Trastorno de ansiedad generalizada
La ansiedad, en ocasiones, es parte normal de la vida y como es lógico pensar, cualquiera puede tener en algún momento, un estado de mucha preocupación y eso no significa que esté presentando una patología. Todos nos preocupamos por cosas o diversas situaciones, sin embargo, las personas que padecen de trastorno de ansiedad generalizada (TAG), se preocupan extremadamente o se sienten muy nerviosas por éstas, incluso cuando hay poca o ninguna razón para preocuparse.
Las preocupaciones parecen flotar de un problema a otro, como problemas familiares o de relaciones interpersonales, cuestiones de trabajo, dinero, salud y otros problemas. Incluso siendo consciente de que sus preocupaciones o miedos son más intensos de lo necesario.
El trastorno de ansiedad generalizada es una de las enfermedades mentales más frecuentes, donde el individuo experimenta una ansiedad durante la mayor parte de los días y a largo plazo, por un periodo mínimo de 6 meses; pero la mayoría de los pacientes han sufrido la enfermedad por años antes de buscar tratamiento.
La característica principal del trastorno de ansiedad generalizada, es que el estado de preocupación constante es tan intenso, desproporcionado, incontrolable e irreal respecto de aspectos de la vida diaria, que altera la vida cotidiana de quien la padece. Es una preocupación excesiva, difícil de controlar, que se acompaña frecuentemente de otros síntomas psicológicos y físicos.
La ansiedad y preocupación en el TAG, se asocian a tres o más de los siguientes síntomas: Inquietud o impaciencia, cansancio fácil, pensamiento catastrófico, intolerancia a la incertidumbre, dificultad para concentrarse, irritabilidad, tensión muscular, alteraciones del sueño; que provocan malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la vida del individuo. Los niños y los adolescentes con TAG a menudo se preocupan excesivamente sobre su rendimiento, como en la escuela o en los deportes.
Los síntomas físicos asociados originan múltiples visitas a médicos de diferentes especialidades, mas por la preocupación y el miedo, que por su severidad; siempre pensando en las peores cosas. El paciente con TAG como consecuencia puede presentar ánimo depresivo, restricción de salidas, mala relación con hijos o pareja por excesivo control.
Por lo general, el trastorno de ansiedad generalizada se trata con psicoterapia, medicamentos o una combinación de ambos. Su médico debe hacerle una evaluación clínica para asegurarse de que sus síntomas no sean causados por algún problema físico no relacionado. Es posible que le recomiende que consulte con un especialista, como un psiquiatra o psicólogo.
El psiquiatra se especializa en el diagnóstico y el tratamiento de afecciones de la salud mental, y el psicólogo y otros profesionales de la salud mental pueden diagnosticar la ansiedad y brindar asesoramiento (psicoterapia).
También son útiles las técnicas de reducción de estrés para controlar la tensión psíquica y muscular: técnicas de relajación y respiración profunda, meditación, ejercicio físico, yoga. Así mismo realizar cambios en la alimentación, por ejemplo, la eliminación gradual del café, bebidas estimulantes, alcohol y refrescos que contengan cafeína.
qcfanny@hotmail.com
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