Trucos de la Abuela: Recupera el brillo de tus ollas
Con el constante uso y el pasar del tiempo las ollas de aluminio suelen perder su brillo y todos odiamos tenerlas feas y sin que reluzcan, por ello hoy en los Trucos de la Abuela, te dejaremos varios consejos para recuperarlas.
Además te dejaremos cómo cuidarlas mejor.
Uno de los primeras cosas que recomienda la abuela es frotarlas con alcohol o con un trapito impregnado en aceite.
Las ollas opacas ya no serán una preocupación en su casa con este truco, pero si quiere desmancharlas, puede llenarlas con agua, agregar la cáscara de una piña y dejar hervir durante media hora.
El aluminio se limpia fácilmente con bicarbonato de sodio.
Pon un poco en un recipiente con agua tibia y con ayuda de una esponja, pasa la mezcla sobre la superficie.
¡Verás que queda como nueva!
También puedes usar jugo de limón y un paño suave, para pulir la superficie.
Para evitar que estas ollas se ennegrezcan y mejoren su brillo, cocina tomates o manzanas (la acidez de estos alimentos le darán brillo a las ollas)
El vinagre blanco también es ideal. Necesitas una tacita de vinagre blanco y una esponja de brillo en espiral.
Primero debes aplicar el vinagre, con la ayuda de un atomizador, en la superficie que deseas brillar.
Después, con el espiral metálico, empieza a deslizar suavemente de manera horizontal.
Evita hacerlo en forma circular, pues rayarás la olla. Al terminar, seca la olla.
A veces cuando se nos quema una comida, eso va dejando la olla no solo con restos de comida pegados al interior, también es posible que esta se queme un poco y adquiera un color oscuro.
Para evitar que las ollas pierdan su utilidad y pierdan su buena apariencia, es recomendable dejar la olla con un poco de agua y jabón un par de horas, después con la ayuda de una esponja en espiral puedes fregar la parte afectada hasta que vaya desprendiendo poco a poco los restos de comida y la parte quemada.
Una vez hayas logrado retirar la parte más pesada, concluye la lavada con un poco de bicarbonato de sodio, mezclado con jabón y una esponja normal.
Consejos para un buen cuidado de tus ollas
Evita lavarlas cuando estén calientes, espera a que se enfríen.
Utiliza esponjas o paños especiales para evitar rayarlos.
Al cocinar usa utensilios de madera y silicona para evitar rallarlas.
Elimina todos los restos de comida al lavarlas, pero sin tallar con fuerza.
Siempre seca bien antes de guardarlas para que no conserven humedad.
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