Hablemos hoy de: Caminos de espinas
Es una decisión absolutamente personal, el tipo de caminos que recorreremos en la evolución de nuestra vida.
Porque en un momento de nuestro existir cada uno de nosotros tenemos la oportunidad de seleccionar los caminos que habremos de recorrer. Todos sin excepción podemos escoger por donde enrutar cada paso que demos y hacia qué destinos queremos llegar.
Es cierto que tal vez en algún momento perdamos la brújula, pero también es real que estamos dotados de las herramientas necesarias que nos harán encontrar la huella que en su momento, dejamos marcada en el camino que traíamos.
Porque la vida es hermosa, pero también puede estar llena de obstáculos, de pasos difíciles, de sufrimientos, dificultades, peligros, de muros y paredes que se atraviesan, y de vidrios rotos y espinas que pueden llegar a dificultar nuestro avance en el proceso de evolución.
En la vida todos llevamos espinas encima, y lo peor es que en muchos casos estas espinas son objeto de la actitud poco consciente y justa de las personas. Pueden incluso llegar a ser auto adheridas, o provocadas por otros que aprovechan los momentos de debilidad de las personas, para infligir daños y quebrantar su voluntad.
Incluso algunas de estas heridas o espinas pueden permanecer a nuestro lado por largos o cortos períodos, todo dependerá de las actitudes que se asuman y de la decisión personal del tiempo que se esté dispuesto a soportar las molestias y el dolor que estas causan.
Las espinas suelen ser diversas, las hay de odio, ansiedad, depresión, frustración, rabia, por pérdidas, separaciones, envidia, vicios, y otras. Y lo peor de todo esto, es que la acumulación de ellas termina afectando nuestra salud produciendo enfermedades que se pueden llegar a convertir en fatales.
No olvidemos nunca que las espinas son simplemente eso, espinas que solo causarán molestias, tristeza, dolor y muchas cosas más que afectarán de manera negativa nuestra vida. Claro, si lo permitimos. Además, nunca podrán estar por encima de la fuerza del amor de nuestro Padre creador, quien conoce nuestras luchas y necesidades, y también nuestras fortalezas.
También es importante tener en cuenta que no debemos ir por la vida sembrando en otros ni regando por los caminos, las espinas que hemos logrado quitarnos, pues conociendo la gran verdad que el mundo es redondo, no sabemos si cuando estemos de regreso, podamos tal vez venir sin zapatos.
Así que hay momentos en los que no debemos permitir que la ira, las frustraciones, el dolor o el orgullo se apoderen de nosotros, y permitamos que nuestras actitudes, arrogancia y palabras, puedan herir y causar daño a otros que tal vez solo nos profieran sus mejores deseos.
Nunca olvidemos que lo que des puede retornar igual o de mejor manera, lo que sembremos nos puede dar los mejores frutos en el futuro, pero tal vez lo que pudimos haber afectado solo hará que tengamos tropiezos y caídas que no nos permitirán levantarnos con facilidad.
Todo esto es motivo de una profunda reflexión, si hacemos las cosas bien, si practicamos los valores más elementales del ser humano, si sonreímos a la vida, si somos capaces de abrazar, si nos vestimos con nuestra mejor energía, si nos alejamos de las tormentas, si damos gracias por todo lo que el universo nos concede, y si damos amor, estoy seguro que cuando tengamos que regresar, lo podremos hacer descalzo, porque no encontraremos espinas en los caminos.
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