Opinión

Hablemos hoy de: Tomemos la decisión que sí es posible

Solo hay que tocar con el alma tan grande sentimiento, y veremos como nuestra vida cambia y nos transforma en mejores personas.
martes, 16 julio 2024

Comencemos haciendo una reflexión, ¿cuál es el mayor sentimiento que alberga nuestro corazón?, seguro estoy que saben que es el amor.

Y su capacidad es tan grande que puede abarcar hasta lo inimaginable. Puede permear todo lo que se nos ocurra, y no solo hacia las personas, sino hacia todo lo que tenga vida o no en el mundo.

Es un sentimiento universal y es tan poderoso, que cuando actúa puede romper cualquier barrera que se interponga en su camino.

Es por eso que los seres humanos tenemos la capacidad para generar todo lo bueno que pueda pasar por nuestra mente, y llevar a la realidad y hacer brillar, tantos hermosos sentimientos que adornan nuestra vida, solo debemos intentarlo para hacerlo realidad.

El ser humano es producto precisamente del amor. De ese hermoso sentimiento que nos dice que no es necesario llorar porque todo lo que hay que hacer, lo podemos hacer muy bien sin dolor ni tristeza, porque existen infinidad de maneras de llegar a él si nos lo proponemos.

Solo hay que tocar con el alma tan grande sentimiento, y veremos como nuestra vida cambia y nos transforma en mejores personas.

Esto nos mueve a pensar en la alta posibilidad de tener un mundo mejor en el que todos tengamos posibilidades. En el que el equilibrio y la justeza sean determinados en su justa dimensión, en el que cada una de nuestras acciones estén dirigidas a sanar la humanidad y el planeta, que nos demos cuenta que si hay un lugar mejor y que está frente a nuestros ojos, y que solo nosotros podemos hacer realidad su transformación para bien, que nuestras acciones deben estar dirigidas a parar y acabar con su degradación y extinción.

Nos tenemos que dar el permiso de ver no solo hacia adelante, también debemos dirigir la mirada hacia los lados, para que cuando tengamos que ver hacia atrás, podamos ver el fruto de todo lo bueno que fuimos capaces de hacer.

El hombre ha vivido en una constante guerra contra la naturaleza, sin darnos cuenta que estamos cavando la tumba de la humanidad, que efectivamente hay mucha gente muriendo por la actuación desmedida de muchos a quienes el egoísmo los ciega y los hace actuar sin escrúpulos y sin consciencia, sin querer ver que el planeta es de todos y para todos, y que realmente podemos hacer de él, un sitio mejor para vivir en comunidad y en concordancia con las leyes del universo.

Tal vez más de la mitad de la humanidad nos estamos viendo afectados por la vulnerabilidad y variabilidad en los cambios del clima en el planeta.

Desde el deshielo de los casquetes polares, la intensidad en las precipitaciones, la subida en el nivel del mar que amenaza a grandes poblaciones, incendios de dimensiones inimaginables, huracanes cuya potencia se transforma en fuerza devastadora en tiempos extremadamente cortos, escasez de lluvia y sequías extremas que han producido profundas crisis en diferentes partes del mundo, extinción de especies de fauna y flora importantes para la evolución de los ecosistemas y el equilibrio en la vida del planeta.

En general nada ni nadie se escapa de la afectación que está sufriendo la tierra en la actualidad, y todo por la actuación desmedida e inhumana del hombre.

Las consecuencias de todo esto son inimaginables para la vida del planeta, por lo que hay que reducir significativamente la gran brecha que existe entre lo social y lo ambiental, y podamos hablar de un verdadero desarrollo sostenible.

Desde el corazón debemos despertar el amor que genere una conciencia colectiva que nos conduzca a la acción, que despierte la esperanza, que nos permita ver el tiempo de oportunidades, que nos motive a construir alternativas de transformación para superar las desigualdades, la guerra, la crisis económica, la crisis geopolítica, el egoísmo y el ansia de poder en algunos individuos ciegos que no quieren ver el momento histórico que vive la humanidad en la actualidad.

No podemos olvidar que como hombres y mujeres estamos capacitados para ver lo bueno y procesar lo malo, y que desde el amor que no puede mentir, debemos abrirnos a los cambios que necesita la humanidad en la actualidad, que debemos actuar con alegría, que no debemos intentar hacer las cosas sino que simplemente debemos tomar la decisión y hacerlas, que el miedo no es una buena opción, que las ganas y la decisión firme de actuar es lo que nos debe mover, porque como dice Michael Jackson en su canción Heal the world, debemos dejar de existir y comenzar a vivir.

Los seres humanos somos una especie hermosa, llenos de buena energía, capaces, con valores y principios, con mucha fuerza, con grandes deseos de hacer cosas extraordinarias, con un potencial único para ser, ver y actuar de manera adecuada a las circunstancias.

Por tanto, llegó la hora de activar todos estos elementos que nos conforman y hacer el mejor uso de ellos, en toda la dimensión de la palabra.

Mejorar nuestras relaciones con el entorno, visualizar una mayor participación en lo familiar, social, económico, ambiental, y en general en todo lo que tiene que ver con el mejoramiento de la vida, es un compromiso que cada uno de nosotros debe asumir frente a Dios y frente a nosotros mismos.

Somos capaces de construir un mundo mejor, no solo porque es una necesidad, sino porque lo tenemos que visualizar como un sueño alcanzable y lo mejor de todo, es que tenemos en nuestras manos lo que necesitamos para hacerlo realidad.

Así que tomemos la decisión desde el corazón, que si es posible.

¿Sabes a qué animales se denomina Anádromos?

A animales que nacen en agua dulce pero viven en el mar.

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