Opinión

“El colmo de los colmos”: Inteligencia Artificial en tiempos de indignación

En días pasados, tuve la oportunidad de leer un artículo que consideré afín, interesante e importante analizar y hacer reflexión sobre ello, El artículo en cuestión se denominó “Chomsky alaba avances en IA, pero advierte de sus peligros y su ‘amoralidad”’.
miércoles, 22 marzo 2023

En el lenguaje coloquial, la palabra “colmo” se utiliza como un modo de exageración. Un colmo indica un absurdo inaceptable que causa descontento o desagrado en quien lo enuncia.

Así pues, verbigracia: ¿Cuál es el colmo de los colmos? R: “Que el mudo le diga al sordo que el ciego lo está mirando”.

No quería caer en contextos de sorna y aun menos de mensajes que pudiesen causar “salpullido” y por supuesto algún tipo de “comezón” en públicos que paradójicamente pudiesen ser identificados con casos que pueden estar incursos en el “colmo de los colmos”.

Por pura coincidencia, sin intención alguna, a continuación, les presento ejemplos con problemáticas que hoy perturban a Venezuela. Que repito, concurrentemente pudieran relacionarse con situaciones, instituciones, oficios o profesiones.

Bueno, esas similitudes las dejo a criterio y experiencias de los lectores. En ese sentido y con mucho respeto, les agradezco hacer un ejercicio de homologación o afinidad. Están ustedes libres para relacionar las interrogantes sobre los siguientes “colmos” que a nivel popular son producto de la “picardía” y la jocosidad sana del ciudadano venezolano, y que se fortalecen en estos tiempos de contradicciones y desequilibrios sociales, políticos, judiciales, educativos y económicos.

Así entonces, les invito a un sencillo ejercicio de imaginación folclórica, lean detenidamente tanto las interrogantes como las respuestas que les ofrezco a continuación y relaciónenlas con personajes, circunstancias, instituciones o hechos que ocurren en nuestra Venezuela actual:

¿Cuál es el colmo de un abogado? R: Tener una esposa que se llame amparo; ¿Cuál es el colmo de un herrero? R: Tener un hijo soldado; ¿Cuál es el colmo de un reportero? R: Ser aplastado por una rueda de prensa; ¿Cuál es el colmo de un libro? R: Tener título sin haber ido a la universidad.

Y, observemos ahora este último aforismo, de muchísima importancia por su significado semántico pueblerino: ¿Cuál es el colmo de un chofer? R: Tener una esposa que lo maneje a su antojo.

En nuestro país, Venezuela, por ejemplo, uno de los colmos más visibilizados, e indignantes es el que existan sueldos de los funcionarios públicos en niveles de 6 dólares mensuales, verbigracia los maestros, y recientemente los militares, quienes han levantado su voz ante sus superiores, los enfermeros, por citar tan sólo una parte de la gran estratificación de un universo de los ciudadanos, en un país con inmensas riquezas y que ha sido robado hasta la saciedad por un gobierno insano, enfermo, un régimen dictatorial, írrito e ilegal.

Y, que quizás estemos acostumbrados (mal acostumbrados) con las “salidas” indignas de quien se hace llamar presidente de Venezuela.

En días recientes, hemos visto asombrados como el “líder máximo” del régimen tuvo el desparpajo de hablar al país el pasado 14 de marzo de 2023, durante el “Congreso Nacional de la Juventud” sobre la Inteligencia Artificial (IA).

Algo absurdo, no por lo que representa esta tecnología para el mundo actual, sino por el hecho singular de ser él precisamente quien lo sermoneó. Dijo muchas cosas sobre la IA, y no dijo nada, hasta el punto de aseverar o más bien pedir, que esa IA no traiga como consecuencia la deshumanización de la sociedad, de esa afirmación nació otra no muy aclaratoria, cuando dijo: “sea humana la humanidad”.

El colmo de los colmos: se repitió, casi que figuradamente, casi homologa, aquella frase interrogativa que desde niños escuchábamos con cierta broma y que todavía la oímos por ahí: ” ¿De qué color es el caballo blanco de Bolívar? Por cierto, este tipo de estructura gramatical configura un error de tipo sintáctico, al no existir coherencia en el mensaje a transmitir porque lo más seguro es que la humanidad deriva de la expresión “humanos”. ¿Verdad verdadera?

El párrafo anterior nos sumerge en aguas de lo tecnológico. La tecnología es de importancia suma para la humanidad. Sin embargo, ella está afectada por ventajas y desventajas.

En ese sentido, Jesús Falcon (2023), en “Pautas para desarrollar el pensamiento crítico de los niños”, señala muy asertivamente que: “Los seres humanos nos encontramos inmersos en una época en la que la tecnología nos desborda y bombardea de información constantemente, y dichos avances tecnológicos (aunque también traen muchas cosas buenas) hacen que las personas, y especialmente los niños, tengan que adaptarse y necesiten crear su propia información al respecto”.

Y, por supuesto la Inteligencia Artificial, es parte valiosa de la Tecnología, por lo que tiene sus defensores y enemigos. Actualmente existe un gran debate, entre los que piensan que es un avance científico tecnológico que coadyuvará al desarrollo y beneficio de la humanidad, por ejemplo, en aquellos casos que tienen que ver con la medicina en general en cuanto al diagnóstico, supervisión de condición de los pacientes, administración de tratamientos y los estudios influenciados por la estadística.

Y, a nivel gerencial han aportado la resolución de problemas de alta complejidad y de un alcance masivo, sobre todo en materia de información empresarial por medio de lenguajes versátiles sustentados en lenguajes de programación cuya fuente fundamental lo constituyen sistemas de alta tecnología representados en las bases de datos que pueden dar respuesta, “conversar” literalmente en cualquier tipo de lenguaje o idioma.

Sin embargo, en la otra acera, están quienes consideran que, si bien la IA es un valioso aporte para el avance y desarrollo de múltiples productos necesarios ante los novísimos adelantos y necesidades de los seres humanos, también ha sido utilizada perversamente cuando se desarrollan avalanchas gigantescas de mentiras, manifiestas en la política o en la economía global y nacional que desvirtúan la realidad.

Y, que se ha popularizado mayormente en países en donde el sistema de gobierno es dictatorial, con la única y delirante intención de seguir controlando socialmente a los pueblos y así mantenerse en el poder.

He allí uno de los riesgos de la aplicación desmedida, irracional de la IA, y cómo se nos presenta como un avance peligroso de la tecnología en contextos de amoralidad y falta de ética, sobre todo en lo concerniente a la mala praxis del lenguaje con fines “non sancto, non sancta”, que según el Diccionario de la lengua española significa Indecente, inmoral. Por tanto, indiscutibles perturbadores de la realidad de individuos y sociedades enteras.

Lo anteriormente señalado en cuanto a sus características de amoralidad, no es una especulación de quien escribe. ¿Porqué? La respuesta está siendo dada por importantes personalidades de contextos científico – Tecnológicos, filosóficos, ideológicos, a nivel mundial.

En días pasados, tuve la oportunidad de leer un artículo que consideré afín, interesante e importante analizar y hacer reflexión sobre ello, El artículo en cuestión se denominó “Chomsky alaba avances en IA, pero advierte de sus peligros y su ‘amoralidad”’.

Una columna de opinión conjunta, publicada en el diario The New York Times, en donde tres intelectuales, Noam Chomsky, Ian Roberts y Jeffrey Watumull ensalzaban los nuevos programas ChatGPT (OpenAI), Bard (Google) y Bing (Microsoft) por su capacidad para resolver problemas, pero también manifestaron su preocupación por estos sistemas que se pudieran caracterizar por su “amoralidad, falsa ciencia e incompetencia lingüística”.

Chomsky hace señalamientos críticos de alerta acerca de la Inteligencia Artificial y la amoralidad.

Por otro lado, aseveran que “Su defecto más profundo es la ausencia de la capacidad más crítica que posee cualquier inteligencia: decir no solo lo que ocurre, lo que ocurrió y lo que ocurrirá -eso es describir y predecir-, sino también lo que no ocurre y lo que podría y no podría ocurrir”.

Y, argumentan lo anterior en que: “el pensamiento de estilo humano se basa en posibles explicaciones y corrección de errores, un proceso que limita gradualmente qué posibilidades se pueda considerar racionalmente”.

En realidad, pareciese que la Inteligencia Artificial argumenta y ofrece conclusiones, más sin embargo, no produce reflexiones de alta complejidad, por tanto, ello conduce a pensar que no puede distinguir la autenticidad de una aseveración.

Lo que si es cierto es que aun conociendo que el procesamiento del lenguaje natural puede realizarse y mejorarse, resulta que como instrumentos altamente desarrollado tecnológicamente, realmente no pueden cabalmente tener la sensibilidad de captar características fundamentales del lenguaje humano, sus emociones, su “chispa”, las ironías, en general las propias actitudes de la naturaleza humana, que finalmente conducirían a no deseadas frustraciones o en el menor de los casos a fracasos de quienes así lo perciben.

Pero, el colmo de los colmos es que Sam Altman, el creador del ChatGPT, en información del 20/03/2023, “calientico” pues, se ha sentido “particularmente preocupado de que estos modelos puedan usarse para la desinformación a gran escala. Ahora que están mejorando en la escritura de códigos informáticos, podría usarse para ataques cibernéticos ofensivos”.

En resumidas cuentas, señores lectores, y en atención a lo mencionado en párrafo anterior, en Venezuela, para “muestra un botón” (otro Colmo de los colmos), en días pasados cercanos, han aparecido en las distintas redes sociales aplicaciones de la Inteligencia Artificial, con imágenes de individuos ficticios, con informaciones falsas, no verdaderas y distorsionadoras de la realidad.

El caso en cuestión fue criticado por la colectividad y determinado como falso. Dicha situación fue detectada por la ONG “Cazadores de Fake News” que publicó una investigación donde destaca la utilización de Inteligencia Artificial por parte del régimen para difundir noticias falsas sobre Venezuela.

Según esta ONG, se ha podido detectar en las redes sociales a personas hablando en diferentes idiomas, dicha investigación deja ver que en realidad son avatares (Identidad virtual. Acontecimiento contrario al desarrollo o la buena marcha de algo y perfiles imaginarios creados con el programa Sythesia de Inteligencia Artificial).

En síntesis, según afirmación de activistas y especialistas en comunicación política han determinado que con este tipo de acciones en Venezuela se ha venido utilizando la IA para suscitar simpatías al régimen por medio de las redes sociales. Indignante, sobre todo, porque lo más seguro es que se ha originado por la cercanía de elecciones en nuestro país, y más si el lema es que el país “ya está cambiado” y que “no ha mejorado más porque EEUU. tiene una guerra económica que no deja avanzar”.

¡Si Luis! Una total y desmedida desinformación es el único interés que busca el régimen. (Ver: Voz de América. YouTube: “Venezuela usa la inteligencia artificial para impulsar tendencias a favor de Maduro”).

Se cierra este artículo, convencido en que la Inteligencia Artificial es un gran avance hacia el desarrollo y mejor vivir de los ciudadanos del mundo, pero eso sí, siempre y cuando no se caiga en el colmo de los colmos, en lo indignante: que sea usada para hacer el mal y en lugar de avanzar lleve al retroceso, a la amoralidad, a la no ética, por vía del lenguaje falaz, mentiroso y perverso, muy dentro de las vísceras de regímenes dictatoriales.

Pendientes pues. Pendientes. Cuidado pues, con las maquinitas del CNE. (Ojo pelao)

“El verdadero peligro no es que las computadoras comenzaran a pensar como los hombres, sino que los hombres comenzaran a pensar como las computadoras”. (Sídney J. Harris)

“El hito siguiente en la historia de la IA: aplicar una ingeniería inversa al cerebro humano” (Michio Kaku)

“Debemos abordar, individual y colectivamente, las cuestiones morales y éticas planteadas por la investigación de vanguardia en inteligencia artificial y biotecnología, lo que permitirá la extensión de nuevas formas de vida, como los bebés de diseño y la extracción de memoria” (Klaus Schwab)

“El éxito en la inteligencia artificial es lo peor que le podría ocurrir a la humanidad”. (Stephen Hawking)

“En ocasiones se ha afirmado que nuestra era moderna de tecnología facilita la dictadura”. (Henry A. Wallace).

“La fuerza es soplona por naturaleza. No hay ningún signo más seguro de debilidad que desconfiar instintivamente de todo y de todos” (Arturo Graf)

Canadá 21 de marzo de 2023

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