¿Y si cambio? Despega tus metas y ten un 2026 pleno
Se acerca el fin de año y el aire se llena de balances, promesas y la vibración de un nuevo comienzo. Pero, ¿cuántas veces hemos cruzado el umbral de enero con una lista de deseos que, para marzo, se convierte en un recordatorio de lo que “deberíamos” estar haciendo?
Si deseas que el 2026 sea el año en que finalmente te sientas plena, conectada contigo misma y viviendo tu propósito, céntrate no sólo en hacer la lista de deseos, sino en tomar acciones concretas que te acerquen a diseñar la vida que quieres.
Tu felicidad depende de tí
¿Te ha pasado que un día te das cuenta que has vivido tratando de cumplir las expectativas de los demás? Sin darte cuenta, has delegado tu felicidad a variables externas.
Este darte cuenta, te invita a darle un giro a tu vida y una de las formas de comenzar es reconocer que tus pensamientos y acciones son los que moldean tu realidad emocional, no lo que ocurre afuera. Es tu autoconocimiento y determinación lo que marcará un antes y un después en tu vida.
De manera que toca ser más flexible y disciplinada, con visión y gentileza contigo misma. Conectando con el disfrute y el crecimiento, conectado con tu ser espiritual, emocional y profesional para que te lleve a despegar tus metas en un viaje único e irrepetible.
Claves para hacer tu plan estratégico de vida 2026
El siguiente paso es diseñar un plan estratégico basado en la psicología del cambio y el liderazgo personal, para que tu próximo año sea transformador:
- La Estrategia del “Silencio Productivo. La acción sin dirección es agotamiento. Antes de llenar tu calendario, date un espacio de silencio diario, aunque sean 10 minutos y pregúntate: ¿Qué anhelo profundo guía mi alma? ¿Qué haría yo si el miedo no existiera? ¿Qué significa “disfrute” para mí?
Puedes cerrar los ojos y escribir una Declaración de Propósito Personal de 3 líneas que no incluya roles de madre, esposa o empleada. Enfócate en tu esencia. Por ejemplo: “Mi propósito es inspirar alegría, crear mi vida con valentía auténtica”. A partir de hoy, ésta será tu brújula.
- Crea hábitos de Salud Emocional. Una vida plena comienza con una mente sana que te permita fluir con los cambios, para ello necesitas herramientas como adoptar un hábito de Salud Mental no Negociable. Puede ser una meditación de cinco minutos o practicar la gratitud, escribiendo tres cosas por las que estás agradecida.
- Diseña tu tablero de sueños con su respectivo plan de acción. La lista de deseos es solo un boceto. Necesitas ponerle visión, acción y fe. Recuerda que, los sueños sin pasos concretos son solo ilusiones. Entonces, convierte tu lista de deseos en Metas SMART (Específicas, Medibles, Alcanzables, Relevantes, con Límite de Tiempo). Por ejemplo, quieres cambiar de trabajo. Enfócate en dar el primer paso: Actualizar tu CV este mes. La fe se alimenta de la acción constante, por pequeña que sea. Así que define el siguiente paso, para que tu meta sea una realidad.
- Fortalece tu disciplina y flexibilidad. Muchas mujeres se agotan antes de comenzar, por su extrema autoexigencia. El liderazgo personal te pide ser como el bambú, fuerte pero capaz de doblarse con el viento. Introduce la “Regla del 80/20”. Sé disciplinada al 80% con tus nuevos hábitos (alimentación, ejercicio, trabajo). Permítete un 20% de flexibilidad sin culpa. Si un día fallas, no tires todo por la borda. Aplica la gentileza contigo misma, aprende del desliz y retoma al día siguiente.
- Protege tu paz. Tu plan de vida no puede prosperar si tu entorno drena tu paz o te recuerda constantemente quién “deberías” ser. Así que comienza por hacer un Inventario de Relaciones e identifica a la persona (o actividad) que te inspira y llena de paz, y a la que te drena. Planifica activamente aumentar el tiempo con tus fuentes de energía y paz, establece límites respetuosos y firmes con las fuentes que te drenan.
¡La vida plena no es un destino; es una forma intencional de vivir!
Yamilet Pinto
Psicóloga
FPV. 16.092
@Yamiletpinto
