Cuenta La Leyenda

¡Que carnavales aquellos!

Agradeciendo el consejo de mi amigo Carlos Galarreta, debo comenzar recordando que las fiestas del Rey Momo, en nuestro país siempre fueron celebradas los días lunes y martes, del mes de febrero a lo cual se le agregaba los dos días anteriores sábado y domingo y posteriormente no muy distante a alguien se le ocurrió anexar la octavita de carnaval, lo cierto es que son las fiestas más locas que se puedan celebrar, la historia dice que los primeros carnavales celebrados en la vida se originaron en Venecia/Italia. Muchas personas lo han relacionado con la Isla de Trinidad, otros piensan que son brasileros y hasta pasan a creer que son del Uruguay, pero vamos al grano, nuestro país, Venezuela no puede escapar a estas festividades comenzando por la capital, cuando en los años cincuenta salían carrozas por las calles de Caracas, la mayoría de ellas representación de los ministerios del gobierno de turno, bellas jóvenes con disfraces muy elegantes y lanzando caramelos y papelillos al público apostado en las aceras y plazas, en los clubes se desarrollaban grandiosos bailes amenizados por las orquestas del momento: la Orq. De Luis Minaya, la de Luis Alfonso Larrain, Aldemaro Romero con la Sans Soucy alternando con Chucho Sanoja con Chico Salas al frente y la infaltable Billo´s Caracas Boys, con “El Ciclón Antillano” “El Gato” Víctor Pérez y “El Ruiseñor de la Radio” Rafa Galindo, por cierto que a Billo no le tembló el pulso para escribir una guaracha referente a los carnavales donde advertía las posibles consecuencias desagradables con los disfraces, entre los más notorios los de “negrita” <<>> unos tipos con costumbres extrañas, esposas celosas y otras que no eran celosas, sino de muy fácil acceso aprovechaban las oportunidades y se propiciaron momentos desagradables incluyendo divorcios; los disfraces más comunes eran de Odaliscas, Príncipes, de Reinitas, de Vaqueros, Supermán, Los Tres Mosqueteros, de Mexicano, de bebes, no faltando los que se disfrazaban de mujer o de mamarracho, los centro de bailes más concurridos en Caracas eran el Casablanca, El Centro Asturiano, Club Las Fuentes, Hotel Tamanaco y el Hotel Ávila donde su slogan era “en el Ávila es la Cosa” pero ojo, no solamente en Caracas, también en Maracaibo, en la Guaira donde se presentaban orquestas del caribe, Tito Rodríguez, Tito Puente, Ismael Rivera, Celia Cruz y la Sonora Matancera, La orquesta Aragón, Xavier Cugat etc, ya para años posteriores comienzo de los 60, en nuestra ciudad Puerto Ordaz y San Félix, lugares donde siempre ha existido una gran influencia del Calipso se propician las fiestas del rey Momo, el primer febrero que me toca vivir aquí, salgo a la calle y me sorprendo al ver aquellas bandas de calipso originales, con sus instrumentos, panas de acero (pipotes) con su sonido característico tambores de frenos de vehículos y un sinfín de instrumentos casi todos de fabricación casera, comparsas muy coloridas y ordenadas, a todo esto se une la tierra del Calipso El Callao y personajes emblemáticos, la Negra Isidora, Lulú Basanta, Mercedes Cova, Juancito Arbelaez, Richard Bolívar, Luis Cova, Bailmú Shinh, Hema de Shinh, Alí Padmore, Jasildo y su Golden Lion, Mario y sus Diamantes, Vick Cortés, The Others, Steel Band Femenino, Las Estrellas de Fuego, en las urbanizaciones comienzan a organizar templetes, en la UV2 y su reina Nadilia I, en Manoa, en Los Olivos con el Olibonche, en la Urb. Mendoza con la Cachamaiteca, en Villa Brasil, Villa Colombia, las reinas: Saddy Alzurú, Arcelia Ordaz, Dalia Hernández, Meredith Moya, Thais Parra, Oly , en una de estas ocasiones una Reina de belleza a nivel nacional, nos visitó, le fue colocado un traje de la comparsa de Villa Brasil y desfiló, causando mucho furor y asombro por la belleza y sencillez que irradiaba, fue ella Marilyn Plessman fuerte candidata por el estado Guárico. En las emisoras estaban Radio Caroní, con Gabriel Aguilera Ordaz, Radio Puerto Ordaz, con Ángel de Jesús Coa y Radio Canaima, con J. L. Pastrano. Las empresas se suman y cada una patrocinaba una carroza, en esa época el presidente de Sidor era Edgar Marshall (muy entusiasta con las fiestas carnavalescas) y el diseñador del Dpto. de Prensa el recordado Toni Jerez, con gran habilidad decoraba la carroza y los trajes a usar en la comparsa, los clubes: El Náutico, El Caronoco, El Arichuna, nos visitaban turistas de todos los rincones del país, después de realizar un recorrido por las avenidas principales, el punto de culminación y encuentro era en el estacionamiento del Hotel Rasil. Debo recordar que en las horas diurnas en los estacionamientos de las urbanizaciones no faltaba el baño con agua y uno que otro menjurje de onoto con grasa del sartén o tizne de los utensilios de cocina y los más chicos bañados de pies a cabeza con grasa negra, quienes decían “medio o pinto” queriendo decir me das medio 0,25 de bolívar o te pinto, muchas personas llegaron a confundir y aun los llaman los medios pinto a creencia de que es por color negro que llevan en la piel. El tiempo ha pasado y ya solo queda el recuerdo, no es fácil (económicamente) organizar un carnaval, fiesta del pueblo que tampoco (por la inseguridad) se puede realizar, antes de terminar quiero recordar que en Carúpano, Puerto La Cruz y El Tigre, también se realizaron excelentes fiestas carnestolendas. Ojalá podamos recuperarlas.

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