Demuestren que quieren…
Reza un dicho que alguien que ve que maltratan, pisotean y tratan sin ningún motivo de exterminar a alguien de su propia sangre ante sus ojos y es incapaz de pedir aunque sea un auxilio en favor de esa sangre, sin dudas algunas esa sangre no le importa aunque cínicamente pregone que la quieren.
Este dicho lo traigo a colación por lo siguiente: El juez Leonard Stark, de la Corte Federal en Delaware, en conchupancia con el inescrupuloso exPresidente de los E.E.U.U Donald Trump y con el vil consentimiento del Presidente Interino de Venezuela y su pandilla de anormales Juan Guaidó, aprobó la venta de los activos de CITGO, propiedad de PDVSA en los E.E.U.U, acción considerada uno de los esperpentos jurídicos más sucio y criminal conocido en el mundo.
Dicha sentencia como un día la escribió Sandoval, pretende ejecutar un laudo dictado por el Tribunal Arbitral del Centro Internacional de Arreglos de Diferencias relativas Inversiones (CIADI), a partir de la reclamación realizada por la Empresa Canadiense Cristallex en contra de Venezuela, para cobrar la supuesta deuda por 1.200 millones de dólares, que en el 2.008 contrajo el País al expropiar la mina las cristinas por dañar el medio ambiente y violar los derechos de los trabajadores, aun cuando ni PDVSA, CITGO NI PDV Holding. INC, son deudores de Cristallex, ni fueron sujetos del procedimiento ante el Tribunal Arbitral del (CIADI).
La falsedad de Cristallex radica que en vez de demandar a la República Bolivariana de Venezuela, esta emplea la mentira que Venezuela y PDVSA son el mismo ente.
Por consiguiente, la República controla las acciones de PDVSA, y como PDVSA es propietaria en los E.E.U.U de PDV Holding, la cual es dueña CITGO, entonces le pidieron al juez autorizar la venta de los activos de CITGO para cobrarse la deuda, que no es de CITGO si no de la República Bolivariana de Venezuela, dos personas jurídicas diferentes.
Esta equivocación según los juristas, es muy difícil que se concretice, porque el Juez debe derrumbar el embarazoso Manto Corporativo, base del Sistema Mercantil Capitalista Universal Contemporáneo, un reverenciado en la Jurisprudencia Comercial Estadounidense, que en parte a malogrado las tentativas de apropiarse definitivamente de CITGO, porque el Manto Corporativo es un instrumento para proteger el Núcleo Societario de una empresa que solo es posible levantar cuando la firma atenta contra el principio de buena fe y esto jamás ha sucedido. Etc. Etc.
En síntesis, hay tantas perversidades que hay contar del Presidente interino y pandilla que no alcanza el papel para contarlas, pero todo este fraude judicial sobre la aprobación ilícita de CITGO, fue fraguado por Juan Guaidó y ejecutado por quien fuera abogado de Cristallex y actual procurador del gobierno interino de Juan Guaidó José Ignacio Hernández.
La pregunta es ¿Dónde están esos 30 millones de venezolanos que están viendo como criminalmente maltratan, pisotean y exterminan a nuestro patrimonio PDVSA ante sus ojos y son incapaces de pedir un auxilio en favor de nuestra Estatal y en favor de nuestra Soberanía Nacional que es nuestra sangre? Entonces no pregonen que son patriotas y que quieren a Venezuela. Si así fuera, demuéstrenlo en la calle día y noche protestando esa estafa judicial que le aplicaron a CITGO, a PDVSA y al pueblo venezolano.
Hasta el próximo…
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