Opinión

Voto ranqueado: una herramienta para renovar la política venezolana

En este modelo, si ningún aspirante obtiene más del 50 % de los votos en la primera ronda, se eliminan progresivamente los candidatos con menos apoyo y se redistribuyen los votos según las siguientes preferencias del votante.
viernes, 18 julio 2025

Mientras en Venezuela seguimos buscando formas de abrir el juego político y darle voz a nuevos liderazgos, en ciudades como Nueva York se implementan mecanismos innovadores que bien podrían inspirar el rediseño de nuestras reglas electorales.

Uno de ellos es el voto ranqueado (ranked choice voting), un sistema que permite al elector ordenar sus preferencias —primera, segunda, tercera opción— en lugar de elegir solo a un candidato.

En este modelo, si ningún aspirante obtiene más del 50 % de los votos en la primera ronda, se eliminan progresivamente los candidatos con menos apoyo y se redistribuyen los votos según las siguientes preferencias del votante. El proceso se repite hasta que alguien alcance la mayoría.

Este método fomenta una competencia más saludable, da visibilidad a nuevas voces, reduce el voto útil —ese que se emite con resignación, no con convicción— y promueve consensos. Es una fórmula que premia las campañas cercanas y constructivas, y no la polarización o el ruido.

En Nueva York, permitió que líderes comunitarios y candidatos independientes tuvieran oportunidades reales, sin estar subordinados a las viejas estructuras partidistas.

En Venezuela, este tipo de herramienta podría tener un impacto transformador. No solo por su innovación técnica, sino por su potencial político en un país que exige renovación. Hoy, contamos con una pluralidad de partidos y liderazgos que aspiran a representar a un electorado desencantado. Sin embargo, ni en las elecciones del 25 de mayo ni en las que se celebrarán el 27 de julio se realizaron elecciones primarias abiertas, lo que ha generado malestar en muchos sectores locales, que sienten que se les impusieron candidaturas sin consulta ni debate. Para muchos, se repitieron los mismos de siempre, sin espacio para la renovación.

Un sistema como el voto ranqueado puede ser la clave para democratizar la selección de candidaturas, evitar conflictos internos, dar voz a liderazgos emergentes y, sobre todo, generar legitimidad de origen. Aplicarlo en futuras primarias —de todos los factores— puede ayudar a reorganizar las dinámicas de poder desde lo local, en un momento en el que el país se aproxima a procesos de reforma institucional profundos y a un nuevo ciclo electoral dentro de los siguientes cuatro a seis años que incluye parlamentarias, presidenciales y quizás una redefinición del mapa político nacional.

Adoptar un mecanismo como éste no es solo una decisión técnica: es una apuesta por una política más transparente, participativa y conectada con las aspiraciones del país que está por venir. No se trata de importar modelos, sino de adaptar buenas prácticas que nos permitan construir instituciones más sólidas, más legítimas y más abiertas.
La democracia no solo se ejerce votando. También se fortalece diseñando mejores formas de elegir. Y quizás, en ese camino, el voto ranqueado pueda ser una de las herramientas que nos ayude a abrir la puerta a una nueva generación de liderazgos en Venezuela.

Ten la información al instante en tu celular. Únete al canal de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente linkhttps://whatsapp.com/channel/0029VagwIcc4o7qP30kE1D0J

También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí: https://t.me/diarioprimicia

error: