Hablemos hoy de: Lo que pensamos, lo que queremos

Se dice que todo ser humano tiene propósitos en la vida, pero hay personas que van por caminos sin rumbo y sin destino, y que sus pensamientos no son lo suficientemente claros como para indicarles las rutas que deben seguir, hacia el logro de objetivos y metas.

Tal vez es parte de los altos y bajos de la vida, los cuales muchas veces no podemos cambiar, lo que sí podemos hacer, es ver las cosas desde otra perspectiva, y cambiar lo que sentimos para permitir renovar las ideas, y aflorar sentimientos y pensamientos consensuados que nos aclaren el panorama e iluminen las rutas por donde debemos seguir.

Hay algo que debemos manejar con cautela, y es lo que se nos vende no solo en medios de comunicación, sino también, en los diferentes contextos en los que nos desenvolvemos.

Debemos tener claro en la vida que como seres humanos, tenemos ciertas limitaciones para unas cosas, así como, muy buenas habilidades para otras, pero no tenemos la capacidad para entender y hacer todo, en oportunidades hay que aceptar que simplemente no podemos hacer algo y punto, precisamente, el aceptar nos da el valor para ver las cosas con claridad y mantener una posición de aceptación ante lo que no está a nuestro alcance.

En muchas ocasiones nos dicen que en la vida solo hay que pedir las cosas y estas se darán, pues eso no es tan real, hay cosas que se quieren pero no se pueden, solo hay que conocer nuestros límites y saber hasta dónde soy capaz.

Como dice un sicólogo mexicano, hay que conocer la diferencia entre pasión y talento, la primera es muy emocional, y la segunda tiene que ver con tus capacidades.

Por ejemplo, la persona que quiere ser cantante de ópera pero sus registros vocales no son suficientes para ejecutar una pieza musical de este género, lo que le queda es comprarse unos CD y escucharlos, pues no llegará a ejecutarlos como debe ser.

Es cuestión de aceptar y no caer en la frustración, seguro habrá muchas otras cosas que si podrá realizar de muy buen manera.

Muchas veces de tanto insistirnos en que si lo pides se te dará, o solo tienes que desearlo y listo, la persona termina frustrada y enojada, porque las cosas no se dan como lo pide, y esto hace que aparezcan las culpas, la vida no me quiere, Dios no existe, nadie me estima, entre otras que no tienen nada que ver con la realidad.

La verdadera realidad es que estás vivo, y si te dicen que algún día vas a morir, pues es cierto, pero entre esos lapsos de tiempo desconocidos, lo mejor que puedes hacer es disfrutar viviendo cada momento y cada experiencia que le ponen un sabor único a tu existencia.

Vivir no es solo la familia y el trabajo, también lo es correr, gritar, saltar, tener una buena conversación, cantar sin importar como suene, compartir con los amigos es una medicina mágica, saber decir la verdad así duela, como decir no también es sano.

Existen infinidad de elementos que nos pueden causar placer y nos hacen sentir que estamos vivos, y somos nosotros los que podemos hacer un uso adecuado de ellos para tranquilidad, paz y sosiego en nuestra vida.

En la dinámica actual es muy fácil vernos afectados por todo lo que sucede a nuestro alrededor. Las situaciones personales como la ruptura sentimental, la falta de una fuente de ingreso, la complejidad social, entre otras, conspiran en nuestra contra y muchas veces nos hacen caer en depresiones, desgano, falta de iniciativa, que a la larga terminan afectándonos emocionalmente, alterando nuestra conducta y lo peor de todo, desmejorando nuestra salud física y mental.

En ocasiones las cosas no pasan como las queremos, y lo más fácil que se nos ocurre, es culpar al entorno de todo lo que a nuestro alrededor sucede. No nos damos cuenta que de la manera como interpretamos todo esto, de una u otra forma condiciona nuestras emociones, e incide en nuestra forma de pensar y en la forma de comportarnos.

No todo en la vida tiene que ser como queremos, simplemente debemos adaptarnos a la dinámica de un mundo en constante interacción, que nos conduce por caminos que muchas veces no son los que buscamos, pero que aplicando la inteligencia con la que estamos dotados, nos harán llegar a los destinos que queremos y que nos harán sentir que vamos directo a lograr nuestras metas de vida.

Siempre encontraremos situaciones que debemos manejar con ambas manos, y no podemos permitir que estas se nos escapen causando decepción y angustia, que a la larga solo nos llevarán a sentir decepciones y momentos incómodos, desembocando en pérdida de tiempo y momentos de felicidad.

Una buena recomendación, es la importancia que tiene el establecer una muy buena relación con uno mismo. Esto genera un importante nivel de autoestima y seguridad, permitiendo que nuestras decisiones estén claramente conectadas con nuestros pensamientos y acciones.

Si hay algo que nos ayudará a estar siempre en modo positivo, es pensar de la misma forma y ver en cada día, la oportunidad de hacer grandes cosas.

Ser agradable, sincero, amigable, responsable, sensible, honesto, cortes, humano, y estar conectado con el ser y el hacer, y así, manejar las relaciones de buena manera, generando armonía y equilibrio en cada contexto en el que nos desenvolvamos.

A pesar que la vida no es de color rosa, y que no debemos pensar siempre en ser súper positivos y optimistas al extremo, pues podemos sufrir caídas que nos hagan caer en tristeza y decepción, es muy cierto también, que tampoco la vida es oscura y negra, pues esta tiene su arcoíris hermoso que nos baña con sus colores, alumbrando nuestros caminos y permitiendo que veamos con claridad, sus bondades y su lado bonito y maravilloso.

Lo que sí es cierto en todo esto, es que estamos en este mundo, que cada día al abrir los ojos en la mañana es una nueva oportunidad para hacer todo lo bueno que existe en el mundo, que ya hay suficiente gente mala, que no tienes que ser uno de ellos, que con acciones pequeñas puedes llegar a ser la diferencia, que tu actitud ante la vida marcará tus caminos, que saber quién eres realmente te dará una ventaja, que ser de los buenos no es malo, que puedes ser tú sin dejarte influenciar de nadie, que tienes capacidad para tomar decisiones propias, que solo podrás llegar pero si te haces acompañar por la o las personas correctas, llegarás más rápido y más lejos, que eres bueno sin importar de dónde vienes, que eres un ganador, que lograrás todo lo que te propongas porque esa es tu decisión.

Y lo más importante de todo, es que estás seguro que lo que piensas y lo que quieres, siempre lo lograrás porque caminas de la mano de Dios y te acompañan tus valores y principios.

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