Madre invitó a no perder la fe en Dios tras recuperarse de covid-19
Leglanis Brito y su bebé recién nacido se recuperaron de covid-19, tras haber estado hospitalizados en San Félix.
La mujer de 29 años empezó a sentir goteo nasal, rinitis y dolor de cabeza leve, síntomas que asoció a una gripe común. Tomó la decisión de automedicarse y después de cuatro días apareció una fiebre muy alta, de entre 39 y 40 grados, la cual se extendió por 72 horas.
Relató que tomó antibióticos y jarabe para la tos para aliviar los síntomas de la supuesta gripe.
Brito estaba en la semana 35 de su embarazo, cuando su membrana se rompió, por lo cual debían practicarle una cesárea de emergencia.
13 días después de presentar los primeros síntomas, confirmó que se trataba de covid-19 y que se había contagiado por contacto con una persona que portaba el virus sin saberlo.
“Antes de eso (la cesárea), me hicieron placas y a través de la de tórax fue que me diagnosticaron el virus. La prueba de sangre que me hicieron salió negativa y tenía todos los síntomas”, contó.
Después de la cesárea, la mujer estuvo hospitalizada por tres días en el Hospital Dr. Raúl Leoni, de Guaiparo, para tratar la neumonía por covid-19.
Brito reveló que, aunque no fue recluida en el área covid-19, estuvo aislada de otros pacientes. “Estuve solita con Dios, solamente las enfermeras iban a cumplirme el tratamiento”, expresó.
Mientras se recuperaba de la neumonía, su bebé también estaba hospitalizado por varias complicaciones.
“Mi bebé nació muy mal, agarró la infección en los pulmones a raíz de eso tragó líquido, nació cianótico, tuvo una sepsis. Estuvo hospitalizado por 15 días”, recordó.
Preocupación por su bebé
La ciudadana de 29 años confesó que fueron muchos momentos difíciles desde preocuparse por su bebé desde antes de su nacimiento hasta la dificultad para respirar.
Acotó que su mayor preocupación era que no le pasara a su bebé, a quien define como un “guerrerito” y agradeció por la misericordia de Dios.
“Para mí lo más fuerte fue el temor de perder a mi bebé o que en el transcurso de que él estaba hospitalizado, se agravara su situación y no pudiera hacer nada”, comentó.
Brito indicó que tanto ella como el recién nacido pasaron por tantas complicaciones y que su bebé “estuvo lo más grave que pudiera imaginar”.
Por el covid-19, apuntó que desde el primer momento se sintió mal y el malestar continuó todos los días hasta que se rompió su membrana. Tuvo que afrontar 16 horas de dolor mientras le hacían los exámenes y un especialista la atendía para preparar su cesárea.
“Toda esa alarma que ocurrió con mi hijo y luego esperar esos 15 días ansiosa, eso fue lo peor (…) gracias al señor y su infinita misericordia estamos aquí”, declaró.
Dos meses después de haber estado hospitalizada, señaló que tiene secuelas como taquicardia y dificultad respiratoria asociada a la ansiedad.
Mantener oraciones
Como sobreviviente de covid-19 invitó a quienes luchan contra la enfermedad a no perder la fe en ningún momento.
“Antes que cualquier otra cosa, que tengan mucha fe. Dios existe, está allí y si nosotros pedimos las cosas con fe, veremos obrando en nuestras vidas, con su divina misericordia”, resaltó.
Aclaró que aunque “no es una enfermedad fácil”, es importante no rendirse y esperar “la obra de Dios a través de cada doctor, enfermera y persona”.
“Que sigan luchando, que no pierdan la fe, que oren bastante, que le pidan a Dios que lo puede todo”, expresó.
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