Opinión

Ser venezolana y migrante a la vez trae sus disidencias

Haciendo un análisis desde varias perspectivas en materia de migración, puedo decir que existen situaciones agravantes que se agudizan hasta cuando indicas tu propia nacionalidad.
Diyuly Chourio
viernes, 23 julio 2021

Las mujeres venezolanas, no la han tenido fácil, ni en su propio país, y mucho menos fuera de él, cada día se incrementan más los casos de violencia contra las mujeres, en mi fundación llegan solicitudes de apoyo para las mujeres que se encuentran en el extranjero, cabe destacar que, existe un problema bastante grave, primero cuando las víctimas deciden colocar sus denuncias vienen discriminadas por su estatus irregular de permanencia en el país de destino final, asimismo, se encuentran con una, inseguridad y tutela jurídica – judicial, y muchas veces prefieren llamar a las Organizaciones de sus propios países, para poder ser escuchadas y orientadas acerca de las incidencias que están viviendo.

Cómo podemos ayudar a las mujeres migrantes, unidas/os todas las personas indistintamente de la nacionalidad, etnia, cultura, economía, color político, y pensamientos libres. Si bien es cierto, que cuando una mujer decide irse a otro país, es porque donde se encuentran, se sienten que sus derechos de un buen vivir no están siendo respetados, muchas de ellas se van dejando atrás hijas/os, y familiares a cargos entre otros.

Haciendo un análisis desde varias perspectivas en materia de migración, puedo decir que existen situaciones agravantes que se agudizan hasta cuando indicas tu propia nacionalidad, y digo esto porque no podemos dejar atrás los tratos discriminatorios, primero por ser mujer, segundo por ser migrante, y tercero por el tipo de nacionalidad.

Venezuela ha sido cuna, y recibimiento de migrantes de todas partes del mundo, desde que tengo consciencia hemos vividos cerca de colombianos, italianos, chinos, españoles, portugueses, árabes, peruanos, bolivianos, argentinos, alemanes, estadounidense, entre otras nacionalidades, y que yo recuerde hemos sido muy empáticos/as con las personas, porque así es el venezolano y venezolana.

Pero la realidad del 2021, es otra, porque veo más personas que humanidad, donde la sensibilización se ha perdido, la empatía brilla por su ausencia, y más cuando las mujeres se encuentran en estados crónicos de vulnerabilidad, por otra parte, las mujeres migrantes y refugiadas, siguen siendo víctimas de algún tipo de violencia, según la Organización Mundial Internacional para las Migraciones (OIM), ha reportado que muchas de ellas son acosadas de forma sexual, bajo la violencia verbal, psicológica, y física, y más si viajan solas son triplemente discriminadas, por, ser mujer, por su nacionalidad, o su condición irregular de permanencia en el país que decidieron migrar.

Se observa también, que los servicios de salud, la falta de servicios básicos, y desprotección a la justicia para las mujeres migrantes, siguen aumentando por discriminación xenófoba, que inciden en los factores que se reflejan en el miedo de cada una de ellas, se sienten desprotegidas, y muchas veces les impide hasta denunciar cualquier hecho punible en su contra, porque creen que dejando su propio país no tienen más derechos como humanas, y pues no es así, donde sea que se encuentren, deben recordar que existen sus derechos internacionales, y, que no lo pueden olvidar bajo ningún concepto, es por eso que cuando solicitan orientación ante mi ONG, les indico siempre que cuando se trasladan hacia otros países indistintamente sea su condición, sus DDHH, es otro equipaje más que llevan consigo.

Mujeres migrantes, donde la violencia aumenta por las propuestas de trabajo que le hacen bajo engaño, y que son las primeras promesas – captaciones que les forjan, para luego ser sometidas a la trata de persona, tráfico sexual, tráfico de órganos, y hasta trabajos forzosos, en condiciones que terminan esclavizadas, coaccionadas, amenazadas, y violadas en diferentes formas, y lo peor es, que la trata de persona viene siendo uno de los terceros negocios más lucrativos a nivel mundial, de hecho, está primero el narcotráfico, luego la venta de armas, y tercero la trata de personas, donde el 80 % de las víctimas son mujeres y niñas, especificando que la trata para fines de explotación y esclavitud laboral es de un 56 %, y la trata con fines sexuales es de un 98 %, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y el Protocolo de las Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas de Mujeres y Niñas.(2000).

Por otro lado, existen organismos oficiales de género de la Organización de Estados Americanos, para atender cualquier problemática como lo es, la Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) – Inter- American Commission of Women, que tiene como punto focal romper con todos los sesgos de violencia, y eliminar por completo con los tratos discriminatorios, por medio del sistema de protección interamericano, las mujeres están legalmente protegidas a nivel internacional, pero no todas saben que existen mecanismos internacionales que las protegen, es por eso, que urge seguir hablando de este flagelo, de las diferentes formas de violencia, y sobre todo de la falta de justicia y protección hacia cada mujer que decide migrar.

Este tema es mucho más amplio, sin duda alguna, pero tenemos que empezar a visibilizar la prevención y educación, que debe tener toda la ciudadanía, y que esto afecta, no solo a las mujeres migrantes venezolanas, sino a todas las que deciden migrar, pero que, a su vez este tipo de violencia, se pueden encontrar y reflejar, dentro y fuera de su propio país de origen, siendo una de las violencias más indignantes a nivel mundial, ya que son engañadas, y coaccionadas sin consentimiento alguno.

Es hora de avanzar, y dejar de normalizar la violencia contra las mujeres, y también de ver a las mujeres venezolanas y no solo, como objeto sexualizado, y discriminado bajo las diferentes formas VBG, que existen tanto a nivel nacional e internacional.

Recuerda que no estás sola, que existe la Red Naranja, donde estamos muchas organizaciones defensoras de DDHH de las mujeres, y también ONG, específicas para la trata de persona, y la migración.

Ingresando al directorio del link. https://rednaranja.com.ve/

“Con la violencia contra las mujeres no se trata, y mucho menos se concilia, no más migrantes discriminadas”
Diyuly Chourio.

Fuentes consultadas:

https://reliefweb.int/sites/reliefweb.int/files/resources/4-gender-violencia.pdf

http://directorio.sela.org/listado-de-organismos/cim.aspx

https://www.trabajo.gob.pe/migrante/pdf/trata_personas_peru_manual.pdf

@diyulychourio Twitter

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