Semana en domingo

Billete mata ideología

El banco ruso Gazprombank no le está parando mucho a la identidad ideológica o empatía entre Putin y el chavismo, anteponiendo a ello sus intereses financieros y presionado por las sanciones norteamericanas contra el gobierno de Maduro. Este banco es propiedad de la petrolera Gazprom, la empresa más grande e importante de Rusia, que aunque funciona como una empresa privada es controlada por el gobierno ruso. Las últimas decisiones de Gazprom van en contrario de las declaraciones de solidaridad de Putin y parecieran indicar que Rusia pudiera estar acercándose a la posición de China, en el sentido de no arriesgarse a ser blanco de las sanciones de Trump, por el gigantesco peso de la economía norteamericana en el mundo. Los economistas dicen que no hay transacción financiera internacional que de alguna manera no tenga que ver con ella. En otras palabras: “soy tu amigo, pero no me voy a enterrar contigo”. El primer paso a un costado fue la decisión de Gazprombank de cerrarle las cuentas a Pdvsa, aunque el gobierno ruso decidió mudarlas al Russian Financial Corporation, Rusfincorp, que como el anterior también es un banco controlado por el Kremlin. Pero a los pocos días, ese banco vendió las acciones que tenía en GPB Global Resources, que a su vez es dueña del 40 por ciento de Petrozamora en sociedad con Pdvsa, que detenta el restante 60. La noticia de que Gazprombank se desprendió de su participación en esta empresa sorprendió al mundo petrolero, porque hace una semana Pdvsa anunció que aumentaba el suministro de gas a Petrozamora como parte de un proyecto conjunto con ese banco ruso para incrementar 16 por ciento la producción del yacimiento hasta 126 mil barriles diarios. El yacimiento que opera Petrozamora está en el Zulia. Hasta este viernes se ignoraba quien era el comprador del 40 por ciento de Petrozamora, pero sea quien sea queda ahora como potencial blanco de las sanciones de Estados Unidos. Algunos analistas financieros internacionales creen que estos movimientos de Rusia están orientados a mejorar sus relaciones con un eventual nuevo gobierno, por el temor a perder el préstamo que por más de 1.500 millones de dólares le dio Rosneft al gobierno de Maduro y que tiene como garantía 49,9 por ciento de las acciones de Citgo. El problema es que la Asamblea Nacional no reconoce como válidos los préstamos externos que no hayan sido aprobadas por ella, y además Citgo tiene una nueva directiva designada por Guaidó y reconocida por el gobierno norteamericano. Eso pudiera significar que ese préstamo queda sin garantía real y un eventual nuevo gobierno no lo reconocería. Se ignora el estatus actual de ese préstamo porque lo último que se supo, en octubre del año pasado, fue que Pdvsa estaba buscando la manera de liberar la garantía de Citgo a cambio de un convenio de entrega de crudo, a pesar de que la producción estaba en descenso y ya había dificultades para mantener los envíos a China y los de otros préstamos a Rusia que también estamos pagando con petróleo.

Guri

Si fuera cierta la versión de que el mega apagón fue por un ataque terrorista vía Internet, ello revelaría en todo caso que hubo negligencia en establecer las protecciones necesarias para impedir que cualquier hacker pudiera provocar un desastre como el que sufrimos durante tres días. Porque hasta un chamo de 14 años pudo penetrar los sistemas de protección del Pentágono, y otro jovencito de 17 años logró maniobrar varios satélites de comunicación. Pero los expertos tienen la opinión unánime de que eso no es posible porque las computadoras que integran el sistema de protección de Guri no están conectadas a Internet. A sabiendas de que eso no es posible, surgió entonces la versión de que fue un rayo magnético lanzado sobre la línea de 800 KVA. El gobierno mantiene su tesis de que fue un sabotaje de la oposición y sobre esa base la Fiscalía tiene abierta una investigación, aunque hasta el momento no hay evidencias firmes que la sustenten. Sin embargo, para el establecimiento de la verdad sobre este hecho, habrá que tomar en cuenta los videos divulgados por la Nasa, tomados horas antes del apagón, que revelan incendios de vegetación en el corredor de las líneas de alta tensión que salen de Guri, así como en las cercanías de los patios de distribución. Más allá de las consideraciones de tipo político, inevitables en la situación que vive el país, los venezolanos tenemos el derecho de exigir que se nos diga la verdad sobre este hecho y que se establezcan las responsabilidades a que haya lugar, porque no puede ser que ocurra un accidente como este y no se sepa qué fue lo que pasó y quienes son los culpables.

Industrias básicas

Me llegan innumerables reportes del desastre de las industrias básicas, que redundan sobre lo ya conocido. Lo concreto es que la producción está casi en cero desde hace tiempo y si no las han cerrado del todo es porque el gobierno paga los salarios para impedir el impacto social negativo de dejar sin empleo a 50 mil personas. Hace años que debió haberse hecho una reconversión laboral, para que esa masa de trabajadores fuera reinsertado en otros sectores del aparato productivo del país, como el petrolero y el agro industrial. Se optó por el camino más fácil, que es imprimir billetes y pagar con bolívares los 1.000 millones de dólares anuales que me dicen es lo que cuesta mantener esas nóminas. ¿Qué si son recuperables las industrias básicas? La respuesta de los técnicos es que algunas plantas están obsoletas y sale más barato montar una nueva que intentar recuperar la vieja. Otros creen que con recursos suficientes hay posibilidad de recuperar casi totalmente la capacidad instalada de Venalum, Carbonorca, Bauxilum y buena parte del plantel de briqueteras, así como de Sidor. Pero la pregunta es ¿De dónde van a salir los 15 mil millones de dólares que es lo mínimo que se necesita para que algunas plantas recuperen su producción?

Cuatro

-Uno: El gobierno terminó de tirar la toalla en el control de precios y la especulación está desatada. Ello ayudó a mejorar el abastecimiento, pero a precios impagables. Hay de todo, es verdad, pero hasta diez veces el último precio regulado. El que tiene algo que otro necesita, se aprovecha de ello para expoliarlo sin piedad.

-Dos: El pana Alfredo Stelling está nuevamente en su casa en Margarita, luego de superar algunos quebrantos de salud que lo obligaron a estar unos días en la clínica. “Murmullo”, como lo llamamos sus amigos, sigue recibiendo múltiples manifestaciones del afecto que sembró mientras estuvo en Guayana.

-Tres: Expertos en el tema me dicen que está bajando la venta de oro al gobierno, porque los mineros prefieren cobrarlo en dólares a los compradores extranjeros. El gobierno lo paga bien, pero en bolívares. Me dicen que con la situación actual del país, los mineros prefieren tener algo en dólares, por si acaso, y que por eso ha bajado el volumen de oro que semanalmente llega al Banco Central. Habrá que esperar las cifras oficiales pasa saber si eso es verdad.

-Cuatro: Gerardo Chavarri, que dirigió la construcción de la última etapa de Guri durante casi una década, dijo que si el apagón fue producto de un ataque cibernético “eso es algo que excede mi imaginación”. Preciso como siempre ha sido su estilo, considera imprescindible acudir a técnicos de las empresas fabricantes de los equipos de esa central hidroeléctrica, para garantizar su recuperación y eficiencia. Gerardo y Efraín Carrera, son los mejores técnicos con los que cuenta el país en materia de hidroelectricidad, fueron los constructores de Guri, y es una lástima que no sean los responsables de dirigir la recuperación de esa central.

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