Sinónimos castellanos

NACIÓN, PUEBLO: En la idea representada por la voz pueblo hay más individualidad y menos dignidad que en la representada por nación. Usamos esta última cuando hablamos de las instituciones, del territorio, del régimen político, del idioma, de la literatura propios y peculiares de alguna gran fracción de la humanidad, y decimos pueblo cuando hablamos de sus costumbres, de sus hábitos, de los hechos en que toman parte sus individuos como tales.

La nación es un ser ideal más compacto, más homogéneo, más abstracto en cierto modo que el pueblo. La nación es el todo; el pueblo es la suma de las partes que componen la nación, pero excluyendo la idea de los grandes vínculos que ligan a las mismas partes cuando se da a su conjunto el nombre de nación.

Decimos que en las naciones de Oriente está arraigado el despotismo, y que los pueblos del Norte tienen una constitución más robusta que los de los climas cálidos. En el pueblo que habita el territorio de una nación puede haber individuos que no le pertenezcan.

Nación es un reino o república que tiene unidad en las principales condiciones de su existencia, como el origen, el gobierno, el idioma, la religión dominante, las legislación y la parte que ocupa en el globo, en cuyo caso su nombre substantivo propio significa lo mismo que el adjetivo derivado de él y agregado a la palabra nación.

Lo mismo es Rusia que la nación rusa; lo mismo el Bélgica que la nación belga; pero si hablamos de las acciones y prácticas de los individuos, acciones y prácticas que, por muy generales que sean, admiten muchas excepciones, no diremos nación sino pueblo.

Así decimos que el pueblo chino, y no la nación china, es muy diestro en los trabajos manuales; que la cerveza es bebida favorita del pueblo inglés y no de la nación inglesa.

También se usa la voz pueblo para designar una parte sola de la nación; esto es, la gente común, a distinción de las personas de clase y categoría; por ejemplo, en el alzamiento de España contra la usurpación francesa, no solo tomó parte el pueblo, sino que la timaron también el clero y la nobleza.

ARGUCIA, SOFISMA: Un deudor conviene con su acreedor en que asistirá a tal o cual café con el objeto de pagarle. Llega la hora señalada, el deudor observa que el cielo se nubla y no acude a la cita. El acreedor le busca y se le queja. El deudor responde: “el tiempo amenazaba con lluvia y, como usted está delicado, supuse que no iría al café”. Esta manera de argüir es una argucia. Las bestias andan, es así que el hombre anda también, luego el hombre es una bestia. Esta manera de raciocinar es un sofisma.

La argucia es una disposición del entendimiento. El sofisma es un abuso del raciocinio. La argucia es una sutileza. El sofisma es una falsedad. Los hombres más rústicos suelen tener grandes argucias. Sólo el hombre de cierta instrucción puede valerse de los sofismas. La argucia es familiar. El sofisma, escolástico.

MANEJAR, MANIPULAR: Ambas palabras se derivan de mano. Manejar es administrar, guiar, dirigir. Manipular añade a las ideas anteriores la idea de secreto o sigilo. El gobierno maneja los negocios públicos. Un ministro agiotista manipula la hacienda del país. El que maneja puede hacer su agosto; es decir, su tejemaneje. El que manipula no da cuentas a nadie. El manejo se inclina al fraude. La manipulación, al monopolio.

FUENTE: SINÓNIMOS CASTELLANOS, DE ROQUE BARCIA.

viznel@hotmail.com

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