¿Y si cambio? Comunicarse con sinceridad es la base de la confianza en la pareja

Muchas parejas atraviesan crisis en su relación, independientemente del tiempo que estén unidos.

Las causas son diversas: la desconfianza, los celos, las mentiras, la infidelidad, la carencia de un buen sexo, el silencio de las situaciones que ocurren, los problemas económicos, el estrés, la enfermedad de alguno de los miembros, la crianza de los hijos, la relación con las familias extendidas.

Son problemas que crean conflictos mayores si no se atienden a tiempo, causando rupturas indeseadas y divorcios o separaciones muy dolorosas.

Uno de los principales problemas que enfrenta la pareja en la actualidad es la falta de una comunicación asertiva o empática. Una sincera comunicación es necesaria para el éxito de una buena relación.

Si las personas no se dicen la verdad, si se mienten mutuamente, si caen en suposiciones o creen en sus propios fantasmas, nunca podrán comunicarse adecuadamente y por ende nunca podrán consolidar una buena relación, afectando sus vidas y la vida de sus hijos

La buena comunicación se aprende

La buena práctica comunicativa es un proceso continuo, que se aprende paulatinamente y no tiene fin.

Requiere transformar modelos desadaptativos de comunicación, reconocer patrones aprendidos de la infancia, identificar distorsiones cognitivas que afectan e influyen en la manera de interpretar los hechos.

Importante es también, concientizar que somos seres en constante cambio y que es necesario aplicar lo aprendido en la práctica cotidiana de convivencia en pareja.

Al revisar lo que ocurre dentro del proceso comunicativo de la pareja, podemos notar que una de las grandes debilidades es que las personas no se escuchan empáticamente o no expresan oportuna y adecuadamente lo que piensan o sienten, dándolo por cierto en su mente y asegurando aquello de lo que no tienen evidencia objetiva, concreta y palpable.

Esto dificulta significativamente la comunicación y agudiza los conflictos, las discusiones, las peleas y los maltratos.

Una de las maneras de aprender un nuevo modelo comunicativo es conocer las principales distorsiones cognitivas o pensamientos automáticos que, psicológica y emocionalmente, influyen en la comunicación, ya que transforman la realidad y la manera de razonar de la persona a través de interpretaciones erróneas de lo que sucede en la pareja.

Algo que puede ocurrirle a cualquier persona, el problema es cuando esta manera de pensar se hace habitual, generando dudas, desconfianza, frustración, malestar y sufrimiento.

En este sentido las principales Distorsiones Cognitivas o pensamientos automáticos en la pareja son:

1. Adivinación del futuro: Es la tendencia a querer predecir lo que pasará en el futuro. Pensamientos comunes son del tipo: “Sabía que volvería a pasar” ,“Él debe saber lo que me gusta, para dónde quiero ir o qué quiero comer, sin que yo se lo diga”. La pregunta es ¿cómo podría saberlo si no se lo dices? Nadie es adivino para saber qué ocurrirá en el futuro. Él o ella necesita escuchar lo que te gusta, lo que quieres, lo que deseas y lo que te molesta o no te gusta.

2. Catastrofismo. Es muy común en las relaciones de pareja. Ocurre cuando existe la tendencia de imaginar lo peor que puede pasar, como, por ejemplo: “No ha llegado a casa porque seguro le pasó algo malo” “Me va a dejar y se va a ir”.

3. Sobregeneralización: es un tipo de pensamiento donde se parte de una situación específica a una general. Por ejemplo, algo que haya ocurrido alguna vez se generaliza como que siempre va a pasar. Un caso típico es la infidelidad: “Siempre me pasa lo mismo”, “Todos los hombres son iguales” “Nunca dicen la verdad” “Todos los hombres mienten” “Me van a ser infiel otra vez, como siempre”. Si quieres saber cómo desafiarlas, aplica el modelo de preguntas, desafiando esta distorsión a través de preguntas ¿Siempre? ¿Todos? ¿Nunca? ¿Cómo siempre?.

4. Etiquetado: Es una forma de expresarse despectivamente sobre ti misma y sobre tu pareja, etiquetando y obviando sus aspectos positivos: “Eres incapaz de hacer la comida bien” “Si no fueras tan floja, la casa estaría más ordenada”. “Soy una inútil. No sé ni cambiar un bombillo”. Esto hace demasiado daño al otro.

5. Deberías o pensamientos acusatorios: Es una forma de presionarse a sí misma y a la pareja a hacer o lograr cosas. Por ejemplo: “Yo debo hacer las cosas bien” “Tú debes saber lo que me pasa” “No debes hacer eso” “Deberías ganar más dinero”, son pensamientos acusatorios, demandantes, exigente e imperativos que carecen de realidad y objetividad, por lo tanto se generan conflictos.

6. Lectura de pensamientos: Es una forma de hacer conclusiones sobre lo que la pareja piensa o siente. Por lo general esa conclusión es negativa, tanto como las emociones y conductas que generan: “Seguro que piensa que no me voy a dar cuenta”; “Si le digo algo seguro se va a molestar” “Seguro se molestó conmigo, por eso no me habla”. La pregunta es ¿Puede alguien adivinar el pensamiento o sentir del otro?

Son sólo algunas de las Distorsiones Cognitivas que afectan la relación de pareja, concientízalas y aprende de ellas, te aseguro que tu proceso comunicativo se transformará más rápido.

Yamilet Pinto

@yamiletpinto

Psicóloga

FPV-16092

yamipinto@gmail.com

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