Opinión

Semana en domingo

Ya deberíamos estar en emergencia vacunando al cien por ciento del personal educativo, si las clases vuelven a ser presenciales el mes que viene.
domingo, 15 agosto 2021

Notas de la pandemia
Hay mucha gente a la que vacunaron con la primera dosis de la Sputnik V, y ya pasaron los 90 días de plazo máximo para la segunda dosis, según lo que explican los científicos. Médicos amigos me dicen que no es que se pierda todo el efecto de la primera dosis, pero si no se pone la segunda, la protección contra el Covid 19 baja mucho, y si pasa mucho tiempo, por ejemplo seis meses, habría que evaluar la colocación otra vez de la primera dosis, para luego poner la segunda. Esto no está del todo claro, porque hay quienes difieren en el tiempo entre la primera y la segunda dosis. Pero en todo caso, se está haciendo tarde para muchos de los que recibieron la primera dosis de la vacuna rusa, y ahora no llega la segunda.

El otro asunto es determinar si quienes recibieron la primera dosis de la vacuna rusa, y pasa el tiempo y no le ponen la segunda, si pueden ponerse otra vacuna, como la china.

¿Cómo se pudo cometer el error de comprar la primera dosis de la vacuna rusa, sin tener garantía de la segunda? ¿O es que fue regalada y como tal teníamos que recibirla sin seguridad alguna de que luego nos iban a regalar, o vendernos, la segunda? Debimos haber comprado las dos dosis de una vez, para de esa manera tener la certeza de que un porcentaje de la población iba a tener protección frente al Covid.

Otro problema es que el gobierno no dice claramente qué va a pasar con quienes recibieron la primera dosis de la vacuna rusa, y ahora pasa el tiempo y no llega la segunda vacuna.

Hasta hace dos meses, las nuevas cepas del coronavirus se identificaban con el nombre del país en el que aparecieron por primera vez, pero la Organización Mundial de la Salud aceptó las protestas de algunos países, y ahora cada nueva cepa llevará el nombre de una letra griega. La primera nueva cepa, que apareció en Gran Bretaña, ahora se llama Alfa; la de Suráfrica ahora es Beta, la de Brasil es Gamma y la cuarta, de India, ahora es Delta. Ya está contagiando la nueva cepa Lambda, que según los expertos de la OMS apareció en Perú, en agosto del año pasado, pero que ahora ha sido identificada en 21 países. Según las estadísticas del ministerio de salud de Perú, en diciembre los contagios de Lambda no pasaban den 5 por ciento y ahora son el 90. (Ver gráficos de las nuevas variantes del Covid 19, en esta columna)

Ya deberíamos estar en emergencia vacunando al cien por ciento del personal educativo, si las clases vuelven a ser presenciales el mes que viene. Porque son millones de personas que se van a exponer al virus en espacios cerrados y aunque usen mascarillas, no va a ser posible mantener el distanciamiento. La mayoría de las escuelas tienen 40 o más chamitos metidos en un espacio pequeño, respirando uno al lado del otro. Y muchas escuelas no tienen agua como para que se pueda cumplir la norma de lavarse las manos con jabón y con frecuencia. Pienso que quienes están analizando esta decisión de volver a clases presenciales, tienen que sopesar muy bien el riesgo que ello implica, y las medidas que hay que adoptar para eso. El otro elemento que hay que analizar, es que en educación superior se trata ya de adultos, que son más vulnerables al virus. Si se vuelve a clases presenciales en las universidades, todo el mundo tendría que estar vacunado, tanto a nivel de educadores como de alumnos.

Tocar fondo
Desde hace más de 20 años vengo escuchando decir que si la situación no cambia, vamos a tocar fondo. Pero la realidad es que ni las cosas han cambiado, ni hemos tocado fondo. Seguimos en una eterna caída, porque es verdad que en muchos aspectos el gobierno no facilita las cosas, pero en otros aspectos nos hemos echado a llorar en el piso, esperando que el gobierno cambie para poder trabajar como antes. Conozco muchos que tenían años pelando, antes de Chávez, porque no trabajaban, y ahora le echan la culpa al chavismo por no tener ingresos. Yo digo que no podemos seguir sumergidos y que hay que sacar la cabeza, aspirar una buena bocanada de aire, y seguir adelante. Ahora escucho de nuevo: “Vamos a ver qué pasa en las elecciones de noviembre”. ¿Es decir, para comenzar un proyecto o para avanzar en una meta personal, hay que esperar el resultado de esas elecciones? Mucha gente tiene años en eso, y mientras tanto pasa el tiempo, que no lo van a recuperar ni que se vaya Maduro. En algunos aspectos, los proyectos dependen de decisiones del gobierno, pero en muchos otros casos podemos avanzar independientemente del tipo de gobierno que tengamos. Mientras más obstáculos tenga el camino, más fuerza tenemos que poner para poder avanzar. Y aprovecho para decir que me solidarizo, desde el fondo de mi corazón, con quienes luchan contra el coronavirus, y quieren salir de esa enfermedad para seguir adelante con sus vidas y sus proyectos. ¡Pa’lante es pa’allá!

CUATRO
Uno. Aunque hay denuncias de algunas irregularidades en varios estados y municipios, hay que concluir que el PSUV hizo unas primarias que deberían hacer todos los partidos. Hay quienes dicen que allí no pueden haber votado tres millones de personas, con una sola máquina en cada centro de votación de los que fueron instalados para estas primarias. Pero más allá del verdadero número de participantes, quienes reclamamos la vuelta a la democracia plena en el país, no podemos sino estar de acuerdo en que los partidos realicen elecciones primarias para definir sus candidatos. ¿Está dispuesta la oposición a ir a unas primarias para elegir candidatos únicos para estas elecciones de noviembre? ¿O ya es tarde?

Dos. No es sino una majadería, y además extremismo, plantear que la oposición debería retirarse de inmediato del diálogo en México, porque la Corte Penal Internacional decidió admitir las denuncias contra Maduro y varios integrantes de su gobierno, ante supuestos crímenes de lesa humanidad. Una vaina no tiene nada que ver con la otra, porque Maduro no está siendo condenado, sino que la CPI admitió el caso. Ahora vendrá una investigación y al final saldrá una sentencia. Además, ¿en que afecta esa decisión previa de la CPI un posible acuerdo de la oposición con Maduro?

Tres. Veo desatadas las candidaturas de la oposición, pero nadie dice que declinará si las encuestas favorecen a otro candidato, tanto para alcaldías como para la gobernación. No lo he visto en acción en las calles, pero creo que hasta el amigo Luis Aguilar, que amarró esa candidatura hace como 40 años, lanzó su nombre al ruedo. Pero mientras más candidatos salgan, más crecen las posibilidades de los candidatos del gobierno.

Cuatro. Según la última auditoría de opinión pública hecha por Datincorp, la empresa del pana Jesús Seguías, un 57 por ciento de la población está decidida a votar en las elecciones de noviembre. Un 77 por ciento cree que la oposición debería participar en las elecciones. 61 por ciento cree que los próximos gobernadores y alcaldes deberían ser independientes, sin nexos con el chavismo o la oposición. 56 por ciento de los consultados dijo no estar identificad con ningún partido de la oposición o del gobierno. Es más, 44 por ciento cree que los partidos políticos actuales deberían desaparecer para darle paso a partidos nuevos. Como dice el viejo refrán cristiano: el que tenga ojos, que vea, y el que tenga oídos, que oiga.

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