¿Y si Cambio? Claves para potenciar la salud mental y el bienestar emocional del Adulto Mayor

Llegar a la vejez es una fase más del ciclo vital y no tiene por qué ser negativa ni tampoco equivalente a enfermedad, tristeza y depresión, sin embargo la realidad de muchos adultos mayores, especialmente en Venezuela, está asociada a esas emociones y trastornos, incluyendo la soledad, la pérdida de la independencia, el abandono, insomnio, duelo y la angustia por verse como una carga para sus familiares o sentirse desasistidos en este periodo de tanta vulnerabilidad, entre otras manifestaciones psicológicas.

Además, de los padecimientos fisiológicos, como la incapacidad y/o dificultad para movilizarse y valerse por sí mismos, dolores o enfermedades crónicas, como la hipertensión, o la diabetes que les impiden desarrollar su vejez en un ambiente de sanidad y bienestar.

El entorno socioeconómico tiene un gran impacto en esta realidad del Adulto Mayor, donde la migración, la pandemia y la disminución de la capacidad de ingresos, que les impide el acceso a los alimentos, servicios de salud y medicinas ha agudizado estos cuadros psicológicos y psiquiátricos que afecta a un importante número de adultos mayores.

La familia, sustento invaluable del adulto mayor

Una de las claves para que el Adulto Mayor pueda llevar adelante su proceso de vejez de manera más eficiente es contar con sus propias habilidades de conexión consigo mismo y con el acompañamiento familiar, aspectos que fortalecerán su autoestima, autovaloración y autopercepción positiva y resiliente.

Es necesario asumir un proceso de adaptación y transformación vital, en este natural proceso de cambios conductuales, ambientales, físicos, emocionales y mentales, para el cual deben prepararse tanto el adulto mayor como su entorno familiar.

En este sentido, la Psicología Positiva plantea la ejecución de actividades físico-recreativas, la estimulación de la interacción social, con familiares y amigos y potenciar las emociones positivas, profundizando en sus recursos personales, como la sabiduría, la experiencia y el conocimiento.

Desde esta perspectiva, prepararse para vivir una nueva vida es fundamental, conversar y concientizar los cambios será muy beneficioso en el proceso de adaptación, transformación y aceptación de la nueva realidad. Es posible que tratar estos temas en familia y en lo individual sea algo complejo, pero sin duda necesario y urgente, porque, por ejemplo la actividad laboral será totalmente diferente a la que ejercía antes de su jubilación o retiro; necesitará acostumbrarse a una vida sin acompañamiento de los hijos, por efecto de la migración, requerirá prever cómo afrontar la soledad propia de esta etapa, la cual muchas veces se da por el fallecimiento de la pareja de tantos años, o de las vecinas, comadres o amigas; y sin duda necesitará transitar los procesos de salud con positivismo y esperanza e incluso, si fuera el caso, preparar un buen morir.

Si bien es cierto, el apoyo económico que la familia pueda aportar para la adquisición de comida y alimentos es importante, también es cierto que el Adulto Mayor necesita sentirse útil, para lo cual puede realizar actividades cotidianas, sencillas del hogar, también requiere ejercitarse, hablar y sentir el afecto de sus seres queridos, hijos y nietos, incluyendo la atención médica, afectiva y emocional.

Llenar de luz y esperanza para un nuevo amanecer

Las funciones psicológicas van declinando, así como van cambiando los comportamientos. Se hacen más lentos en su hablar, caminar y accionar. No responden de la misma manera. Su memoria, sus niveles de atención, su carácter y su capacidad de procesar la información van cambiando.

Es por ello que los cuidadores, familiares y amigos hemos de comprender que no se trata de una “manipulación o necedad”, realmente son cambios profundos que están experimentando a nivel neurológico, psiquiátrico y psicológico.

Regañarlos, gritarlos, maltratarlos para que coman, duerman o no se quejen de sus dolencias no les ayuda en nada. Es comprender este proceso lo que permitirá que estemos presentes en esta nueva etapa, para fluir con la vida y sus cambios.

Vamos a fortalecer su autoestima y evitar que caigan en depresión o angustia, miedo o soledad. Hagamos que recobren su sentido de vida:

1. Haciendo uso saludable del ocio, permitiéndole ejecutar actividades sencillas que le hagan sentir útil.

2. Ayudándoles a tener una mejor percepción de sí mismos. Esto les ayudará a procesar mejor sus errores de vida, y estarán listos para pedir perdón o perdonar, procesos útiles para su liberación emocional.

3. Destacando su fortaleza y resiliencia, haciéndoles ver lo fuerte que han sido, lo valiente que fueron para soportar y superar grandes retos y desafíos.

4. Ejercitando la gratitud por los logros alcanzados, haciéndolos sentir orgullosos de esas experiencias, lo cual les ayuda a sentir alegría y satisfacción personal .

5. Sembremos en su corazón esperanzas para juntos ver el futuro con más alegría y optimismo.

6. Riendo de las anécdotas y compartiendo ratos de buen humor.

7. Llenando de amor su corazón, disfrutado de su ser.

@Yamilet Pinto

Psicoterapeuta

Coach de vida

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