Cuenta La Leyenda
El tema de hoy, ya se ha convertido en un tema muy trillado, pero no puedo apartarlo, menos cuando muchas personas me piden tratar de hacer algo; aparte de ser esta columna (por cierto muy leída, la gente en la calle, me lo hace saber) para hablar de la historia, anécdotas y crónicas, no es para hacer denuncias, pero como en verdad me duele la ciudad donde llegué hace ya 59 años y me acogió y me brindó y dio todo lo que tengo y mi Venezuela y la de todos nosotros, me veo obligado a complacer a nuestros lectores que cada semana me siguen a través de PRIMICIA, en “Cuenta La Leyenda”.
Bien… YA ESTÁ BUENO, hasta cuándo; la pandemia continua, hay que seguir cuidándose, ya los consejos son a diario por todos los medios de comunicación, el corre ve y dile, el problema económico, el cual no se si de verdad es político, pero se están viendo más personas en las calles y en los centros comerciales, adquiriendo incluso cosas inútiles, el solo hecho de que está más barato que allá, (recordemos en los tiempos de oro cuando viajábamos a las MAIAMI (Miami) y allá decían vienen los venezolanos, y nosotros los “compra-idiotas” decíamos ta´barato dame dos; algo más: el problema del combustible, creo que también ha mermado, se ven menos colas, con esto no estoy pretendiendo lavar la cara de nuestro gobierno regional, aunque tuviesen razón, no soy afecto a ellos y menos a los parchos en las avenidas y como decían nuestras madres y abuelas “solo barren, por donde pasa el novio”.
Me desvié algo de la intención pero no pude contener la ocasión, cuando digo: YA ESTÁ BUENO, es por lo siguiente: hasta cuándo vamos a seguir irrespetándonos unos a otros en lo que corresponde a libre libertad de caminar y disfrutar nuestra calles, avenidas etc, estamos viviendo una anarquía total, cada uno de nosotros queremos ser más vivos que los demás, irrespetando los semáforos, las aceras, las calles, esto me recuerda a nuestro número uno: Renny Ottolina (Reinaldo José Ottolina) cuando nos enviaba esas propagandas a través de sus programas en la T.V. comparando a los transeúntes con animales; aquí, yo no sé si en otros estados, el peatón irrespeta al conductor, el conductor como tal, hace lo mismo ignorando al peatón, el ciclista, toma las aceras y desconoce los colores del semáforo, los delivery en su afán de llegar más rápido, brinca, salta e irrespeta, los motorizados a altas velocidades demostrando su destreza con máquinas de alto cilindraje, los “piques” que se realizan en importantes avenidas de mucho flujo vehicular y nadie se opone a esa práctica, los conductores de buses y camionetas de transporte urbano; también se destacan cometiendo infracciones; entre ellas la contaminación sonora con equipos en alto volumen; full de pasajeros y sin recomendar el uso obligatorio de la mascarilla y el distanciamiento social, en las calles y avenidas, las pocas que quedan, demarcadas con el rayado blanco y amarillo, tampoco son utilizadas como tal.
¿Para qué fueron rayadas? He observado también que, las ambulancias piden prioridad de paso con el sonido de las sirenas y el conductor que lo antecede se pone a competir para ver quien llega más rápido o sea, ignora ¿el por qué pide paso? Y entre tantas cosas los pocos fiscales o vigilantes encargados del orden, mientras todo esto sucede en sus narices, ellos están enamorando a una joven, comiéndose un tequeñón o matraqueando al infractor, YA ESTÁ BUENO.
Voy a recordar que los semáforos tienen tres colores, el amarillo que está en el centro es para prevenir, el que está arriba de color rojo es para frenar y el verde es para continuar y los rayados blancos y amarillos en las calles, continuos o espaciados también tiene su sentido, recomiendo comprar un pequeño libro (muy barato, pero muy útil) donde explica el por qué los tres tipos de señales que se mantienen durante muchos años vigentes, compre el libro, léalo y me lo agradecerá, aprenda no solo a pisar el acelerador, sino a respetar como usted desea que lo respeten.
LAS COSAS BUENAS, vengan de donde vengan y más si es de su competencia, hay que reconocerlas, este viernes 22 de julio, la semana pasada, nuevamente se abrieron las puertas y se reinauguró la Sala de Arte de SIDOR, ubicada entre la calle Aro y carrera Nekuima, venían trabajando poco a poco hace algún tiempo, después de haber estada cerrada por espacio aproximado a 5 años, incluyendo en los ventanales láminas de acero o hierro soldadas al efecto, pero tras de ello, dos grandes protagonistas como yo los he llamado el licenciado José Lanz y Ronel Martínez, estos aguantaron el “chaparrón” pero apostando a ganar.
Muchas persona se sorprendieron (entre ellos, mi persona) cuando pudimos observar el movimiento y desplazamiento de equipos y de vehículos pesados y mucho trabajadores, eliminando jardines ya obsoletos y sembrados de nuevo por bellas plantas, las paredes externas en combinación de un verde limón con gris, las paredes internas de blanco en su totalidad, la iluminación en todo su entorno la recuperación de dos obras de hierro en el frente, recuerdo que nos dejó Alexis Siquini, la colocación de un penetrable el cual ha causado sensación sobre todo en los pequeños niños que la visitan, dos mesas con sus sillas de metal enclavadas en el concreto del piso para compartir con la familia o amistades, conversar en una tarde para tomar un café o un te, aún faltan algunos pequeños detalles, recomiendo la visiten; el día de la reinauguración, la hora pautada para el público en general era las cinco de la tarde.
Desde muy temprano fueron tomadas las calles para la colocación de una enorme tarima, con buena iluminación y sonido, muchas sillas para el público y un espacio VIP para personas de la prensa e invitados especiales, hubo orden en sentido general y los artistas invitados fueron la Coral de Sidor dirigida por Ricardo Donado, el Grupo 5n Fusión y el plato fuerte de la mesa Gualberto Ibarreto quien interpretó aquellas bellas melodías de los años 72. 73, 74, María Antonia, La Guacara, Canchuncum Florido, El Ladrón de tu amor, La Carta, La Vikinga, Cuerpo Cobarde etc.
De verdad que no se quien pudo disfrutar más, nosotros o el, quien demostró sentirse feliz ante el público que lo ovacionó y le pedía más, momentos de tensión, buenos recuerdos y alguna que otra tristeza. Pero… acuérdense, que yo siempre tengo un pero… al inicio, dos personas, una dama y un joven llevaron el protocolo observando para que todos entendieran, la ausencia de las autoridades de la empresa y quienes le estaban haciendo la suplencia, quienes fueron las personas responsables de la parte estética, armónica, arquitectónica, la reconstrucción y otras cositas más, también el llamada a dos lindas niñas para desatar la cinta colocada en la puerta principal con lo que se daba inicio, fue muy bonita la intención, pero no sé si yo estaba distraído, sordo o ciego, no escuche en ningún momento mencionar a las dos personas que han estado trabajando de manera incógnita durante todo este tiempo perdido, manteniendo por lo menos el evitar haya sido invadido el lugar.
Aunque ambos son personas de un trato cordial y humilde, tal vez ellos no se dieron cuenta, yo… si, en ningún momento escuche entre tantas flores enviadas a diferentes personas, lanzar aunque fuera un pétalo a José Lanz y Roner Martínez, ellos permanecen atentos y dispuestos a escuchar, charlar, aceptar sugerencias a todos aquellos que dispensen una visita a la Nueva Sala de Arte de SIDOR, que desde que fue fundada originalmente se presentaron tantos espectáculos, exposiciones, conversatorios, época cuando podemos recordar entre otros a la señora Graciela Camacho, la “Nena” Acosta, Ana María Ciam, a Nelson Galvis y muchos más.
Señores este es un buen espacio para disfrutar con sus familiares, no pierda la oportunidad para compartir cultura y conocimientos.
Refrán Criollo a recordar: AL QUE LE PIQUE QUE SE RASQUE.
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