A propósito de ser ciego: El madurismo quedó desnudo y derrotado, sólo con el apoyo de los colectivos armados

Si algo quedó en evidencia con los hechos de los días 22 y 23 de febrero es que el madurismo está tan solo, que ni siquiera aparecieron los diplomáticos de Rusia y China para acompañarlo en los espacios fronterizos o desde las tribunas mediáticas del país con el propósito de condenar las supuestas fuerzas invasoras que venían a apoderarse de las riquezas de Venezuela. En efecto, no sólo es que el madurismo apeló a todo su talante autoritario y dictatorial para incomunicar y sabotear las acciones de la ayuda humanitaria, que a pesar de decir que cuentan con más del 70% de apoyo popular, tuvo que suspender de manera indefinida por señal satelital y de cable, todos los canales que transmitían el concierto Venezuela Aid Live, entre los cuales se encontraba National Geographic, sino que restringió los portales informativos, al punto de tener que bloquear el navegador de Google incluyendo a You Tube buscando desesperadamente que el pueblo no tuviera acceso a la información veraz y oportuna, hecho que se originó en la tarde de ese 22 de febrero, y que por supuesto se extendió todo el siguiente día.

Y nos preguntamos ¿Sí es verdad lo que dicen los maduristas que ellos tienen más de ese 70% de apoyo popular, para qué suspender tales canales, sí además son un gobierno “democrático”? Igualmente, sí como afirman ellos que ese concierto organizado por la oposición fue un fracaso, en donde incluso llamaron artistas “insustanciales” a cantantes como Reynaldo Armas – ¿qué dirá Cristóbal Jiménez? – ¿cómo es eso de que el otro evento musical que había planificado el madurismo fue suspendido intempestivamente, sí éste iba a estar abarrotado de “pueblo”? Algo extraño, primero, suspender canales evitando que la población pudiera ver el fracaso de un concierto organizado por fuerzas imperialistas, y segundo, suspender el otro concierto que sería un “éxito rotundo”. La verdad es que los maduristas no se cansan de justificar sus propias torpezas. En la misma medida, puede llamarse un “triunfo” y decir que tenemos un país en “paz”, cuando el madurismo tiene que cerrar todas sus fronteras para evitar que entraran alimentos y medicinas para el país, y peor aún, terminar con un saldo de dos indígenas pemones asesinados y más de una decena de heridos en el sur del estado Bolívar¹, sin obviar que ese grupo indígena asegura tener retenidos más de 35 efectivos militares, entre ellos el comandante general de esa zona, así como el control de aeropuerto de Santa Elena de Uairén.

Más preocupante, ¿Por qué ninguna “autoridad” madurista se pronuncia ante la grave denuncia que una jefa pemón realizó sobre la liberación de peligrosos delincuentes de la cárcel de “El Dorado” con la orden de masacrar al pueblo que apoye el ingreso de ayuda humanitaria? ¿Cómo llamar “triunfo” y “paz”, incluso llegando al extremo de decir que están “felices”, cuando el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, asegura que hubo no menos de 285 heridos? ¿Eso es “paz”? ¿Eso es un triunfo? Lo insólito es que sólo este 23 de febrero las autoridades colombianas confirmaron que más de 60 militares abandonaron seguir las órdenes del neototalitarismo madurista, y éstos ahora son llamados “infiltrados y terroristas” por boca de individuos como Freddy Bernal que sin ser autoridad militar, surgía como vocero de la Fuerza Armada, algo que evidentemente demuestra el nivel paramilitar del régimen que usurpa el poder en Venezuela. Si lo anterior fuera poco, Nicolás Maduro llega al paroxismo de que ante la imposibilidad de detener el ingreso de la ayuda humanitaria que reclama la población, prefirió enviar a sus colectivos armados para que quemaran los camiones que iban cargados de alimentos y medicinas contra civiles que estaban desarmados. De hecho, no se vieron imágenes en la frontera del pueblo que supuestamente apoya al madurismo protestando por la entrada de la ayuda humanitaria, sino por el contrario, se vieron episodios de personas reclamando a los efectivos militares que dejaran entrar las donaciones internacionales para los venezolanos, pero finalmente, los colectivos armados desplegaron todo el terror en las ciudades fronterizas de San Antonio y Ureña cuando con máxima impunidad disparaban al aire y contra ciudadanos indefensos para asaltarlos, herirlos y hasta asesinarlos, dejando un saldo de dos fallecidos y 15 heridos sólo en el Táchira. El madurismo ha quedado tan solo que el ver a los colectivos armados por las calles fronterizas, disparando y generando el terror contra la población sin que ninguna autoridad estuviera impidiendo esa barbarie, que eso demuestra ser el único apoyo que les queda.

Verbigracia, al madurismo únicamente lo apoyan los criminales y asesinos, o lo que es lo mismo ha quedado solo, desnudo y derrotado. Si eso es una manera de “lograr la paz y el triunfo” teniendo a los colectivos armados como el único grupo claro y visible que les acompaña, la única verdad es que aunque disfracen el verbo y la semántica, la derrota del madurismo está anunciada. No podrán evitar lo inevitable. La caída del régimen es inminente. No podrán seguir resistiendo por mucho tiempo la inmensa presión internacional y del pueblo de Venezuela. A propósito de ser ciego. Quien tenga ojos que vea.

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