La Gran Jugada: Domingo Spinuso se hizo espacio entre los grandes
La riqueza turística de Venezuela no tiene comparación, pero construir un eslabón entro lo que represente ésta, y el sector deportivo es sin dudas que dejarían grandes beneficios desde los distintos puntos de vista al país con una inversión bien dirigida donde no se deje ninguno de los protagonistas por fuera.
Una de las regiones, cuya referencia turística reviste de mucha importancia es Caripe, población también conocida como Caripe del Guácharo, la cual es capital del municipio Caripe en el estado Monagas.
Como buen referente es conocida en el argot popular, como el Jardín del Oriente de Venezuela. Lugar de gente bien servicial en todos los sentidos. En el presente espacio tendremos la oportunidad de expresar algunas palabras de unos de las personas de la población antes señalada.
Amigas, y amigos que se pasean por el presente espacio, les informo que uno de los árbitros más destacado por su eficiencia dentro del rectángulo de juego del fútbol de salón es el caripeño Domingo Spinuso.
En varios campeonatos nacionales del deporte de mayor practica en el país fue invitado en representación del estado Monagas, y como uno de los mejores árbitros del oriente venezolano, que de apoco se fue construyendo sus espacios pese a su condición física (en una de sus piernas) para una mejor movilidad dentro del rectángulo de juego, y así lo hizo.
Spinuso, es un árbitro nacional de mucho conocimiento en cuanto al reglamento, además es bien estudioso del mismo. Su formación de educador le ha permitido conocer algunas herramientas con las cuales se ha convertido en un investigador de las reglas y como aplicar las mismas.
La actitud de Domingo Spinuso en las canchas del fútbol de salón es motivante para muchos árbitros, sean estos con mucha o poca experiencia.
Las distintas competencias donde ha estado presente siempre es un referente positivo por el esfuerzo que realiza, y la forma como se desempeña en cada oportunidad dentro de la cancha de juego, donde se hace presente con su silbato.
Por la forma como dirigía el juego con el silbato, y aplicaba justicia ante algunas irregularidades de los jugadores; una caripeña, que observaba desde la tribuna llegó a decir con orgullo y en tono fuerte y agradable: “de Caripe tenías que ser muchacho”.
Pero aun así Domingo no se distraía, ya que la responsabilidad es mayor cuando tiene la responsabilidad de árbitro.
Cuando en el amplio mundo de la familia del fútbol de salón venezolano alguien hace alusión a los buenos arbitro que hay en el oriente del país, Domingo Spinuso es de obligación referencia, ya que pertenece a ese grupo de árbitros, que solo se ha permitido la construcción de espacio a punta de conocimiento, y acción como árbitro del futsal venezolano.
Sin dudas es un ejemplo a seguir, incluso para quienes están fuera de la actividad deportiva, o en otros espacios, él ha demostrado que si es posible estar solvente pese a algunas situaciones.
Amigas y amigos de este su espacio, hasta la próxima oportunidad con el favor de Dios.
Para contactos pueden hacerlo por @Joseceden, o por Facebook / José E Cedeño González (El hijo mayor de Otilia González).
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