En absoluto: Todos un cumbe
Bajo el lema “No, no éramos esclavos, fuimos esclavizados”, comienzo este articulo con planteamientos desde el punto de vista del plan de desarrollo de los pueblos afros que estaremos abordando en el marco del congreso bicentenario de los pueblos, que se desarrolla en Venezuela.
Un espacio para el reencuentro, el debate y la unidad de todas y todos para avanzar profundizando la revolución.
El tema afro o de cimarronería es interesante, a pocos les gusta debatirlo, aunque les guste un negro, porque pasa por reconocer la diversidad, por entender, que todos somos iguales pero que aquel, es catire, el otro pelirrojo y nosotros negros de color, pero con la claridad que nuestros orígenes, se remontan a la madre África.
Fue Hugo Chávez quien se enfocó en el tema de la diversidad de los pueblos, fue él quien entendió que debía darle un parado a la discriminación, al racismo y al más importante de todos los problemas; el Endoracismo o lo que es igual, la exclusión propia o de los suyos, debido a la raza o al color de piel.
El comandante Chávez entendió y asumió esta lucha negroide, afro o de cimarrones básicamente porque representamos el 54 % de la población nacional, pendejaita pué’!! No es poca cosa y he ahí, el porqué, quienes reconocemos que la madre patria es África y que el golpe del tambor es una expresión de rebeldía que nos acompaña siempre, asumimos la importancia de volver a los cumbes.
Mientras escribía este artículo, recordaba a Chávez atendiendo la afrodescendencia de Brooklyn, del Bronx, de Haití, Trinidad y de Jamaica, planteando el modelo humanista, de igualdad social y de reconocimiento a la diversidad, lo que indubitablemente genero el ataque del departamento de estado, para frenar al comandante y que no pasara por encima del modelo depredador de ellos.
Prefirieron, considerarlo una amenaza inusual y extraordinaria, bloquear y sancionar al país económicamente y meternos en este vaporón que padecemos.
Los cumbe fueron Poblaciones formadas por esclavizados negros fugitivos en la que vivían como hombres libres, recreando los modos de vida propios de África, al punto que esa liberación era también una forma de volver a su tierra y en ese marco, enfocamos nuestra lucha.
Es por ello, que hoy reconocemos las luchas de Guillermo Rivas hace más de 200 años en el cumbe de Barlovento, los cimarrones del cumbe de Aripao en Bolívar y por supuesto a Olimpiades Pía Pulgar en Bobures.
Ahora bien, nos toca ponernos de acuerdo entre cimarronas y cimarrones para coadyuvar la revolución de Hugo Chávez que dirige Nicolás Maduro, sobre todo seguir sembrando en este congreso de los pueblos, la lucha contra exclusión, la discriminación y la consolidación del cumbe en toda la patria, retomando la lucha por la propiedad colectiva de las tierras ancestrales, mayor acceso a la política y hasta la revisión del preámbulo de nuestra constitución, donde pesa, mora con la afrovenezolanidad. Es hora de reconocer la diversidad y el cumbe.
A LO INTERNO: Sin Negro no hay………
@HoracioAlarcon
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