¿Qué tan duras son tus habilidades blandas?

¿Sabes lo que son estas habilidades?

Quizás hoy en día escuches con mucha frecuencia los términos, habilidades duras y habilidades blandas, Pero, ¿qué son? ¿De dónde viene su nombre?, ¿Por qué son tan importantes?

Estos términos nacen en los Estados Unidos, alrededor de los años 60, cuando una persona tomó la iniciativa creativa de comparar al ser humano con una computadora , este equipo, está conformado por un hardware o parte física de un sistema informático y un software, que es la parte intangible o sistema operativa , la persona al realizar la comparación, tomo el prefijo de hard , así como el de soft y les agregó el skill, dando origen a los términos hard skill y soft skill que traducido al español, significan habilidades duras y habilidades blandas.

Las habilidades duras, son las que adquirimos con la educación formal, así como las que aprendemos a lo largo de la vida, son perfectamente medibles, pero las habilidades blandas, son las competencias humanas, esas que nos permiten tener una relación socialmente agradable con las personas de nuestro entorno, convirtiéndonos en seres humanos distintos, donde cada uno lleva su marca personal.

Cabe destacar que se le atribuye al 85 % del éxito en un trabajo, a las habilidades blandas o humanas y tan solo el 15 % a las habilidades duras.

Esto resultados han motivado en los últimos años a un cambio significativo de paradigmas en los programas de reclutamiento de las organizaciones.

Comparto con ustedes una historia real, cuyo nombre no es verdadero, Magdalena era una joven gerente de una empresa, madre de dos hijos, dos veces divorciada y se encontraba soltera, excelente profesional, conocía cómo efectuar todos los cálculos y reflejarlos perfectamente en un informe ejecutivo que decía elaborar sola, porque desconfiaba de las cifras que generaban los cálculos de sus colaboradores, sin embargo, cuando algo no salía bien, de inmediato buscaba un responsable dentro del equipo a quien atribuirle la culpa, era una persona de poco hablar, pero cuando lo hacía, se dirigía a las personas en forma autoritaria e impositiva y se regocijaba en decir que ella tenía mano dura y que su familia y amigos siempre lo decían, afirmaba que ella tenía que hacer las cosas para que salieran bien y que si ella no estaba, nada funcionaba, sus colaboradores se quejaban constantemente del maltrato que recibían de su parte, el departamento de talento humano en varias oportunidades, le había informado de las quejas permanentes de sus compañeros, y esta siempre negaba tales maltratos.

Poco a poco, el ambiente laboral se deterioró, al punto que un buen día, fue tomada de infraganti por un superior , este vio como agredía verbal y físicamente a un personal de mantenimiento, al llamarle la atención, esta lo negó pese a haber sido vista.

Lamentablemente Magdalena perdió su puesto de trabajo, no pesó el que tuviese sólidas competencias duras, era una persona que no podía trabajar en equipo, carecía de empatía, poco comunicativa, generadora de un ambiente tóxico.

Cómo pueden observar el que una persona tenga excelente competencias duras no garantiza sinergia en los equipos, buena comunicación y mucho menos el éxito en la permanencia en su trabajo, debe existir un equilibrio entre ambas habilidades, y permanecer siempre en mejora continua.

Sobre este tema los invito a reflexionar, el que las personas tengan desarrolladas sus habilidades blandas y las pongan en práctica, tiene una significativa repercusión positiva, no solo para las organizaciones, sino también para una mejor vida como individuos, ya que las habilidades blandas, repercuten no solo en su trabajo, sino en su relación de pareja, amigos, crianza para sus hijos, en consecuencia en la sociedad, ya que estas contemplan liderazgo, manejo de conflicto , inteligencia emocional, empatía, asertividad, comunicación efectiva, trabajo en equipo, todo ello repercute también en la percepción y valoración que la persona tenga de sí misma.

Lo importante no es solo el ser humano que somos, sino como somos.

Debemos aprender a desarrollar habilidades blandas y ponerlas en práctica.

Descubre con cuáles habilidades blandas cuentas en tu mochila, toma conciencia de ellas, continúa desarrollándolas e influencia sobre tu entorno y conviértete en Gente que suma, Gente Plus.

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