El Arte de Ser Familia, Parejas Lat: Juntos pero no revueltos

Conforme los tiempos han cambiado, la forma de relacionarse y la convivencia marital indiscutiblemente también han sufrido cambios, una muestra de ello son la relaciones de parejas LAT (living apart together) lo que se traduce como “viviendo separados pero juntos”.

Este tipo de relación conjuga una nueva forma de mantener sintonía sentimental sin la convivencia marital. Toda una novedad que por supuesto, desmonta los patrones y esquemas preconcebidos en torno a la pareja.

Las Parejas LAT son modelos de relación estable, con compromiso que han decidido de común acuerdo no vivir en el mismo domicilio.

Indudablemente que este estilo de ser pareja rompe con los esquemas tradicionales de la convivencia marital. El estilo LAT es un modelo ideal para quienes quieren conservar algunas características de la pareja como la fidelidad y la exclusividad, pero sin convivir bajo el mismo techo. La fórmula de pareja LAT busca evitar el desgaste que pudiera generar la convivencia. Es una decisión personal, en la que ambos miembros de la pareja deben coincidir. Por supuesto, este no es un tipo de relación para todo el mundo.

Una relación de pareja LAT puede establecerse a cualquier edad adulta, aunque su predominancia de estabilidad es más factible a partir de los 40 años. Edad en la que por lo general las personas ya han tenido previamente experiencias maritales, y aunque se brindan la oportunidad de un nuevo amor, no desean transitar por los avatares de la convivencia. Por ello se permiten tener pareja, disfrutar la intimidad pero preservando su autonomía.

Una particular característica es que, no está pensada para quienes desean tener hijos en común. Con frecuencia en las parejas LAT uno o ambos miembros, tienen hijos y no quieren proporcionar complejidad al sistema en el que conviven habitualmente. Pueden existir otras razones sean de tipo económico, social, laboral, personal entre otras que den paso a una relación de este estilo, lo relevante es que pueden llegar a considerarse compañeros de vida significativos aun cuando no vivan juntos el día a día; por ello su aspecto más resaltante es que debe ser un acuerdo conjunto para que la relación tenga éxito, aunado a ello está el compromiso mutuo de proveer seguridad y confianza a la pareja.

Para consolidar este tipo de relación se requiere cierto nivel de madurez psicológica y emocional. Si hay algo verdaderamente cierto es que la convivencia en el día a día es demandante, por las divergencias que pueden surgir en la dinámica, las estructuras de personalidad, etc. En este sentido podría decir que las personas con una estructura de carácter dominante, de personalidad controladora, narcisista o dependiente no califican para sostener este tipo de relaciones.

Evaluando sus ventajas podría decirse que las relaciones LAT son una vía para conservar la autonomía, la privacidad, además que ahorra el desgaste de la convivencia. Su ventaja más significativa es la libertad emocional individual; son relaciones fuera de la monotonía, donde se brinda la oportunidad de aumentar la pasión.

Un aspecto relevante que no puede pasarse por alto es que las personas que constituyen una relación LAT son sometidas a presión social por parte de amigos y familiares quienes demanda el esquema tradicional de ser pareja, por lo que tendrán que sortear las fortalezas de la decisión de conformar una relación de este tipo. Entre sus limitaciones están la baja frecuencia de contacto físico, el afecto y presencia.

Cabe aclarar que ser una pareja LAT no es sostener una relación abierta, porque en ellas predomina el compromiso hacia el otro y la exclusividad, aunque no haya convivencia. Si nos paseamos por el lado pintoresco los miembros de estas relaciones no tiene que lidiar con los ronquidos del otro, con el uso del baño, la pasta dental, etc. En definitiva estamos en presencia de nuevos panoramas de crecimiento y evolución donde la manera en que interactuamos y relacionamos de alguna forma está siendo impactada y transformada, de esta manera surgen estos nuevos modelos que buscan adecuar las necesidades de las personas, donde lo que en una época era prioridad para formar familia, hoy quizás ya no lo sea.

Definitivamente las relaciones LAT son una manera de dejar por sentado que las personas no son propiedades y que cada quien tiene el derecho de elegir y decidir cómo quiere vivir y relacionarse libremente.

Lcda. Irma Vecchionacce
Psicóloga
Terapeuta Sistémico familiar
Coach Profesional
Especialista PNL
@irma.vecchionacce

Ten la información al instante en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente link:https://chat.whatsapp.com/Ek2ap8h1tvgDWxnz8BrYbO

También estamos en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí https://t.me/diarioprimicia