Adultos mayores merecen garantía de una vida digna

En varias culturas del mundo los abuelos son considerados “una especie de libros vivientes y de archivos familiares” y por eso son honrados, respetados y tomados como seres llenos de mucha sabiduría que guían a la familia y a las sociedades. También desde el punto de vista de afecto son apreciados como un gran tesoro, por ello hasta son venerados.

Sin embargo, la situación actual en Venezuela frente al adulto mayor es vista como deshumanizada, ya que la actitud predominante ante ellos es de indiferencia e insensibilidad de parte de los ciudadanos y del Gobierno, que además tienen la responsabilidad ineludible de garantizarles una vida digna, hasta el final de sus días.

Los adultos mayores no escapan de la crisis económica, política y social que se vive, convirtiendo a Venezuela en el país más difícil de América Latina para envejecer, según algunas organizaciones que atienden los Derechos Humanos.

Legados

Los adultos mayores son considerados en estos tiempos como unos “huérfanos de atención”, luego de haber entregado una vida al trabajo o dedicación de tiempo a sus labores y familias.

Algunos han asumido vivir su vejez de forma independiente, pero las condiciones a las cuales están expuestos no les permiten estar completamente solos.
Ello debido a que se debe tomar en cuenta la situación país, en donde no hay alimentos y los que hay no son de la calidad requerida para cumplir las dietas que corresponden.

Tampoco hay medicinas para responder a sus tratamientos especiales; hijos y nietos viviendo la diáspora venezolana; así como estar expuestos a desviaciones sociales como la inseguridad y la delincuencia, explica Albany Quijada, socióloga.

“Los derechos sociales y las violaciones de sus garantías fundamentales no son precisamente el legado aspirado, inclusive muchos de ellos son víctimas de la falta de cultura, valores y principios humanos que deberían prevalecer indistintamente las políticas públicas a las cuales estemos expuestos”, afirma la socióloga.

“Estamos dejando abuelitos que viven sus últimos momentos perdiendo peso, masa muscular, alimentándose de la forma menos adecuada, no pudiendo atender de manera eficiente sus padecimientos de salud, y a veces siendo abandonados por sus familiares porque llegan hasta representar para algunos una carga”, dice Quijada.

Ley para cuidar

La Constitución de Venezuela en su Capítulo V de los Derechos Sociales y de las Familias, consagra en el artículo 80 que “el Estado garantizará a los ancianos y ancianas el pleno ejercicio de sus derechos y garantías. El Estado, con la participación solidaria de las familias y la sociedad, está obligado a respetar su dignidad humana, su autonomía y les garantizará atención integral y los beneficios de la seguridad social que eleven y aseguren su calidad de vida”.

Otras normas que regulan la materia son la Ley Orgánica del Sistema de Seguridad Social y la Atención Integral al Adulto Mayor, Ley de Servicios Sociales: Asistencialismo a favor de los más necesitados y Ley del Seguro Social Obligatorio: Previsión Social a favor de la Protección en la Vejez.

El Código Civil venezolano también protege a los adultos e indica en su Artículo 284 que “los hijos tienen la obligación de asistir y suministrar alimentos a sus padres, y demás ascendientes maternos y paternos. Esta obligación comprende todo cuanto sea necesario para asegurarles mantenimiento, alojamiento, vestido, atención médica, medicamentos y condiciones de vida adecuados a su edad y salud, y es exigible en todos los casos en que los padres o ascendientes carecen de recursos o medios para atender a la satisfacción de sus necesidades o se encuentran imposibilitados para ello”.

Todo este marco jurídico debería ser la antesala para poder ampararlos sin discriminación alguna, procurando siempre la protección, el respeto y la dignidad que merecen, aunque hoy en día estén sometidos a tanta indiferencia, discriminación, exclusión y miseria injusta, refiere Mauricio Canales, abogado.

Espacios de atención

Ante las situaciones a las cuales los adultos mayores se exponen, algunas organizaciones han llevado a cabo movimientos que pretenden atender y cuidar al anciano, así como otras a especializarse en áreas para poder abordar su apoyo a las familias ante experiencias particulares, como casos de enfermedades degenerativas.

El propósito de la gestión de estos espacios es poder servir en el rescate del respeto a los mayores, orientando, apoyando y guiando a las familias en el proceso de atención, esto para los casos en donde cuidar a un anciano requiera ciertas logísticas, indica Victoria Fuentes, voluntaria en casas de cuidado a ancianos.

“También debemos rescatar los principios que deben adquirirse en el hogar, en donde asumir la responsabilidad con amor de ser activos en los cuidados de nuestros adultos mayores; algunos son abuelos, otros ni siquiera llegaron a tener hijos, pero aún así, merecen que la nueva generación pueda al menos tener ciertas consideraciones a quienes llevan más años andados”, manifiesta la voluntaria.

“Es imprescindible un recate de valores, poner en cada arruga una palabra de amor para el adulto mayor resulta fundamental; en cada mano amorosa extendida a nosotros, extender un abrazo cálido para ellos, escucharlos con atención, en definitiva, debemos generar un acercamiento que les haga sentir útiles y que les transmita felicidad en sus últimos años de vida”.

Sugerencias generales para atender a un adulto mayor

1.  Realizar un diagnóstico de las necesidades de la persona mayor, con ello se puede identificar qué tipo de cuidado necesita y así proceder a elaborar un plan de acción realista de lo que la familia puede aportar. Del mismo modo, también tendrás que buscar los medios y las personas necesarias para facilitar el proceso.
2. Reúnete con un buen equipo de profesionales que pueda abordar las patologías que puedan padecer los adultos mayores, lo más recomendable es contar con el historial médico, pues así se puede definir si a largo plazo necesitará asistencia personalizada.
3. Establece una rutina diaria, con horarios, que los pueda ayudar a sentirse útiles y activos en la dinámica familiar, lo que los lleva a sentirse apreciados y seguros. Hagamos que se sienta especial.
4. Cuando se cuida a un adulto mayor y que depende de alguien para realizar sus actividades, deben establecerse condiciones de seguridad en la casa para su comodidad.
5. Se recomienda llevar una dieta balanceada para prevenir cualquier problema de salud además de ayudar a su familiar a fortalecerse física y mentalmente.
6. La higiene en personas mayores es muy importante para la prevención de enfermedades y estimula así los hábitos de un estilo de vida saludable.
7. Hay que prevenir la inmovilidad y los trastornos de memoria, promoviendo actividades que lo mantengan socialmente conectado, como pasatiempos o actividades dentro y fuera del hogar que lo motiven a continuar viviendo una vida de calidad.
8. Aprender sobre el cuidado de personas mayores. No dudes en leer lo más que puedas al respecto, consultar con los que saben y, en lo posible, contratar a alguien y aprender algunas de sus técnicas para aplicar luego lo aprendido con tu familiar.
9. Si no puedes pasarte todo el día cuidando a tus padres, suegros, tíos o abuelos, y no tienes a nadie más que te ayude, contrata a alguien para que esté unas horas nada más en la casa y tú puedas hacer lo que quieras.
10. El afecto familiar que deben recibir los adultos mayores es lo principal en su cuidado. Darles amor les sube la autoestima, por eso se le debe enseñar a los niños y jóvenes a respetar, a querer y a valorar a los abuelos, de los que aún se puede aprender.

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