Flores de azucena para erradicar la gripe

La azucena es una bonita planta herbácea con un bulbo escamoso, grande y blanco. Posee un tallo subterráneo bulboso y otro aéreo herbáceo recubierto de hojas, unas extendidas y otras erguidas, con forma lanceolada y escasamente onduladas en los bordes.

La planta tiene propiedades antinflamatorias, analgésica, diurética y expectorante.

Se indica para uso interno en molestias ginecológicas. En uso externo para curar úlceras, inflamaciones, forúnculos, enrojecimiento cutáneo, quemaduras, heridas y eczemas.
Se recomienda usar con precaución y administrar sólo por vía tópica.

Uso popular:
Cataplasma caliente, como resolutivo y callicida. Se debe recolectar un bulbo de azucena y después de limpiarlo bien con agua, asar sobre unas cenizas, cortar en rodajas y aplicar en caliente sobre panadizos, verrugas y forúnculos.

El aceite se aplica sobre la zona a tratar para curar úlceras, abscesos y contusiones.

Los bulbos hervidos con agua o leche aplicados sobre un callo o sobre cualquier callosidad, producen una rápida madurez. Para esto, se renueva cada hora el bulbo cocido. Es infalible contra los abscesos, furúnculos y espinillas.

Las azucenas, puestas en remojo en aguardiente durante 6 horas, por lo menos, curan los desgarros y contusiones.

Con los pétalos de las flores de azucena se prepara, por maceración en aceite, un nuevo aceite que se emplea como calmante en los dolores de oído y contra las grietas mamarias.
Los pétalos de esta flor son un excelente hidrolado contra la tos.

Infusión. Se prepara con 3 gr. de bulbo en 100 ml. de agua hirviendo, tiene efectos diuréticos.

Para la salud y la belleza
Partes utilizadas: El bulbo, fresco o desecado , y los pétalos.

Componentes activos: Poco es lo que se sabe a este respecto de la azucena. La epidermis de las escamas bulbares contiene esterinoplastos con dos formas de liliosterina, anticianina, y oxidasas (Wehmer), boro de las flores y el bulbo.

Propiedades: Cicatrizante, emoliente, antiséptico, vulnrario, resolutivo, callicida, diurético…

Aceite: Para diversas curas. Echar flores de azucena en aceite de oliva; después de 3 días se sacan las primeras y se echan otras nuevas, y así hasta 3 veces, hasta que se satura el aceite de la esencia de la flor. Este aceite se emplea para curar úlceras, abscesos, contusiones.

Cataplasma: Panadizos, verrugas, forúnculos. Usar el bulbo de la azucena bajo ceniza caliente. Cortarlo en rodajas y se aplica sobre la parte enferma.

Otro sistema eficaz consiste en hervir el bulbo en agua o mejor aún, en leche. En este segundo caso debe ser empleado caliente y colocarlo, cortado en rebanadas, sobre la zona afectada, cambiado el emplasto cada hora.

Para la Belleza
El aceite de azucena resulta eficacísimo para quitar manchas del cutis, pecas y cualquier imperfección de la piel.

Usar con moderación

Cataplasma: Tópico de consistencia blanda por lo común, calmante o emoliente. Se hace cociendo la planta, machacandola luego y sujetándola caliente.

Tips

En astrología la azucena queda situada en el dominio astral del sol, en magia blanca se recurre a la azucena para ahuyentar a las fuerzas del mal.

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