Cómo hacer mochis caseros

La cocina japonesa no ha pasado desapercibida en occidente y es que, estamos completamente acostumbrados a cruzarnos con ramen, nigiri, sushi, gyozas, miso y otras muchas preparaciones más.

Pero, ¿cuánto sabemos de la repostería de Japón? Son muchos los postres que se elaboran en el país y sus presentaciones tienden a lo sobrio.

Para su elaboración, normalmente se emplean alimentos más tradicionales, como es el caso de la pasta de frijol rojo, razón por la cual, su popularidad es inferior a la de los platos salados.

Por otro lado, resulta imprescindible destacar, que el título de reyes de este tipo de cocina, lo tienen los mochis, te contamos sobre su historia, origen y tipos en el blog.

Este postre se prepara con una masa de arroz glutinoso que, mediante un proceso muy particular, se vuelve tierno y pegajoso. Este ingrediente es empleado habitualmente en numerosas recetas ya que nos ofrece infinidad de posibilidades.

Esta textura es la que le ha otorgado esta inmensa popularidad, diferenciándose del resto de los dulces o postres orientales.

Su consumo además, es increíblemente cómodo ya que suelen tener tamaño de bocado y se puede emplear prácticamente cualquier relleno.

A modo de ejemplo, cabe mencionar que los mochis rellenos de helado son, si no los más famosos, unos de los mochis más famosos del país.

Los mochis son un poco laboriosos, pero el resultado es maravilloso e increíblemente versátil. Tan solo tenemos que pensar en el ingrediente que introduciremos en su interior a modo de relleno, ¡y listo!

No será necesario tampoco hacer uso de un tipo de instrumental particular y complejo, ya que los utensilios diarios serán más que suficiente.

Por otro lado, podemos encontrar los ingredientes que utilizaremos en tiendas y otros establecimientos de alimentación oriental.

Elaboración paso a paso

• Comenzamos preparando el relleno. Para ello, remojamos la gelatina y la disolvemos en 20 g de nata.
• A continuación, montamos el resto de la nata y lo mezclamos con el azúcar.
  Incorporamos 20 g más de nata.
• Congelamos la mezcla durante 2 horas en pequeños moldes semiesféricos (unos 2,5 cm de diámetro).
• Transcurrido este tiempo, hacemos la mesa mezclando con ayuda de una varilla todos los ingredientes del listado. Si disponemos de unas varillas eléctricas, recomendamos enormemente su uso.
• Cubrimos el bol con plástico film y cocinamos la masa a tope de potencia en el microondas durante un minuto.
• Retiramos la masa del microondas y removemos bien.
• Repetimos el proceso dos veces más.
• Para formar nuestros mochis, retiramos de la masa principal porciones de unos 25 g.
  Nos enharinamos los dedos previamente para evitar que se nos adhiera a las manos.
• Colocamos un núcleo de nata, previamente congelado en el interior de la masa. Siempre dejando el pliegue en la parte de abajo. De esta forma, se terminará cerrando por el propio peso de la masa.
• Introducimos los mochis en el frigorífico durante 20 minutos. De esta forma, lograremos que el núcleo se termine de descongelar para poder consumirlos.
• Transcurrido este tiempo, ya estarán perfectamente listos para su consumo. ¡De Rechupete!

Trucos para hacer el mochi perfecto

• Amasado y cocción: El amasado y la cocción de los mochis se produce en etapas lo que le aporta suavidad y elasticidad a la masa.
• Es necesario utilizar harina de arroz glutinoso, ya que así conseguiremos que nos quede el resultado que estamos buscando. No nos quedará igual si utilizamos harina de arroz tradicional.
• Un poco de color nunca está de más: Puedes incorporar colorantes alimenticios o incorporar a la masa un poco del producto que utilizaremos para rellenarlo. De esta forma nos quedará algo más natural.

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