Travalera: coadyuvante natural contra la diabetes

La travalera (Centaurea aspera) es una planta de amplio uso popular por sus propiedades hipoglucemiante de acción retardada, tiene la capacidad de actuar de forma parecida a como lo hace la insulina y puede llegar a sustituir a los fármacos orales utilizados en la diabetes, pese a que su sabor es muy amargo.

Entre sus propiedades se encuentra que es una planta con propiedades antinflamatorias, antisépticas, aperitivas, es decir, que tiene la capacidad para estimular el apetito, colagogas (facilita la expulsión de la bilis retenida en la vesícula biliar hacia el intestino), coleréticas (hacen que aumente la producción de bilis) y digestiva. Resultando por todo ello una planta buena para el hígado.

Usos de la Travalera

Se ha usado como coadyuvante en la diabetes. Por sus propiedades aperitivas se usa en caso de anorexia.

Para la dispepsia hiposecretora, que es una enfermedad crónica caracterizada por la digestión laboriosa e imperfecta con disminución de las secreciones estomacales, resulta muy útil debido a su propiedades coletéricas y colagogas.

Disquinesia hepatobiliar, gracias a su acción colagoga, las disquinesia es una condición en la que la vesícula biliar no es capaz de vaciar sola su contenido.
Las personas diabéticas, en caso de decidirse a seguir un tratamiento herbario, deben controlar de todos modos los niveles de glucemia para ajustar, si es preciso, la dosis de insulina o antidiabéticos orales a una mayor o menor concentración de planta en la decocción o la infusión.

La centaura se considera, además, antinflamatoria y antiséptica. Se indica en infecciones con diarrea o náuseas, en intoxicaciones alimentarias leves y para reequilibrar las funciones de hígado y vesícula tras una alteración hepática.

Fórmulas de herbolario

Para reducir el nivel de azúcar en sangre: Los ayurvédicos incluyen la centaura en una fórmula magistral con hojas de gimnema y vainas de judía, de efectos afines, y una ramita de canela para no añadir azúcar.

Cómo prepararla: Se hierve 3-4 minutos una cucharada de la mezcla por vaso, se reposa 10 minutos y se toma tres veces al día, tras las comidas. Si se encuentra demasiado amarga puede hacerse infusión, con la planta muy triturada y dejándola apenas 5-6 minutos en reposo.

Para despertar el apetito: Se propone para tal fin una fórmula que combina a partes iguales centaura con raíz de genciana –planta amarga donde las haya– y anís estrellado –que actúa como corrector de sabor.

Cómo prepararla: Se maceran toda la noche dos cucharadas de esta mezcla por medio litro de agua, se cuela y se toman 3 o 4 vasos al día antes de las comidas. Esta misma fórmula, tomada después de comer, facilita una cómoda digestión y previene el ardor de estómago.

La travalera se encuentra en forma de planta fresca y seca, en polvos y preparados comerciales en extracto líquido y comprimidos, combinada con eucalipto, copalchi, vainas de judía, galega, gimnema o centaura menor, entre otras.

Infusión antidiabética de Travalera

Para obtener los efectos hipoglucemiantes ya descritos, la centaura áspera debe utilizarse preferentemente en infusión (un puñado de planta desmenuzada) pero, a pesar de que es de sabor bastante amargo, no debe endulzarse con azúcar ni miel.

Tomar por las mañanas en ayunas y antes de acostarse.

Para determinar si hay que aumentar la dosis es conveniente realizar análisis que determinen el nivel de reducción de azúcar en sangre y orina.

Tips

Externamente la travalera se emplea para tratar el reumatismo.

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