Bitácora industrial

El Covid 19 destroza empresas
Esta pandemia literalmente está destruyendo la economía mundial, hasta el punto que algunos economistas están afirmando que serán necesarios por lo menos 5 años para que vuelva a comenzar a parecerse a lo que había antes de la irrupción del virus chino. Y aunque el Covid 19 surgió en ese país, paradójicamente la economía China es la que menos ha sufrido directamente por la pandemia, aunque lo que sí la va a afectar, y mucho, es la intención de decenas de empresas extranjeras de mudarse a sus respectivos países de origen, principalmente las de Japón. La primera víctima de la pandemia fue el turismo, que en muchos países representa más del 10 por ciento de su PIB y cientos de miles o millones de empleos, como el caso de Francia, España, Italia y Grecia. Con el turismo, caen las líneas aéreas, que muchos gobiernos van a tener que asumir a precio cero, asumiendo las deudas comerciales y los pasivos laborales de la plantilla indispensable que se haya salvado de los despidos masivos. El desastre de las líneas aéreas es de tal magnitud que Lufthansa, una de las más grandes empresas del mundo, tiene pérdidas de un millón de dólares por hora, con toda su flota en tierra. Muchas líneas aéreas están solicitando auxilios financieros a sus respectivos gobiernos, que sumados a sus deudas financieras y comerciales superan el valor de sus activos. La empresa aeronáutica Boeing ya despidió a 16.000 trabajadores y le han cancelado cientos de pedidos de aviones, lo que supone pérdidas mil millonarias. Ya estaba en problemas financieros antes de la pandemia, pero con esta nueva situación, solo un auxilio financiero gigantesco del gobierno norteamericano la pudiera rescatar, aunque algunos expertos comienzan a dudar de que realmente sea rescatable, o que valga la pena hacerlo.

La economía de Estados Unidos

Siendo la primera economía mundial, el efecto de la pandemia en Estados Unidos tiene repercusiones directas en todo el planeta, y si a ello se suma el impacto del virus en la economía de China, los efectos adquieren categoría de desastre de dimensiones históricas y prácticamente incalculables. El primer impacto es la pérdida de 30 millones de empleos, formales e informales, que el gobierno de Trump ha paliado con la entrega de un subsidio mensual de subsistencia, alrededor de 1.200 dólares mensuales por persona, más 500 dólares por hijo de hasta 14 años. Eso ayuda al sostenimiento de las personas, pero no resuelve la situación financiera de las empresas que, si quiebran, obligarían al gobierno a prolongar por mucho tiempo la entrega del subsidio de desempleo, con efectos desastrosos para la salud futura de la economía. Uno de los elementos básicos en una economía liberal, es la menor intervención del gobierno en la actividad económica, pero la pandemia voló por los aires ese principio, imponiendo de facto una economía de Estado, no se sabe por cuánto tiempo más. Empresas emblemáticas de Estados Unidos están en bancarrota, en una cascada indetenible, con el agravante de que los bancos no pueden otorgarle créditos nuevos y ni siquiera saben si van a poder recuperar los que ya les concedieron. El Capítulo 11, que regula las bancarrotas, obliga a elaborar un plan de rescate y pago de deudas, aprobado por una junta de consultores, que determina la distribución de los ingresos que tenga la empresa. Pero en este caso eso no funciona, porque la mayoría de las empresas en bancarrota que se acogen al Capítulo 11, o no tienen ingresos, como las líneas aéreas, o su facturación es muy pequeña frente al tamaño de sus deudas y gastos. Por eso han cerrado cadenas de tiendas con cien o más años de operaciones, como J.C. Penny, J. Crew, Neiman Marcus, Stage Stores, y otras empresas de servicio, como Hertz, ya declararon la bancarrota. Gigantescos centros comerciales están desolados, porque sus tiendas ancla cerraron, lo que bajó mucho el número de visitantes, arrastrando a la quiebra a las tiendas pequeñas. Muchas cadenas de tiendas optaron por hacer ofertas, incluso bajando el precio al 40 por ciento, pero ni siquiera eso pudo elevar la facturación a niveles que le permitieran salvarse de la bancarrota. En el caso de J.C Penny, la deuda es de 3.600 millones de dólares, impagable en medio de esta pandemia, lo que significó el despido de sus 85.000 trabajadores en sus 846 tiendas, tras 118 años de existencia. La única excepción en medio de este desastre es Amazon, que durante la pandemia ha expandido sus ventas on line, llevando sus ganancias hasta 10.000 dólares cada segundo, según las estimaciones de los expertos. Si eso es cierto, serían 600.000 dólares por minuto, 36.000.000 por hora, y 864 millones cada día, por lo menos mientras dure esta pandemia.

Notas de petróleo

Rusia está terminando de recoger las 21.000 toneladas de gasoil que se derramaron a un río desde el depósito de una central termoeléctrica en Norilsk, en Siberia, cerca del Artico. El problema se agravó porque las autoridades de esa central tardaron tres días en informar al gobierno central, que terminó enterándose del desastre a través de las redes sociales. El presidente Putin declaró la emergencia al enterarse del derrame, pero preguntó si es que ahora se tendrá que enterar de ello a través de las redes. No hay informe técnico del tamaño del daño ecológico provocado por el vertido de gasoil al río, agravado por la velocidad de los vientos en esa zona cercana al Artico.

El Bank of América estima que el precio del crudo Brent cerrará este año con un promedio de 43,70 dólares, y el West Texas en 39,70. Para 2021, los expertos de ese banco estiman un promedio de 50 dólares para el Brent y 47 para el West Texas. Para 2022, el Bank of América estima el Brent en 55 dólares de promedio de todo el año, y el West Texas en 50.

Una baja de 8,6 millones de barriles en los inventarios de crudo en Estados Unidos, provocó una recuperación de los precios esta semana. Según la agencia Bloomberg, el segundo trimestre de este año ha sido el mejor en los últimos 30 años, porque hay que recordar que durante este período, el marcador West Texas llegó a estar valores negativos. Este martes, los futuros de West Texas rozaron los 40 dólares, a la espera de que la oficina de energía de Estados Unidos confirme la reducción de los inventarios. Sin embargo, algunos expertos temen que el crecimiento del número de contagiados con Covid 19, obligue a suspender la reactivación parcial de la economía en varios estados, lo que reduciría de nuevo el consumo de petróleo en Estados Unidos y haría bajar de nuevo los precios.

Precios internacionales

Solo como referencia y en US$/TM.
Aluminio (1.577) 1.602
Al. Prem. 1.602 + 189
Al. Alloy (1.214) 1.215
Alúmina (254) 254
Al. Chat. (920 ) 920
Oro onza (1.727) 1.781
Plata onz.(17,56) 18,17
Platino onz. (816) 810
Cobre (5.734) 6.038
Níquel (12.900 12.790
Zinc (2.014) 2.056
Acero USA (501) 473
Acero China (434) 435
Acero chat. (262) 260
Hierro (99,98) 97,83
Briquetas (210) 210
Arroz (369) 369
Café Qt. (70,84) 73,10
Cacao (2.974) 2.974
Azúcar (360) 351
Maíz (122) 122
Trigo (191) 191
Avena (179) 179
Sorgo (119) 105
Soya (310) 302
Petróleo
Vzla. (24,01) 25,20
Opep (36,75) 37,33
West T. (37,91) 38,38
Brent (40,83) 41,89
Gas1.000p.(1,62) 1,67
Coque pet. (30) 30

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