La celotipia, un problema que puede acabar con tu relación de pareja
Los problemas de pareja son múltiples, desde la comunicación ineficiente, pasando por problemas sexuales, infertilidad, desconfianza, inseguridad, infidelidad, celos hasta el maltrato físico y emocional. Es impresionante cómo estos problemas, si no son atendidos oportunamente puede acabar con la relación. Todos son importantes, sin embargo, hoy quiero abordar el tema de los celos, especialmente cuando éstos llegan a ser patológicos, con ideas y toman forma de obsesión, conocida como celotipia o Síndrome de Otelo.
¿Qué es y cómo se manifiesta?
Hablar de los celos, es referirse a ese sentimiento que se siente hacia los amigos, la familia y muy especialmente hacia la pareja, pero cuando comienzan a afectar nuestra vida emocional, mental y física se convierte en un problema grave que es necesario atender antes que llegue a consecuencias mayores.
Justamente cuando llega a esos niveles es cuando se habla de Celotipia, la cual es un tipo de Trastorno Delirante, conocido como Celotípico y se relaciona con ideas delirantes de que el compañero sexual es infiel (DSM-V, Criterios para el diagnóstico de Trastorno Delirante). Cabe destacar que una idea delirante se refiere a una idea equivocada o errada que es mantenida por el paciente de manera inquebrantable, esa es su principal característica y por ende es la que dificulta el cuadro, por la convicción que tiene la persona que su idea es verdad, y esto es muy común en la persona con celotipia.
Cuando se atraviesa esta condición, las principales manifestaciones son:
• El mantenimiento de ideas delirantes con total y absoluta convicción de que son verdad.
• Independientemente de que hayan evidencias o no, la persona mantiene inalterable su convicción e idea de que su pareja la está engañando.
• Síntomas cognitivos como, pensamientos e interpretaciones irracionales, tales como dudas permanentes en la interacción de la pareja con otras personas, el análisis de las intenciones de la pareja y de las personas que le rodean; lo cual produce una cadena interminable de pensamientos que causan inseguridad, desconfianza, suspicacia y ansiedad y a su vez conllevan a conductas para tratar de controlar a la pareja, como buscar indicios para confirmar sus sospechas, revisar constantemente el teléfono, llamar indeterminadas veces a su pareja para saber dónde y con quien está, clonar el teléfono, colocar GPS al vehículos y un sinfín de conductas que afectan su estabilidad física, emocional y mental.
• Síntomas psicoemocionales, como miedos, inseguridades, desconfianza, obsesión, percepción de soledad y abandono, estrés y dudas constantes que incrementan la percepción de amenaza y peligro y desarrollar cuadros de ansiedad generalizada.
• Síntomas psicofisiológicos intermitentes, como cuadros transitorios de hipertensión, contracción muscular, insomnio, alteraciones digestivas, dolores en el pecho, miedo a morir e incluso severos cuadros depresivos.
• Reacciones de intolerancia, irritabilidad extrema, agresividad y confrontación no solo con su pareja y familia, sino también con su círculo social.
Salir de la tormenta y llegar a la calma
Culturalmente se nos dijo que sentir celos es una muestra de amor y que cuanto más celo se siente, más se ama a la persona; y la verdad es que esto no es así. Es tiempo de acabar con este paradigma que se sembró y nos llevó a pensar que si no nos celan es porque no nos quieren. Así que vamos cómo recuperar nuestra vida emocional, mental, física y espiritual hasta llegar a sentir plenitud y bienestar integral:
1. Si te das cuenta que sientes algunos de los síntomas descritos, busca ayuda profesional inmediatamente, podrías estar atravesando un episodio de celotipia que es urgente que atiendas. La psicoterapia, la terapia cognitiva conductutal y un tratamiento médico son altamente recomendados en estos casos.
2. Sanar las heridas emocionales. La terapia profesional nos puede ayudar. Una de las recomendaciones primarias también incluye leer material especializado en esta materia, como por ejemplo el libro de Lise Bourbeau Las cinco heridas que impiden ser uno mismo. Normalmente esta patología también está relacionada con abandonos en la infancia, maltratos emocionales y carencia de afecto.
3. Recuperar la autoestima. Esto es una condición sine qua non. Es fundamental recuperar la propia valía. Sentir que somos merecedores del amor, la felicidad, la paz interior, el autoreconocimiento, la autoaceptación, el autorespeto, la autoconfianza y seguridad en sí mismo y en nuestras capacidades. Esto es determinante para salir de esta codependencia emocional que tanto sufrimiento deja a su paso.
Volver al amor, volver a Dios, volver a ti mismo te traerá un mayor bienestar, felicidad y tranquilidad. Se puede sanar, se puede ser feliz.
Life Coach Trainer PNL
@yamiletpinto
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