¿Cómo es el sueño en los perros?

El sueño en los perros por lo general consiste en un ciclo de una media de 16 minutos de sueño y 5 de vigilia. Después, el canino puede volver a dormirse y comenzar un nuevo ciclo.

Es decir, un can puede llegar a alcanzar hasta 23 ciclos sueño-vigilia en 8 horas.

Si te apasiona ver dormir a tu mascota, te conviene saber más de este proceso en el que incluso son capaces de tener sueños.

Los perros son dormilones por naturaleza, dependiendo de la edad las horas diarias de sueño cambian, por ejemplo, un cachorro puede dormir entre 18 y 20 horas al día.

Cuando crecen las horas se reducen a más o menos 15; en la edad adulta el sueño de los perros no es seguido, en la noche pueden dormir hasta 10 horas y el resto de horas lo reparten en varias siestas durante el día.

Por otra parte, la calidad del sueño del perro depende en gran parte de su actividad; por eso es importante que los perros se ejerciten, jueguen y corran durante el día para que saquen toda su energía y al dormir, se recarguen nuevamente; tal como ocurre con los seres humanos.

Fases del sueño

El adormecimiento, que trata de un momento de somnolencia entre el momento en que entra en vigilia hasta el sueño, puede durar apenas unos minutos.

El sueño ligero, al que también se le conoce como sueño paradójico, el ritmo respiratorio y cardíaco disminuye, en esta fase es difícil que el perro se despierte a menos que tenga un impulso externo fuerte.

El sueño profundo o sueño delta, donde la respiración es lenta y las ondas cerebrales son amplias. En esta fase el perro no sueña y dura entre 20 a 25 minutos.

Por último, el REM que es la fase del sueño en la que los perros sueñan y pueden presentar movimientos oculares rápidos, pues el cerebro está con mucha actividad captando información de su entorno. Incluso, algunos canes mueven ligeramente sus patas o sus orejas.

Si deseas que tu mascota tenga un descanso placentero, la clave está en facilitarle una buena cama, crear un clima adecuado e incitarlo a realizar actividades durante el día.

Colócale una cama cómoda, con un buen relleno y que conserve el calor corporal, una cobija ayuda mucho a que la cama esté más caliente, especialmente si hace frío.

Procura que la cama esté siempre en el mismo lugar para que el perro sepa que allí es su lugar de descanso, donde él se pueda sentir tranquilo y protegido, de tal manera que no la afecten sus sueños.

El ejercicio diario ayuda a que el perro gaste la energía que tiene y, por ende, necesite dormir para recuperar la energía.

Es imprescindible que observas a tu mascota, pues si duerme más de lo que indicamos, es posible que esté presentando algún problema de salud, o en otros casos, depresión o tristeza.

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