La Gran Jugada: Los niños quieren jugar

Hace algún tiempo nos dimos la oportunidad de escribir temas específicos sobre los niños y el interés de ellos, como parte de las personas más vulnerables que tenemos en la sociedad de aquí, de allá, y otros sectores.

Recuerdo los antes expresado debido a que hace algunos días, siguiendo la onda de conversaciones con algunas personas, de interactuar, atender y de dar un abrazo virtual de feliz año nuevo, además del buen deseo que nunca esta demás; conversé con un buen amigo de esos tantos que me he conseguido dentro de las actividades deportivas, y nos dimos la oportunidad de hablar sobre varios temas dentro del fútbol de salón, y de otros deportes donde prevalece el encanto de la práctica que expresan los niños.

Quien suscribe las presentes líneas, ha tenido el convencimiento, que aun cuando se es adulto hay que tener acciones de niños, actuar como lo hacen los más pequeños en cuanto a los de la casa, hay que parecerse a ellos para poder resolver o hacer muchas cosas en su favor.

Que tales situaciones a la larga ayudan a la sociedad. Siendo de la manera antes expresada, con buena supervisión y acción es posible tener mejores avances por los caminos soñados.

Con la persona que coincidí en lo antes descrito fue con el tachirense Wilmer Capacho, un árbitro de los mejores quilates en cuanto a los valores que nos podamos imaginar como seres humanos.

El acuerdo internacional con más cantidad de Estados firmantes es la Convención sobre los Derechos del Niño, aprobado el 20 de noviembre de 1989. Amigas, amigos dicho tratado es el más ratificado de la historia, y los 194 Estados que lo han firmado deben rendir cuentas sobre su cumplimiento.

Por tal motivo, Venezuela como firmante se dio la oportunidad de que el legislador patrio construyera una norma en favor de los niños y los adolescentes del país, donde estuvieran garantizados los derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos de todos los niños, niñas y adolescentes.

Derechos, que todas las personas naturales y jurídicas están obligadas a respetar, a que los mismos sean realidad en favor de los niños y adolescentes. Tengan presente que, los niños quieren jugar, y debemos apoyarles en eso.

Ninguna organización, pero ninguna debe hacer resoluciones, reglamentos, o acuerdos, que vayan en contra de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, siempre se debe tener presente el principio de interés superior del niño, por lo cual prohibir que algún niño o niña no haga la práctica de algún o algunos determinados deportes sin tener presente, que dicha práctica sea en contra de ellos, se estaría actuando en contra de los niños.

Así que, es necesario que tengamos presentes algunas situaciones para que luego no diga que no sabía, ya que, eso no sabía no tiene validez.

Wilmer Capacho, muchas gracias por compartir y coincidir en las posiciones que aportan en favor de la sociedad.

Amigas y amigos que se pasean por el presente espacio, será hasta una nueva oportunidad con el favor de Dios.

Para contactos @Joseceden o por Facebook / José E Cedeño González (El hijo mayor de Otilia González).

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