En absoluto: Falta poco

Los tiempos están marcados, nada dura para siempre y todo tiene su final dice la canción de Lavoe. ExxonMobil se fue de la denominada zona en reclamación, dejando al gobierno de Guyana y las pretensiones del departamento de estado, con las ganas de generar un conflicto sin necesidad.

Pretendían establecer una base militar en aguas internacionales colindantes con el Orinoco, amenazando y mostrando dientes, como si nosotros les temiéramos.

Vale la pena recordar la respuesta que le diera Bolívar a Jhon Batist Irvine un 7 de octubre de 1818: “Parece que el intento de usted es forzarme a que alterne los insultos: No lo haré; pero si protesto a usted, que no permitiré se ultraje ni desprecie al gobierno y los derechos de Venezuela. Defendiéndolos contra la España ha desaparecido una gran parte de nuestra populación y el resto que queda ansía por merecer igual suerte. Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero, si todo el mundo la ofende”.

La respuesta de Bolívar a Irvine, las parafraseo 200 años después, Nicolás Maduro a Irfan Ali ante la osadía de este, en arrodillarse con Estados Unidos y Gran Bretaña para quedarse con el territorio que por derecho nos corresponde.

Aunque esas mismas palabras las ha parafraseado Nicolás a los presidentes de Estados Unidos, de la UE y a los lacayos del continente que se prestan para las permanentes groserías contra Venezuela. Pretenden colocar su bota insolente contra el pueblo, mancillar nuestra dignidad, seguir aupando la precariedad económica inducida y que sigamos padeciendo los embates de bloqueos y sanciones exigidos por quienes hoy aspiran ser presidentes.

Ahora bien, no pretendo ser recalcitrante, pero es hora de entender que el enemigo está en la acera del frente, que quienes hacen uso de la fulana autocrítica, es solo con la intención de aprovechar la herramienta que tanto le gusta al sociólogo Rubén Pinto, para la vendetta y cuando la improvisan, no imaginan el daño que hacen.

Polemicemos con la oposición, es el verdadero adversario.

Otra cosa es la crítica, es diferente y en revolución, no estamos cerrados a la crítica con fundamento, con pruebas y con propuestas.

Nicolás ha sido el mayor crítico de nuestra gestión, pero con fundamento. Es el más interesado en corregir. Está entregando su vida por la patria.

Vamos a un proceso electoral en el 2024, debemos garantizar el triunfo de Nicolás y nuestro Psuv es garante de ello, aunque en esta nueva época, urge la nueva mayoría que ponga de manifiesto la pasión por el proyecto de Hugo Chávez.

Yo sé que no ha sido fácil, el plan fue montado para el malestar colectivo y la decepción, pero debemos seguir avanzando.

Por encima de las adversidades, nada ni nadie nos quitará del camino correcto de la historia que es profundizar la revolución del comandante. Falta poco. No sé para qué, ni siquiera entiendo el titulo pero ajá. Falta poco.

A LO INTERNO; Vamos Chicuaco Maluco.

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