Opinión

¿Y si Cambio? Rescatemos el poder de nuestras fortalezas internas

Las nuevas generaciones de psicólogos se han comprometido ampliar el enfoque de la Psicología.
Yamilet PINTO
sábado, 28 noviembre 2020

Por mucho tiempo, el enfoque de una buena salud mental y emocional se ha centrado en resolver lo que “está mal en nosotros”, esos asuntos que nos hacen sufrir como, por ejemplo, las enfermedades o trastornos mentales, la depresión, el estrés, el dolor, el sufrimiento, la agresividad, la ira y la ansiedad.

En el campo laboral, el enfoque ha estado en la resolución de conflictos, estrés laboral, el Síndrome de Burnout o los comportamientos contraproducentes que afectan el clima laboral, entre otros aspectos que, si bien son muy importantes en la calidad de vida del ser humano y ha dejado resultados positivos, ha hecho que por mucho tiempo se haya dejado de lado el enfoque de bienestar, serenidad, optimismo, esperanza, autoeficacia, automotivación, resiliencia, autoaceptación y paz interior como aspectos fundamentales para lograr la felicidad y la plenitud.

Las nuevas generaciones de psicólogos se han comprometido ampliar el enfoque de la Psicología, aprovechando todo el conocimiento anteriormente alcanzado y que tantas luces ha ofrecido en el camino de la sanación y están impulsando un movimiento que aprovecha al máximo el potencial y los recursos de las personas, para empoderarlas y hacerlas más felices en medio de cualquier adversidad.

Autores como Abraham Maslow, Carl Rogers, McClelland y más recientemente psicólogos como Martin Seligman, Csikszentmihalyi, Daniel Goleman y otros nos van dejando un legado de conocimientos y herramientas para salir del sufrimiento y experimentar la felicidad y el bienestar que tanto nos merecemos, lo cual nos convierte en personas más productivas, más sanas, más felices y más resilientes.

¿Dónde están nuestras fortalezas?

Todos hemos sido dotados de un don especial para hacer algo, para cumplir nuestra misión en la vida, para alcanzar y desarrollar nuestra visión y hacer el bien en el mundo.

A ese conjunto de dones, habilidades, cualidades es lo que se conoce como fortalezas personales. Muchos no las sabemos reconocer, por diversas razones, bien porque nunca nos las reconocieron, nunca nos dijeron que las teníamos o bien porque nunca nos dimos cuenta que somos buenos para algo, que nos sale fácil o nos resulta tan obvio, tan natural que lo dejamos pasar y no le damos importancia y resulta que es allí donde está nuestro gran don.

Nuestras fortalezas nos pertenecen, están con nosotros siempre. Aunque otros no crean que las tenemos, aunque nos hayan hecho creer que carecemos de ellas, aunque nunca nos las hayan reconocido están allí para enriquecer nuestra vida y contribuir a nuestro bienestar.

Nacimos con un don y a lo largo de los años aprendemos y desarrollamos otros dones y fortalezas, incluso podemos ampliar las características con las que nacimos, pulirlas como un diamante porque en cada uno de nosotros existe una fuerza activa que nos conduce hacia la autorrealización, un deseo de ser “todo lo que tú puedes ser”.

Reconoce y potencia tus fortalezas personales

¿Te cuesta reconocer las fortalezas con las que cuentas? Atrévete a descubrirlas sin temor, recuerda que naciste para ser algo grande, alguien bueno, alguien exitoso, no te quepa la menor duda de eso.

Tu misión de vida está esperando por ti, aunque las adversidades parecieran estar en contra de que la alcances, tú estás despertando a la conciencia de reconocer tus fortalezas y tus dones, sólo necesitas estar dispuesto a estar dispuesto.

Si hay algo que he aprendido es que las fortalezas también se aprenden y desarrollan, es decir que, si hay algo que necesitamos mejorar y potenciar en nuestra vida, no hay límites, tenemos las oportunidades de adquirir el conocimiento y la práctica para lograrlo.

¿Puedes trabajar en equipo?

¿Puedes enseñar a otros a ser mejores personas?

¿Puedes crear a través de tus manos, de tus palabras, de tus pies o de tu cuerpo nuevos artes, nuevas formas para mejorar tu propia vida o la vida de otra persona?

¿Puedes escribir, cantar, ejercitarte, correr, dibujar, coser, hornear, decorar, cocinar, limpiar, reparar, diseñar, programar, organizar, planificar, enseñar, hablar, orar, leer, apoyar, cuidar, sanar o curar?

¿Puedes escuchar atentamente, dar una palabra de aliento, levantarte de la adversidad, ver oportunidades en medio del caos, aprender de tus errores, agradecer y solidarizarte con otros?

¿Puedes experimentar bondad, amor incondicional, justicia, perdón, humildad, sencillez, empatía, solidaridad?

¿Te consideras paciente, persistente, apasionado, comprometido, enfocado, resiliente, esperanzado, optimista, curioso, creativo, imparcial, flexible, fluido, relajado, trabajador u honesto?

Responde estas preguntas, encuéntrate contigo mismo y hazte consciente de cuan bendecido eres al contar con tantas fortalezas en tu vida. Sólo necesitas ponerlas a tu servicio personal y al servicio mayor de los demás.

Una persona que reconoce con humildad cuáles son sus fortalezas, es una persona que contribuye a su propia felicidad y de manera inevitable contribuye a la felicidad de otros.

Las fortalezas no nos eximen de los problemas, hace que los resolvamos desde una perspectiva más amplia, más flexible, más despierta y nos permiten aprender a ver las adversidades o dificultades como oportunidades de crecimiento y evolución personal, y lograr trascender y ser más feliz y dar más felicidad a quienes nos rodean.

¿Te imaginas un mundo así? No es utopía, es una decisión.

¿Comenzamos a reconocer nuestras fortalezas? ¿me acompañas?

Nuestras fortalezas nos esperan, preparémonos para potenciarlas.

yamipinto@gmail.com

Psicoterapeuta/Life Coach

@yamiletpinto

Ten la información al instante en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente link: https://chat.whatsapp.com/CkjSln5sfMt6c1gRE4hBhD

También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí https://t.me/diarioprimicia

error: