La belladona es una planta extremadamente tóxica que puede utilizarse en la preparación de algunas medicinas naturales, especialmente para aliviar los síntomas de los calambres gástricos debidos a úlceras o dolores menstruales. Sin embargo, la planta solo debe ser utilizada por profesionales, siendo venenoso cuando se usa sin conocimiento en el hogar.
El nombre científico de esta planta es Atropa belladona , la cual es rica en alcaloides, como atropina , escopolamina e hiosciamina, con propiedades antiespasmódicas, sedantes y diuréticas, que son muy utilizadas para la obtención de medicamentos, pero que pueden provocar intoxicaciones y alterar las funciones de el sistema nervioso, la producción de saliva y sudor, además de provocar un aumento del tamaño de las pupilas, retención urinaria, aumento del ritmo cardíaco y de la presión arterial.
La belladona puede adquirirse en farmacias especializadas, previa presentación de receta médica, y sólo debe utilizarse bajo la supervisión de un médico u otro profesional de la salud que tenga experiencia en el uso de plantas medicinales, y almacenarse fuera del alcance de los niños, porque si consumido por encima de la dosis recomendada por el médico, puede ser venenoso.
¿Para qué es?
Belladona está indicada en medicina tradicional para las siguientes situaciones:
- Problemas digestivos.
- Calambres gástricos debido a úlcera péptica.
- Cólico intestinal.
- Calambres menstruales o dismenorrea.
- Dolor biliar.
- Cólico renal.
- Cambios neurológicos.
- Sudoración excesiva.
- Micción excesiva durante la noche.
- Diarrea con calambres intensos.
- Síndrome del intestino irritable con espasmos intestinales.
- Rigidez o temblores causados por la enfermedad de Parkinson.
- Colapso pulmonar debido a neumonía.
- Tifoidea.
- Espasmos en los bronquios provocados por asma o bronquitis.
La belladona tiene propiedades antiespasmódicas que ayudan a relajar la musculatura lisa de los intestinos, vías urinarias y biliares, bronquios y útero, por ejemplo, además de inhibir la producción de saliva, sudor, secreción ácida del estómago y tener acción sedante y diurética.
Por sus propiedades y la presencia de escopolamina y atropina en su composición, la belladona se utiliza mucho para la producción de medicamentos, como Atropion, Pasmodex, Buscopam, Atrovex o Tropinal, por ejemplo, colirios, para dilatar la pupila antes de los exámenes. vista, o ungüento homeopático para el reumatismo o dolores musculares, que se encuentra bajo el nombre de Pomada Belladona Almeida Prado.
La belladona sólo debe utilizarse con el consejo y orientación de un médico o herbolario, ya que puede provocar intoxicación y poner en riesgo la vida.
La belladona se puede utilizar en forma de tintura, polvo o extracto. Sin embargo, al tratarse de una planta sumamente tóxica, las dosis deben ser administradas de forma individual, por un médico o un profesional con experiencia en plantas medicinales.
Posibles efectos secundarios
Los efectos secundarios de la belladona incluyen alucinaciones, delirio, psicosis, inquietud, agitación, náuseas, taquicardia, visión borrosa, borrosa o borrosa, ceguera, trastornos gastrointestinales, dolor de cabeza y dificultad o incapacidad para orinar.
Además, si se consume en exceso, esta planta puede provocar intoxicaciones, colapso cardíaco, paro respiratorio, convulsiones, coma y la muerte. Por lo tanto, los medicamentos elaborados con esta planta deben usarse con mucho cuidado y sólo bajo la supervisión de un médico.
¿Quién no debería usar?
La belladona es sumamente venenosa, y ninguna de sus partes debe usarse en la preparación de remedios caseros, ni las manos deben estar en contacto directo con la planta, debido al riesgo de que sea absorbida a través de la piel y cause intoxicación.
Además, no se debe consumir la fruta de solanáceas, ya que puede provocar una intoxicación grave. Por eso, es importante prestar atención a los niños, ya que la fruta de la solanácea es muy parecida a los arándanos y puede consumirse por error y provocar intoxicaciones.
Los medicamentos con esta planta no deben ser utilizados por personas con taquicardia, insuficiencia cardíaca, tirotoxicosis, glaucoma de ángulo cerrado, edema pulmonar agudo, obstrucción de la vejiga o el intestino, parálisis intestinal, colitis ulcerosa grave, megacolon tóxico, miastenia gravis, hemorragia aguda, hiato. hernia, esofagitis por reflujo, enfermedades graves del hígado y los riñones o hiperplasia de próstata en los hombres.
Además, la belladona nunca debe ser utilizada por niños ni por mujeres embarazadas o en período de lactancia.
