Opinión

Cuenta la leyenda: Los inicios de Puerto Ordaz y sus protagonistas

Apreciado lector, en esta entrega vamos a hablar de los inicios de nuestra ciudad, quiénes fueron sus protagonistas y quiénes se atrevieron?
Evelio Lucero
miércoles, 01 octubre 2025

  Apreciado lector, en esta entrega vamos a hablar de los inicios de nuestra ciudad, quiénes fueron sus protagonistas y quiénes se atrevieron?

   Ya en muchas ocasiones se sigue discutiendo la otra fecha, la del 2 de julio, pero como dice nuestro criollo refrán “esto es trigo de otro costal”; hoy vamos a recordar a algunas de las tantas personas que llegaron a buscar una nueva vida, pero también quiero dejar a cada uno de los interesados una tarea, o sea, buscar en el diccionario el significado de estas tres palabras: “fundadores, pioneros y forjadores”, ya que muchos están confundidos.

Recurriendo a las mas notables personajes, de los cuales quedan muy pocos, cuya sapiencia en el acontecer histórico de Puerto Ordaz, muy pocos se atreven a negar, es de hacer constar, que la lejanía del tiempo ha querido borrar poco a poco, tal como se desgastan las imágenes fotográficas con el tiempo, al paso de los años, las hermosas imágenes que se han podido mantener en el tiempo, de aquellas tardes bañadas  por la radiante luz de un sol cargado de esperanzas para una región que comenzaba a emerger como la más hermosa criatura. Estos primeros hombres que llegaron a planificar no necesariamente tenemos que mencionar, vamos a concretarnos a quienes llegaron y se establecieron con miras a luchar por una tierra que ya habían escogido como su patria chica. Esos que se quedaron forjándose un futuro, transitando por los caminos y formando una nueva generación de hombres y mujeres, que al final de cuentas han resultado los pilares más sólidos en esta sociedad PUERTODAZANA, y son los más meritorios ciudadanos, los que sin mezquindades de ninguna naturaleza, se lanzaron en pleno desafío a conquistar el desarrollo y la tecnología invirtiendo sus ganancias, producto de  su tesonero trabajo, en industrias y empresas de servicio que enorgullecieron en una época al Puerto Ordaz de 1982.

El recordado José Meneses (Taguapire Modas) dijo en una ocasión: “Yo fui uno de los que abrió los caminos que nos conducen a este pueblo, su profesión era topógrafo, trabajaba para la empresa extractora del hierro y con su teodolito trazó la carretera que nos une a Ciudad Piar, también trazo a las calles y avenidas de lo que hoy es Puerto Ordaz. A “PUNTA DE LOMA” como así se llamaba el lugar donde estaba el muelle de la empresa Orinoco Mining Company, ahí llegaron un grupo de personas en su mayoría norteamericanos, venían de Ciudad Bolívar a bordo de una pequeña embarcación, el atraque no fue muy fácil debido a las condiciones de la orilla, pantanosa y enmontada, entre otros nos acompañaba un señor de apellido Link, era el jefe del proyecto de la línea férrea de la UNITED STATES OLIVER y lo más necesario era la unión con El Cerro La Parida (Cerro Bolívar) por la vía del kilómetro 70 solo existían sabanales, chaparrales y uno u otro chivo realengo escapado de cualquier hato, terreno arenoso pero plano, afortunadamente se encontró una trilla que llegaba a Caruachi y Ciudad Bolívar.

Existe otra confusión siempre se ha recordado con mucho cariño al barbero Gerardo Izzo, como el primer barbero. Aclaremos pues, el primer barbero que se estableció en esta zona fue TONY EL BARBERO, cuyo negocio estaba ubicado al correr de los años, en la esquina diagonal a la farmacia Castillito, frente a la Casa Fernández (donde también estuvo Fajin Souky y el Banco Caroní) Tony era el barbero de todos aquellos primeros que llegaron y luego se mudó al Centro Cívico donde aún está el aviso “Barbería Tony” y Gerardo adquirió el nombre de Tony, vale recordar que Tony compró en ese entonces en Castillito el terreno a razón de bolívares, cinco el metro cuadrado, por que era una zona privilegiada.

Otro personaje del cual es obligatorio su recuerdo, llegó siendo muy joven a Ciudad Piar, para trabajar en el hospital, se trata del doctor Virgilio Vivas, con el tiempo fue cambiado al hospital de la Orinoco Mining y le fue permitido fundar la Farmacia Puerto Ordaz en el Centro Cívico, al lado de Correos de Venezuela y Telégrafos de Venezuela, cumplió su tiempo en la empresa y luego se dedicó a la farmacia, la cual hoy día está en al carrera La Urbana en Castillito, atendida por su hija, la licenciada Gaina Vivas. Virgilio fue uno de los grandes pilares y fundador de la Cámara de Comercio de Caroní, también fue fundador el Rotary Puerto Ordaz.

Otro personaje a recordar es Arturo Sadjian, era el encargado de la nómina de los trabajadores de la Oliver. Tenía que trasladarse a Ciudad Bolívar, donde en el The Royal Bank Canadá, le hacían entrega del dinero en efectivo (no existían transporte de valores, ni musculosos guardaespaldas, pero existía seguridad y honestidad, al llegar se instalaba bajo un árbol donde hoy día está el Trébol Dos, una pequeña mesa, un taburete, bolígrafos y una cola de obreros (esto me fue contado por el mismo Arturo, en una ocasión donde compartíamos un almuerzo) luego Don Arturo, vio la oportunidad y se instaló en la esquina de la avenida Mc Lake cruce con la avenida Las Américas, y fundó el Centro del Caucho General, donde lo acompañaban sus hijos “Toto” y Arturito Sadjian, en la acera del frente funcionó durante muchos años la General Electric de Venezuela y Caterpillar (Venequip), este edificio se destacaba por un enorme árbol de caoba que estaba sembrado en los jardines de la entrada, este legendario y emblemático árbol, el cual también era una referencia, fue presa de algún maniático que lo tumbó a fuerza de hacha.

Mi arribo a Ciudad Piar fue el 24 de mayo de 1953. Así se expresaba el doctor Darío Suquilanda, con el encargo de reemplazar al doctor Luis Labatute, quien se desempeñaba como médico en el campamento minero que nacía a las faldas del ya Cerro Bolívar. Decía el Dr. Suquilanda, pudiera ser como las que experimenta un soldado cuando llega al campo de batalla, un incesante bombardeo sobre todo el cerro full de mineral, para extraer de sus extrañas el codiciado hierro que luego sería fundido y convertido en acero para construir todo tipo de vehículos y accesorios, en las noches lo único que se escuchaba era el aullido de los araguatos en las cercanas montañas selváticas.

Suquilanda nació en Ecuador, en la provincia de Loja, se casó con doña Olga, donde nacieron cuatro hijos: Cecilia, Darío, Mery y Berta. Vivió al lado de un personaje que llegó, desde Chile a Caracas y de Caracas a Puerto Ordaz, vino  a traer dinamita, sí… así como se oye, es una persona sumamente de una simpatía muy personal, ya cruzó la barra de los 90 y sigue laborando. Personalmente me ha contado en varias ocasiones, que cuando llegó desde Chile, su país de nacimiento, a nuestra Venezuela, de la cual le habían  hablado tanto, el creía que se iba a encontrar los billetes y las monedas tirados en las calles de la capital, y la primera oportunidad que se le presenta es acompañar a un gandolero, desde el Fuerte Tiuna, hasta el lugar donde la Orinoco guardaba con mucho celo y seguridad los explosivos usados en las minas de El Pao y Cerro Bolívar, después de transcurrir muchas horas de carretera y llegara su destino inmediatamente se enamoró, realizó y cumplió las exigencias y comenzó a trabajar en la Orinoco Mining Company. Transcurre el tiempo y lo conozco personalmente cuando en la carrera El Palmar estaba fundando una tienda para caballeros (me dijo en ese momento, voy a acabar con el mito de que Puerto Ordaz la vida es cara) luego en las tardes lo observaba en el campo deportivo como instructor de las bellas jóvenes de Puerto Ordaz, dándole clase de Voleibol. Han pasado muchos años desde aquellos momentos.

Vive en la Urb. Los Olivos, trabaja como traductor, le gusta escribir, editó un libro muy interesante titulado GRAMÁTICA CRÍTICA Y DIDÁCTICA DE LA LENGUA CASTELLANA. También creó la Asociación de Escritores del Estado Bolívar.

El primer panadero que se conoció fue Antonio Lorenzo Martínez, nacido en Almacil, Portugal. Los hermanos Luciano y Vladimir Guerrini, fueron los primeros en tener una fuente de soda en el Centro Cívico y la librería Book Store International, donde se lograba encontrar la prensa nacional del día y muchas revistas, libros y la prensa internacional. Los que construyeron el primer edificio en Puerto Ordaz, fueron los hermanos Ignacio, Claudio y Jacinto Fratini. Este edificio fue construido al primer vicecónsul Eliseo Ponta y está ubicado al comienzo de la avenida principal de Castillito. Sse puede observar que la mayoría de los que se atrevieron fueron los europeos nacidos en Italia, faltan muchos por referir, prometo continuar, pero no puedo dejar de recordar a el CHURRASCO, de la familia Marserioli, esta tal cual como cuando fue inaugurado. Y, el primer fotógrafo Luciano Scamuzzi, que comenzó con su esposa Dina en el edificio Yocoima, en poco tiempo se mudó al primer centro comercial, propiedad de Cines Unidos. El Centro Comercial Caroní, lugar donde también comenzó quien escribe, y en ese edificio estuvo la primera discoteca, El Bunny Bar, la primera cancha de bowling “Pin Caroní”, el cine Altamira.. y muchos otros los cuales les recordaré los lugares y los personajes.

 

Ten la información al instante en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente link: https://chat.whatsapp.com/KmIu177vtD1K9KnLMwoNgo

También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí:https://t.me/diarioprimicia

Lea También:
error: