Remedios caseros y naturales para aliviar el dolor de muelas

El dolor de muelas es un dolor que en ocasiones puede ser muy intenso, e incluso puede llegar a condicionar nuestra vida diaria.

El dolor de muelas puede ser uno de los peores padecimientos. Muchas veces genera migrañas, contractura de cervicales e incluso desmayos. Aunque lo más recomendable es que acudas a una consulta de odontología general, los remedios naturales pueden aliviar las molestias de forma segura.

Cúrcuma:

Es uno de los remedios caseros para el dolor de muela más popular. Es conocido el efecto antiinflamatorio de esta especia, hasta el punto que hoy pueden conseguirse píldoras naturales hechas a base de cúrcuma.

Pero además de actuar sobre inflamaciones, evita y reduce infecciones al tiempo que aplaca el dolor. Aparte de sus propiedades curativas, es un ingrediente que podemos animarnos a usar regularmente en la cocina.

¿Cómo se utiliza?

Mezclar una cucharada de polvo de cúrcuma con dos cucharadas de agua hasta que se forme una pasta. Aplicarla sobre la encía dolorida y esperar unos minutos antes de enjuagar.

Clavo de olor:

Esta especia es una de las plantas medicinales más populares por sus propiedades curativas, y uno de los remedios caseros para el dolor de muelas más utilizados.

Si bien los beneficios del clavo de olor y el aceite de clavo son muchos, el anestésico es uno de los más destacados.

Entre sus aceites esenciales se encuentra una sustancia llamada eugenol que actúa como sedante. Normalmente el efecto que tiene sobre el dolor de muelas es excelente.

¿Cómo se utiliza?

Aplicar un clavo directamente sobre la encía inflamada por unos minutos

Preparar una infusión, colocando cinco clavos en agua a hervir, dejar que enfríe y enjuagar la boca cuatro o cinco veces al día.

Colocar cinco clavos en enjuague bucal y realizar el enjuague la misma cantidad de veces. Adquirir el aceite de clavo de olor, poner una o dos gotas en una gasa o algodón y aplicar sobre la encía de la muela afectada.

Perejil:

Esta planta aromática es otro de los remedios caseros más usados para el dolor de muela. Entre sus beneficios, tiene propiedades antiinflamatorias y antiespasmódicas.

Es una hierba con altos contenidos de hierro, funciona como antioxidante y principalmente, es efectiva para aliviar el dolor. Como si fuera poco, su precio hace que sea accesible para cualquiera.

¿Cómo se utiliza?

Lo ideal es masticar una buena cantidad de hojas frescas y crudas de perejil varias veces al día. Aliviará el dolor de muelas rápidamente y además ayuda a neutralizar el aliento.

Té negro:

El té negro contiene una sustancia llamada ácido tánico que funciona como antiinflamatorio y analgésico. Resulta de gran ayuda para aliviar el dolor de muelas y es un ingrediente que fácilmente podemos encontrar en nuestras casas.

¿Cómo se utiliza?

Si disponemos de té negro en saquitos, sumergir una unidad en agua caliente, esperar a que reduzca la temperatura y aplicar el saquito de té sobre la encía inflamada.

En el caso de contar con hebras de té negro, preparar la infusión como normalmente haríamos para ingerirla, dejar que enfríe un poco, humedecer un algodón y colocarlo en la zona de dolor.

Ajo:

Los tratamientos naturales a base de ajo no dejan de emplearse. Tiene numerosos beneficios para la salud, y los más importantes para las encías inflamadas son su poder antibiótico y antinflamatorio.

Este pequeño bulbo concentra propiedades magníficas para curar un dolor de muelas. Además de ser excelente para tratar infecciones o evitar el crecimiento de bacterias en nuestro organismo, tiene la ventaja de ser barato y conseguirse fácilmente.

¿Cómo se utiliza?

Las formas más fáciles y efectivas son:

Aplastar un diente de ajo y aplicar el jugo extraído sobre la zona de la muela afectada

Triturar el ajo, mezclarlo con sal y aplicar esta pasta sobre la encía

Masticar un diente de ajo

Cebolla:

Es otro alimento que ayuda a reducir la inflamación de encías y es un buen remedio casero para el dolor de muela. Sabemos que no es el remedio más agradable (ni para nosotros ni para quienes tienen que soportar nuestro aliento) pero si realmente estamos sufriendo dolor de muelas, no debería importarnos su sabor.

¿Cómo se utiliza?

La mejor técnica para usar la cebolla es cortando un trozo y sostenerlo sobre la zona de dolor, normalmente presionando un poco para que suelte el jugo que es donde se concentran sus propiedades anestésicas. También puede masticarse lentamente para ir liberando el líquido en la boca.

Sal:

El agua salada alivia momentáneamente el dolor de manera inmediata. Es un buen remedio natural para el dolor de muela. Sus propiedades antisépticas funcionan en especial cuando algunos restos de comida entre los dientes están provocando el dolor o cuando hay una infección.

¿Cómo se utiliza?

Mezclar una pequeña cucharada de sal en un vaso chico de agua, y realizar gárgaras o buches por unos 30 segundos. No sólo combate la infección que provoca el dolor, sino que además genera una limpieza profunda de toda la cavidad bucal.

Bebidas alcohólicas:

No nos referimos a cualquier bebida, y por supuesto no se trata de ingerirlas. Las bebidas como el whisky, el ron u otras similares de alta graduación, tienen la capacidad de adormecer la zona y aplacar el dolor rápidamente. No obstante, su efecto es transitorio.

¿Cómo se utiliza?

Básicamente hay dos modos de empleo:

Mojar un algodón o paño con una pequeña cantidad y colocarlo sobre el área por unos minutos

Tomar un sorbo y realizar enjuagues

Extracto de vainilla:

El extracto de vainilla le debe su capacidad anestésica a la dosis de alcohol que contiene. No es elevada, pero es suficiente para adormecer el dolor de muelas y relajar el área de la encía inflamada.

Puede conseguirse en herboristerías e incluso en supermercados. Es uno de los remedios caseros para el dolor de muela más usado en el mundo.

¿Cómo se utiliza?

Podemos utilizar la vainilla de dos maneras: comprar la vara de vainilla, cortarla al medio, retirar el extracto suavemente con una cuchara y aplicar las pepas sobre la encía, o si disponemos de la vainilla en forma de concentrado, mojar un algodón y dejarlo sobre la zona de dolor.

Jugo de limón:

Los agentes antiinflamatorios, antisépticos y astringentes que concentra en sus ácidos ayudan a prevenir infecciones, pero también a combatirlas cuando ya existen y aplacar el dolor de muelas. Es un muy buen aliado para mantener una higiene bucal y un buen remedio.

¿Cómo se utiliza?

Exprimir el jugo de un limón y mezclarlo con agua para que los ácidos no sean muy agresivos o generen ardor. Conservar la mezcla del lado de la muela afectada todo el tiempo que se pueda o realizar sucesivos buches. Si además se le agrega un poco de sal a la mezcla, el efecto anestésico se potencia.

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