Cuenta la Leyenda: Luis Felipe Llovera Páez
Militar y Político venezolano, integrante del Gabinete Ejecutivo durante la presidencia del General Marcos Evangelista Pérez Jiménez, de 1948 a 1958, impulsor del desarrollo y transformación de Guayana como Centro Hidroeléctrico y de la Industria Siderúrgica Nacional.
Hombre de trato amable, muy cordial y buena educación, fue muy apreciado por las altas esferas sociales de la sociedad caraqueña, reconociéndose inclusive como excelente gourmet.
Nació el día 14 de abril del año 1913 en la capital del Estado Bolívar, Luis Felipe Llovera Solano y María Magdalena Páez Arjona fueron sus progenitores; quedó huérfano a temprana edad y fue criado por su hermano mayor Rafael Llovera Páez.
Sus primeros estudios los realizó en el Liceo Guayana, en el Colegio Federal de Carúpano y en Caracas. Egresó de la Escuela Militar y Naval, antes de existir la Academia Militar de Venezuela, en la promoción del año 1932, siendo meritorio por ser el número 1, ostentando el rango de Alférez Mayor.
En el año 1933, ya era comandante del Batallón Boyacá número 14 en Maracay, comandante de los batallones, Anzoátegui en Güiria y en Maturín; Carabobo en Caracas y Venezuela en Maracay.
Ascendió al grado de teniente en el año 1940, con la misma le designaron el comando de los Batallones Rivas Dávila y Bárbula en el Estado Táchira.
Realizó cursos sobre Armamentos de Infantería y su empleo técnico en Fort Bennig, Georgia Estados Unidos, posteriormente cuando es Oficial de la Sección de Información del E. M. G viaja a la Republica del Perú, realiza cursos de Infantería y E. M. de Chorrillos en el año 1943.
En el año 1945, fue ascendido al grado de Capitán, su capacidad intelectual lo lleva a hacer una carrera militar y política muy extensa, en el año 1948-1952, ocupó la cartera del Ministerio de Relaciones Interiores, ya con el grado de Coronel, fue nombrado Director de la Oficina de Estudios Especiales de la Presidencia de la Republica (OEEPR) lo cual lo llevó a desarrollar un papel muy importante en lo que respecta al planteamiento y ejecución de la Industria Siderúrgica Nacional en Guayana, además el proyecto relacionado con la construcción de la Central Hidroeléctrica de Macagua I.
El día 9 de febrero del año 1952, el General, Ingeniero, miembro de la Junta de Gobierno, y Ministro de Relaciones Interiores, Luis Felipe Llovera Páez, acompañado del tren ministerial y el descubridor del Cerro Bolívar (Cerro La Parida) el geólogo norteamericano Clayton Mc. Lake, realizaron el acto de la colocación de las primeras piedras de dos nuevas ciudades que conforman el eje de central de la futura industria del hierro y el acero en el país: Puerto Ordaz y Ciudad Piar.
Luego Luis Felipe pasó a ser ministro encargado de Comunicaciones, desde 1956 al 10 de enero de 1958. General de División (1957.) Desde el 11 de enero hasta el 23 del mismo mes, fue nombrado nuevamente Ministro de Relaciones Interiores.
A raíz de los sucesos acaecidos el día 23-01-1958, se exilió en los Estados Unidos, Suiza, Uruguay, y finalmente en Argentina, donde se dedicó a Inversiones de Bienes y Raíces, regresó a Venezuela en septiembre del año 1969, se dedica fundar el partido político que se llamó F.N.I. Frente Nacional Integracionista, el cual no tuvo tanta relevancia.
El general Luis Felipe Llovera Páez, tuvo la satisfacción de recibir en vida, una gran cantidad de condecoraciones y reconocimientos, tanto aquí en su país, como de los países vecinos y de otros países, como EE.UU, de los países europeos y muchos más.
Siempre se hizo acompañar de su señora esposa, llamada Ligia Josefina Maldonado Medina, finalmente, vivió el resto de su vida en la ciudad de Caracas y Playa Grande en el litoral guaireño; falleciendo el día 10 de septiembre del año 1977, siendo su cadáver velado y sepultado en Caracas.
Han transcurrido 68 años del acto de la fundación de Puerto Ordaz, el cual fue realizado en el lugar conocido como Centro Cívico, (lugar donde oficialmente nace la ciudad); dicha plaza nunca ha tenido nombre, por lo cual, sugiero a las autoridades competentes tomar en cuenta lo que indica claramente la historia y darle nombre y apellido a este lugar y en acto público donde participe la ciudadanía de los cuales aun quedan testigos vivos que presenciaron el día 9 de febrero del año 1952, colocar un busto del General Luis Felipe Llovera Páez, declararlo un sitio histórico, limpiarlo, sanearlo, mantenerlo en orden y eliminar esa cantidad de oficinas y quioscos de buhoneros que se encuentran apostados alrededor que no colaboran en nada con la belleza y el ornamento.
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