Opinión

Bitácora Industrial

"Al mismo tiempo que la FAO señala la cantidad de alimentos que se pierden en el planeta, alerta acerca del aumento de la obesidad"
viernes, 31 mayo 2019

Terrorismo petrolero

Hacía años que no ocurrían atentados contra buques petroleros en las rutas internacionales, hasta que en estos días fueron atacados 4 cisternas en las cercanías del puerto petrolero Fujairah de Emiratos Arabes Unidos, en el Mar de Arabia. Hasta ayer ningún grupo terrorista se había atribuido los ataques, que causaron graves daños a las estructuras de los buques, aunque siguieron navegando hasta sus destinos. Dos de los buques iban hacia Arabia Saudita, para ser cargados en muelles situados en el Golfo Pérsico, mientras los otros dos tenían como destino el cercano muelle de Fujairah, uno de los terminales petroleros más grandes del mundo. Ni los gobiernos, ni los dueños de los buques afectados han descrito con detalle los daños ni el tipo de arma utilizada para el ataque, pero algunos expertos han señalado que los buques presentan boquetes que pudieron ser provocados por la explosión de un proyectil de gran potencia. Señalan también que el hecho de que los ataques hayan sido realizados contra buques vacíos revela que la intención es advertir acerca de la posibilidad de que puedan ser realizados contra buques cargados, para impedir el transporte de crudo de esa región, que produce casi el 50 por ciento del consumo mundial. Los servicios de inteligencia de varios países creen que el ataque está relacionado con las sanciones por Estados contra Irán. Este país islámico ha advertido que podría cerrar el tránsito por el estrecho de Ormuz, por el que sale el 30 por ciento del crudo mundial. El ataque fue perpetrado frente al puerto de Fujairah, en Emiratos Arabes, que está en las costas del Mar de Arabia y que permite cargar buques petroleros sin tener que cruzar el estratégico estrecho de Ormuz, lo que anularía el efecto de cierre de ese paso por parte de Teherán, en el caso de que finalmente se concrete esta amenaza. Ante los ataques, Estados Unidos dispuso el inmediato refuerzo de las unidades de la V Flota que patrulla el Mar de Arabia y el Golfo Pérsico, incluyendo los bombarderos estratégicos B-52 y una dotación de misiles especiales para destruir objetivos marítimos que se desplacen a gran velocidad.

 

Drones contra yacimientos sauditas

Un día después del ataque a los buques petroleros en las costas de Emiratos Arabes, varios drones armados atacaron instalaciones petroleras en el territorio de Arabia Saudita, provocando incendios que directivos de Aramco calificaron como “daños menores que no afectaron la producción, transporte, embarque o refinación del crudo”.

Como en los ataques a los buques, en este caso tampoco hubo alguna organización terrorista que se atribuyera la autoría de los atentados, aunque todas las agencias sospechan que tengan relación con las sanciones norteamericanas contra Irán. Arabia Saudita y Emiratos Arabes son los principales aliados de Estados Unidos en esa región, aparte de que ambos tienen una relación históricamente complicada con Teherán, tanto por cuestiones religiosas como por la hegemonía en el mundo árabe. Como consecuencia de estos ataques terroristas los precios petroleros subieron hasta 4 dólares en dos días, además del incremento lento pero sostenido que venían teniendo desde que Estados Unidos impuso las sanciones contra Irán. Los ataques contra buques y campos petroleros hicieron subir los precios del crudo durante dos días pero luego bajaron.

El Brent escaló hasta 72 dólares, el West Texas llegó a 62,50 y el barril Opep subió poco más de un dólar.

 

Desperdicio de alimentos

Pese a que uno de los problemas más graves de la humanidad es el hambre que afecta a cientos de millones de personas, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, acaba de emitir un informe según el cual se desperdicia el 40 por ciento de los alimentos que se producen en el mundo. Reunida recientemente en Santiago de Chile, la FAO para América Latina y el Caribe informó que en la región hay 47 millones de personas que sufren hambre y sin embargo se pierde el 15 por ciento de la producción de alimentos, lo que equivale a 80 millones de toneladas cada año. La causa de ese desperdicio es principalmente el mal estado de las vías de comunicación en muchas regiones productoras y la falta de instalaciones adecuadas para la conservación de alimentos perecederos. La FAO cita también un excesivo temor por consumir alimentos en fechas próximas a su fecha de caducidad, aunque estén en buen estado. Los expertos de esta organización internacional están elaborando una serie de recomendaciones, para intentar que la población aprenda a aprovechar esos alimentos que hoy se desechan, entre las que figura un mecanismo para que los comercios donen o vendan a menor precio los productos que estén cercanos a su fecha de vencimiento y campañas de propaganda masiva para que la población entienda que los puede consumir sin peligro alguno.

De igual manera plantean que hay que hacer esfuerzos para lograr que muchos productos agrícolas puedan ser procesados en las zonas de cultivo, para que duren más días sin echarse a perder mientras llegan a los centros de consumo.

Pero al mismo tiempo que la FAO señala la cantidad de alimentos que se pierden en el planeta, alerta acerca del aumento de la obesidad, no solo por la cantidad sino por la mala calidad de la alimentación que ingiere buena parte de la población del mundo. En el caso de América Latina, los expertos de la FAO señalan que un 23 por ciento de la población sufre de algún grado de obesidad debido al alto consumo de carbohidratos.

 

Trump contra aceitunas españolas

Las sanciones de Trump contra muchos productos importados ha provocado una baja en las ventas de aceitunas de mesa españolas en el mercado norteamericano: en el primer trimestre de este año las ventas cayeron a 3,5 millones de kilos, frente a los 4 millones de 2018 y mucho menos que los 6,7 millones de ese mismo período en 2017. El monto de las ventas de este producto de mesa cayó desde 15,5 millones de dólares en el primer trimestre de 2017 a 8,7 en ese período de este año. La política arancelaria de Trump sancionó las aceitunas españolas porque considera que son una competencia desleal con los productores norteamericanos, debido a que los cultivadores de ese país reciben subsidios a la exportación de parte de la Unión Europea. La baja en las ventas de las aceitunas españolas ha permitido el aumento de las ventas de ese producto por parte de los cultivadores de Marruecos y Egipto.

 

 

Ten la información al instante en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente link: https://chat.whatsapp.com/HWyKZ9dACBI9Tl0joLIRVu

También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí https://t.me/diarioprimicia

 

Ten la información al instante en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente link: https://chat.whatsapp.com/HWyKZ9dACBI9Tl0joLIRVu

También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí https://t.me/diarioprimicia

error: