Semana en domingo
Gasolina
El gobierno no informa del problema de la gasolina en algunos estados y la gente divulga cualquier cantidad de versiones de las causas de esta situación.
Todo el mundo sabe que las refinerías están operando muy por debajo de su capacidad instalada, pero como han bajado las exportaciones, mucho suponían que lo que producían era suficiente para abastecer el consumo nacional.
Sin embargo, desde hace meses los expertos señalan que la producción de gasolina es insuficiente y hay que importarla para completar el consumo.
Eso por supuesto no se podrá sostener por mucho tiempo porque no nos están sobrando dólares para traerla del exterior, y mucho menos cuando se compra afuera a casi dólar el litro, para después regalarla en las estaciones de servicio.
En Cuba, la gasolina que le suministra Venezuela la venden a 1,25 dólares el litro, y habría que saber a cuánto nos la están pagando, si es que la pagan.
Pero en todo caso, en casi todo el Caribe la gasolina cuesta un dólar el litro y es absolutamente insostenible seguir suministrándole gasolina al pueblo venezolano a los precios actuales, que no son suficientes no siquiera para pagarle el salario a los isleros de las estaciones de servicio.
Probablemente mucha gente no sabe que desde hace algún tiempo, los isleros, muchos de los cuales son nómina de Pdvsa, además le pagan a la estación de servicio para que les permita suministrarle gasolina a los vehículos, porque lo que reciben en bolívares soberanos cada día, supera varias veces el precio de una cisterna de gasolina, de 34.000 litros.
He hablado con isleros que le dan todos los días 20.000 bolívares a la estación de servicio y, según ellos, les quedan 80 ó 100.000 en efectivo, que en el mercado negro actual son casi el doble.
Si eso es verdad, el gran negocio no lo está haciendo Pdvsa sino las isleros y las estaciones de servicio, que ganan por la venta de gasolina mucho más que lo que recibe la petrolera por cada litro.
Esa es una situación que se tiene que resolver, para que se pueda normalizar el suministro de gasolina en las estaciones de servicio.
La raíz del problema es ese y de poco sirve entonces despotricar contra el gobierno y Pdvsa en las colas de las estaciones de servicio, porque con eso no vamos a resolver nada. Y a este respecto recuerdo que hace algunos años escuche decir de, un connotado chavista de Pdvsa, que “el venezolano de a pie no tiene carro y no necesita gasolina”.
Si ese es el concepto que priva en el seno del régimen, queda más que claro entonces que no es un problema prioritario desde el punto de vista ideológico, aunque valdría la pena señalar que todas las economías en este planeta necesitan energía, y en el caso nuestro, el país se mueve con gasolina. Solo eso.
Sentimiento nacional
Para buena parte de la población del país, poder sobrevivir en el día a día se ha convertido en su primera prioridad, porque lo ha intentado todo para salir de Maduro pero no ha sido posible.
Cubrir las necesidades vitales diarias se ha convertido en algo más urgente que las consideraciones de tipo político, porque la mayoría de ellas tienen poca relación con que sea Maduro o cualquier otro el que esté mandando en el país.
Cuando se trata de comprar alimentos o medicinas, poco importa quién sea el que tiene el poder porque igual vas a tener que pagar lo que te pidan por lo que necesitas.
Mucha gente está trasladando la energía que le puso a luchar contra Maduro, a poder sobrevivir, en cierta forma aceptando que por la vía que lo ha intentado eso no ha sido posible.
En muchos venezolanos, la sobrevivencia diaria es la primera prioridad, porque incluso si se produjera un cambio de gobierno, eso no resolvería de inmediato la grave situación que estamos sufriendo.
Con una economía dolarizada en sus precios, muchos expertos no se explican cómo hacen los venezolanos para sobrevivir con salarios en bolívares, pero lo cierto es que lo están haciendo y en cierta forma ese sistema ha frenado bastante el ascenso de los índices inflacionarios.
Desde este punto de vista, los precios se estabilizan más cuando son expresados en dólares que cuando son fijados en bolívares, porque el dólar es una moneda mucho más estable.
Esta dolarización parcial de la economía en cierta forma ha restado beligerancia a la oposición, porque parte de la población ha encontrado cómo sobrevivir a la crisis y porque considera que, a pesar de todo, al final llegará un gobierno de transición.
Muchos conocidos me dicen que para ellos ahora lo más importante es poder dar lo indispensable a su familia, con o sin Maduro, pero uno de ellos me expresó que este estado de cosas es invariable, tanto para Maduro como para la oposición. ¡Menuda Navidad entonces la que tendremos!
Cuatro
Uno
Si antes teníamos precios distintos al pagar con débito o efectivo, ahora se suma un tercero al pagar con dólares. Y en algunos sitios cobran precios distintos si se paga con transferencia, lo que significa que nuestro país es el que tiene la mayor cantidad de precios, según la forma de pago. Nada extraño, porque por allí me contaron que en las minas el sexo tiene distinto precio, según se pague en bolívares, dólares, reais, pesos colombianos, oro, diamantes, pacas de comida, licor, o un pasaje hasta Puerta Ordaz o Ciudad Bolívar.
Dos
Lo del poco efectivo en los bancos sigue igual, a pesar de los anuncios del gobierno de que la orden es entregar lo que cl cliente quiera.
El banco que más entrega da 50.000 bolívares y otros solo 10.000 que no alcanzan para nada. Suponíamos que ese problema se iba a resolver con la emisión de billetes mayor valor en el nuevo cono monetario, pero eso de nada sirvió.
Ya ni siquiera en las estaciones de servicio y el transporte público quieren recibir los billetes de 100 y en muchos establecimientos ponen mala cara cuando se paga con los de 500. ¿Y cómo hacemos entonces si son los billetes que están entregando en algunos bancos?
Tres
Los economistas están sugiriendo la compra adelantada de todo lo que se pueda para esta Navidad, incluyendo ingredientes de las hallacas, presumiendo que los precios se van a disparar a medida que se acerquen esas fiestas.
Dicen que por estos días el dólar ha bajado porque muchas empresas necesitan venderlos para tener bolívares y pagar las utilidades a sus trabajadores, pero se trata de algo temporal y que luego volverá a subir, remolcando los precios.
Dicen que por eso bajó de 27.000, que fue el tope hace una semana, a los 21.000 en que estaba este viernes.
También contribuye a la baja del dólar, el hecho de que no hay suficientes bolívares y los ofertantes tienen que venderlos más baratos para encontrar quien compre, sobre todo cuando se trata de grandes sumas.
Cuatro
El gobierno establece controles y hace lo que puede, pero no ha logrado eliminar el bachaqueo de gasolina, que es el gran negocio en los estados en los que hay escasez, pero sobre tofo en las fronteras.
Unos amigos acaban de regresar del Táchira y me contaron que pagaron 30 dólares por una pimpina de 20 litros, que además tuvieron que defender en una alcabala en la que les querían decomisar el envase.
Un gandolero les contó que las pimpinas decomisadas se las venden a otros conductores, de manera que hay un reciclaje permanente e impune.
Un amigo tuvo una fuerte discusión en una alcabala, viniendo de El Tigre, porque alegaba que le podían decomisar la gasolina, pero no el envase. Al final botó el contenido al suelo y logró conservar la pimpina, pero pasó un mal rato.
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