respuestas. Al contrario, estas conductas sólo apaciguan momentáneamente, el desánimo, la desazón, el miedo a la soledad, la depresión o ansiedad, pero nunca resolverá el problema.

Si estás en ese proceso de crisis existencial, sea por la razón que sea: pérdida de un ser querido, de una relación amorosa o laboral, perdidas económicas o de salud, aun puedes encontrar dentro de ti una razón significativa que le dé sentido a tu nueva vida:

1. Reconoce y acepta que te encuentras en un hueco emocional, no tiene nada de malo sentirse así. Eventualmente es una oportunidad. No dejes que se convierta en un riesgo.

2. Identifica aquello que ha despertado la insatisfacción crónica.

3. Ten compasión de ti mismo, no lástima, y decídete a emprender una nueva ruta.

4. Regresa a tu esencia personal y espiritual.

5. Sal del estrés crónico y levántate.

6. Busca ayuda psicológica profesional, ya que es necesario hablar de lo que te pasa con quien no te juzgue ni critique y que te ofrezca herramientas y estrategias para salir del hueco.

7. Descarta con tu psicólogo (a) cualquier tipo de trastorno de personalidad, depresión y/o ansiedad.

8. Practica Mindfulness, ejercicios de respiración consciente, meditación activa o pasiva.

9. Haz ejercicios físicos.

10. Redescubre aquello que es realmente importante para ti.

¡Nada de lo que esté fuera de ti podrá iluminar lo que ya goza de brillo propio!

¡Descubre tu próxima misión y conéctala con tu sentido de vida!

Yamilet Pinto

Psicóloga

@yamiletpinto

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