Autorrealizarse como mujer, más allá de la maternidad
Desde pequeñas nos inculcan un modelo de vida perfecta: ser buenas niñas, estudiar, graduarnos, tener casa, carro, novio, casarnos y tener hijos. Esto último representaría la autorrealización de la mujer o el culmen de la vida, lo cual es cierto para muchas mujeres. No así para otras tantas. Esta dinámica ha cambiado.
Muchas mujeres de la nueva generación, buscan emprender, ganar dinero, viajar, independizarse, ser exitosas y lograr la relación de pareja que las acompañe en su camino de mujeres plenas.
El sueño de ser madres queda de último lugar y puede que no lo alcancen, no porque no puedan sino, porque no lo desean, no es su prioridad, ni es de su interés ni determina su sentido de autorrealización, plenitud y felicidad. De manera que deciden aplazar la maternidad o sencillamente no tener hijos.
Esta situación les genera una gran presión social, para la cual se están preparando, debido a que se convierten en el centro de críticas de su entorno más cercano, quienes les acusan de actuar incorrectamente e incluso, les predicen que en el futuro se arrepentirán de no haber tenido hijos.
La gran pregunta es, si la mujer no desea tener hijos ¿lo correcto sería ir a una maternidad no deseada, solo por complacer a su pareja, madre o familia? Y no se trata de ser egoísta, individualista o anormal, sino de tener la capacidad de decidir cómo quiere experimentar su vida y su propia autorrealización.
Cuando se vive en pareja, aunque la decisión de ser madre es de la mujer, la de ser padres los involucra a los dos, por lo tanto, lo deseable es que ambos decidan cuál sería su proyecto de pareja y en ese sentido, decidir el futuro de la relación.
Un aspecto importante al momento de tomar la decisión de ser o no ser madre, es tener claros los motivos que la sustentan, por ejemplo, no es suficiente elegir la maternidad solo porque:
- La madre quiere un nieto.
- De todas las amigas eres la única que no tiene hijos.
- Necesitas a alguien que te acompañe en la vejez.
Tampoco es suficiente no serlo porque:
- Quieres llevar la contraria a la sociedad.
- Eres rebelde y no quieres complacer a otros.
Tener claros los motivos que sustentan la decisión sobre la maternidad hará que puedas sentirte más segura de haberla tomado, incluso en tu intimidad puedes reconocer que no te sientes preparada, que es una responsabilidad muy grande, sentir que te supera o sencillamente que no es para ti y si es así, podrías dedicar tiempo y espacio para disipar tus temores, dudas, sanar heridas o trascender resentimientos que te hayan alejado de la maternidad y reafirmar o cambiar tu decisión. Siempre es algo que podrás decidir en conciencia plena del significado que tiene para ti.
Muchas personas se preguntan si la mujer que decide no ser madre tiene algún trastorno mental o si debería ir al psicólogo, porque no es posible ni es normal que quiera quedarse “sola”, como si el propósito de la maternidad es eliminar el miedo a la soledad.
Al contrario, una mujer segura de sí misma, con buena salud mental y alta autoestima, traza su proyecto de vida con claridad e incluye en él aquello que le provee satisfacción personal, autorrealización y motivación al logro de metas académicas, profesionales, económicas, deportivas, laborales, financieras, sociales o espirituales sin que eso implique la maternidad, ni culpa por no serlo.
@Yamilet Pinto
PsicólogaTerapeuta de Pareja y Familia
(0424) 901.93.90
yamipinto@gmail.com
Ten la información al instante en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente link: https://chat.whatsapp.com/
También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí:https://t.me/