Ni las inundaciones pudieron detener una boda en Australia

Kate Fotheringham y Wayne Bell jamás pensaron que el día de su boda tendrían que utilizar un helicóptero de emergencia.

Después de que la zona donde vivía la novia quedara inundada por las históricas lluvias en Nueva Gales del Sur, Australia, sus planes tomaron un giro inesperado cuando el único puente hacia Port Macquarie, la ciudad donde se casarían, quedara sumergido.

“Había aceptado el hecho de que iba a estar lloviendo, pero no sabía cómo iba a lidiar con un desastre natural”, dijo Kate, quien pidió ayuda en redes sociales. La gran noticia llegó cuando una estación de televisión ofreció un rescate.

Un helicóptero estaba en camino y solo tenía 50 minutos para empacar, así que puso manos a la obra. Aunque ella y su vestido estaban a salvo, los proveedores de comida y maquilladores habían quedado atrapados. Incluso el cantante había tenido un accidente.

Sin embargo, la suerte estuvo de su lado y muchos de los invitados habían pasado la noche en la ciudad. De casualidad, una empresa de catering que iba a servir en otra boda no había podido salir de allí así que ofrecieron sus servicios.

Pero finalmente la ceremonia se realizó y ambos se dieron el ‘sí quiero’. Kate solo llegó 15 minutos tarde.

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