Toma una siesta para activar la jornada laboral

Tomar unos minutos de respiro en la jornada laboral, mejor conocido como microdescansos, ya sea preparándote un té o café, estirar las piernas o navegando en Internet, no es ningún delito.

Todo lo contrario, es lo mejor que se puede hacer para aumentar la concentración, consiguiendo así generar mayor productividad en las actividades que tienes que realizar.
Además, te ayudará a relajar un poco el cuerpo, aunque trabajes mucho tiempo sentada o de pie.

¿De donde proviene esta técnica?
De acuerdo a estudios, esto proviene de investigaciones de vieja data, específicamente de los años 80, del Instituto Nacional para la Salud y Seguridad Ocupacional en Ohio y la Universidad de Purdue en Indiana.

Para ello, habilitaron un espacio que cumpliese la función de una oficina, colocaron a 20 personas allí durante dos días, y como parte de la prueba, les solicitaban cumplir con tareas repetitivas.

Para luego colocar a un grupo a tomar un break por unos segundos y a otros por unos minutos. Tomando en cuenta su ritmo cardíaco y productividad, antes y después de cada pausa.
Teniendo los siguientes resultados:
Aquellos que tomaron descansos de segundos, disminuían la productividad en las funciones que tenían que realizar.

Mientras que aquellos que tuvieron microdescansos un poco más largos, su ritmo cardíaco era más bajo, produciéndose calma y la tarea que debían realizar no tenía tantos errores.

Existen muchos estudios más que indican que tomar descansos de minutos en el trabajo, no solo mejorará el desempeños y relajará el cuerpo, si no que también, disminuye la cantidad de estrés en las personas.

¿Cuánto tiempo deben durar estos microdescansos?
Aunque de acuerdo con Sooyeol Kim, estudiante de la Universidad de Illinois y experto en los microdescansos, existen dos reglas fundamentales que el trabajador debe tener en cuenta siempre: deben ser breves y voluntarios.

Consejos para llevar a cabo estas siestas
Se propone realizar pequeñas caminatas yendo al baño, ir al filtro de agua para hidratar o hacia la ventana para tomar un poco de aire fresco.

También se puede estirar un poco permaneciendo en el puesto de trabajo.Puedes navegar un rato en Internet ya sea viendo videos o redes sociales.

La siesta es una especie de sueño corto recuperador. No debe durar más de 30 minutos. Dormir siesta de más de media hora distorsiona sus efectos positivos.

Apagar el celular, ni siquiera dejarlo en vibrador. Dormir la siesta implica desconectarse del mundo por 40 minutos. Eso significa desconectar todo lo que puede llegar a interrumpirnos.

¿Café? Si no se resiste la tentación, tomarlo inmediatamente antes de acostarse a dormir la siesta, ya que el efecto estimulante de la cafeína empieza recién a partir de los 20 minutos de ingerirla y para ese momento ya se estará entregados a Morfeo. Si eres del grupo de los “inmunes a la cafeína” sigue con la rutina habitual.

Se debe tener en cuenta que el té y el café también son estimulantes, por lo cual se debe tener los mismos cuidados que con el consumo de café.

Intente “parar” la cabeza
Desconectese de los problemas o tareas pendientes por un rato. Si nos deja más tranquilos, los podemos escribir en un papel para seguir trabajando sobre ellos cuando nos despertarnos y no dejar nada pendiente.

La siesta es para que el cuerpo se recupere pero también la cabeza; No es obligatorio que se duerma la siesta. Si no se siente la necesidad de hacerlo, si el cuerpo no lo pide que lo haga no lo obligue.

Para tomar en cuenta

Y ahora que tienes claro que es bueno tomarse unos minutos de descansos en tu jornada laboral, puedes evaluar hacerlo cómodamente, para que así tengas un mejor desempeño en tus funciones.

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