¿Hasta cuándo los femicidios?
Que no se resolverá nunca este flagelo con simplemente ordenar en una rueda de prensa televisada que se investigue un crimen, tampoco lo hará dar cifras al aire sin soporte científico sobre los verdaderos índices de violencia, más cuando se incentiva a no registrar en las estadísticas oficiales muchos crímenes como femicidio, para de alguna manera utilizar en un momento dado la narrativa falsa de la reducción de los niveles de violencia.
Nuestro estado Bolívar ha sido uno donde los índices de violencia de género se han elevado exponencialmente, especialmente los femicidios, ello se corrobora cuando comparamos estadísticamente los índices de años anteriores y al parecer, esto no ha sido suficiente para que de manera responsable el estado afronte la situación desde la seguridad ciudadana, esa que le corresponde por mandato de nuestra Constitución.
Sorprende el hecho que la única respuesta estadal sea la de ordenar con la rimbombancia de estilo, que se activen las investigaciones de rigor sin que se le presente al país un esquema de prevención del delito, planes de seguridad diseñados específicamente para contrarrestar este y otros flagelos derivados de la violencia de género, no me cansaré de decir que sólo con encarcelar a los responsables no se resolverá la violencia de género.
Aunado a ello es evidente el incremento de las odiosas “cifras negras”, esas que decantan de una lamentable pérdida de la credibilidad en las instituciones, siendo la impunidad uno de sus productos más perceptibles y el que hace posible ese fenómeno que se replica con velocidad, en el que las víctimas prefieren callar y aguantar, antes de pasar por el calvario de la denuncia y sus pésimas prácticas.
El propio Fiscal General reconoció recientemente en público la corrupción dentro de la institución que representa, exponiendo el caso de una víctima en el estado Zulia que acudió a interponer una denuncia y terminó siendo imputada al no acceder al pago extorsivo que se le cobraba desde la Fiscalía para actuar. Ello indudablemente ahuyenta pavorosamente a cualquier víctima, que ve como quien tiene el deber de defender sus derechos, actúa en su contra favoreciendo la injusticia, la corrupción y la consecuente impunidad.
Pero no sólo se percibe esta situación de inseguridad jurídica con los hechos investigados, sino también con aquellos ya procesados y a la espera de Juicio, como ocurre acá en el estado Bolívar con el caso del Femicidio de Gina Pirrongelli, el cual se difirió tres veces en un mes a causa de un mismo e insólito factor: La falta del traslado del imputado al Tribunal.
Es momento de acciones más que palabras y ruedas de prensa, es el momento de trabajar unidos por un mismo propósito, haciendo a un lado las diferencias que nos separan, es momento de los humanos por la humanidad, de la voluntad de cambio como elemento necesario para la transformación ciudadana, es momento de trabajar articuladamente, sociedad civil y estado y en el que las instituciones sean el núcleo de esa ecuación, de la que deben diseñarse los necesarios planes de prevención del delito en todas sus especies, especialmente los delitos contra las mujeres.
El reconocimiento del fenómeno de la violencia, la creación de la legislación y el sistema de protección fue el primer e importante paso, pero la correcta aplicación de la ley desde su base preventiva es lo que definitivamente nos acercará a los objetivos, sólo de esa forma se verá la honestidad de los actores responsables de llevar a cabo el papel establecido en la ley.
¡YA BASTA DE FEMICIDIOS, ES HORA DE ACTUAR!
Ten la información al instante en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente link:https://chat.whatsapp.com/IRw6IXFYgK25m8tLpx3lKk
También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí:https://t.me/diarioprimicia