No voten-no voten
Da tristeza seguir oyendo como una porción de venezolanos fuera de toda lógica, continúan anormalmente oyendo las inculcas de unos dirigentes de oposición ajenos de toda la realidad política que vive el país.
La inscripción de partidos de oposición ante el CNE para participar en el proceso electoral el 6 de diciembre, es muestra que la oposición en sí, no es una franquicia ni es exclusiva de particulares.
Henrique Capriles uno de los opositores conocido en el país, así lo ha reconocido y ha dicho a voz populi en todas las entrevista que ha sostenido, que llevan 7 años diciendo lo mismo (no voten- no vote), sin ningún resultado positivo para nadie y que lamentaba que el G4 (Voluntad popular, Primero justicia, AD y Un Nuevo tiempo), haya sido incapaz de reconocer su errores y rectificar los mismos.
Basta ya de esta dirigencia que dice solo lo que un grupo de gente desea escuchar. No es responsable ni realista, ni mucho menos serio. Los que pretendan seguir en la política deben aprender a ejercerla alejados del populismo y de la demagogia, ya que desde hace tiempo se necesita tanto de seriedad como de creatividad.
Tiene que haber unidad pero no para consultas inútiles, ni para ilusionar huecamente a la gente, los líderes debemos hablarles claro y por muy impopular que pueda ser la verdad, es necesario hacer entender la realidad. Y en la actual situación, no tenemos otra dirección que no sea la electoral.
Hay que acabar con ese chantaje unitario, ha llegado la hora de ser realista y entender que la Asamblea Nacional tiene fecha de caducidad.
La elección por muy desigual que se diga y que por el ventajismo del gobierno de Maduro, es real, termine siendo el 6D u otra fecha de ser pospuesta, se realizarán. La ficción es pensar que son ficticias.
Porque mientras cada quien continua con su ficción, peleándose por una botella vacía unos, otro reducido grupito en una constante competencia, la sociedad continua padeciendo la cruda y brutal realidad, producto de la grave crisis económica, política y social.
Es decir, la enorme mayoría en este país, todos los días sigue buscando bajo su propio efecto, la manera de sobre vivir al desastre y a los dirigentes de redes sociales.
Es inverosímil, que después de la auto juramentación del “sí o-si del 23-F, del 30-A y de Gedeón, todavía haya quienes concluyan que el colega Juan Guaidó le ha ido mal porque se dejó seducir por el extremismo, sin considerar que la política de oposición ha sido en general extremista e improductiva.
Como dice la Dra. Morán: “Si quieren partir de algún punto para tratar de reconstruir una política de oposición que perdió el rumbo hace tiempo, olvídense de boicot y de intervención, háganlo mirando a la miseria que los rodea y al sufrimiento de millones. Intenten volver a conectarse con los que viven en la orfandad. No hay otro camino”, ese ha sido siempre nuestro planteamiento, esa ha sido siempre nuestra apuesta, poner siempre a la gente primero.
Gracias a Dios, la despolarización y el pluralismo cada día ganan más adeptos, única vía para lograr vencer definitivamente ese lenguaje de odio y violencia; y así permitir un encuentro en función de un rumbo gradual capaz de llevarnos al cambio que anhelamos, la cual puede ser común sin ser única, rescatando así parte esencial de la democracia misma.
Obviamente que hay quienes disientan, pero es innegable que en política es mejor actuar y tener una propuesta a esperar que las cosas ocurran solas o que alguien las haga por usted.
Como bien lo decía el profesor Ángel Álvarez: “La operación extranjera, no ocurrirá. El gobierno de emergencia nacional, no gobernará. La resistencia no se sabe qué es. Las elecciones irán, en su fecha o luego pero irán. A los políticos (no a los tuiteros), les toca decidir si actúan o siguen esperando por lo que pasará.
No podemos seguir con ese realismo mágico, por ejemplo como el acuerdo del gobierno interino con la DEA, el cual me pregunto:
¿Cómo se implementará?
No podemos permitir continuar ahogándonos en salidas ideales.
Finalizo recordando que el CNE, el TSJ y la Fiscalía tienen su origen en la abstención del año 2005. No podemos dejar de ejercer nuestro derecho ciudadano. El vacío solo les facilita el camino.
Qué tal…? Más claro no canta un gallo. No es un chavista quien lo dijo, lo dijo el opositor Henrique Capriles. Hasta el próximo.
Nota. Saludos colegas, si algún inconexo en cuanto a la justificación de este escrito, les pido consideración, visto que la computadora está presentando fallas. Un abrazo.
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