Día del Maestro: El desafío de adaptarse a nuevas medidas

Cada 15 de enero se conmemora el Día del Maestro en Venezuela, fecha en la que se rinde homenaje a todas las personas que se dedican a la enseñanza.

Maryori Gutiérrez lleva cuatro años como docente en segundo y tercer nivel de educación inicial, profesión a la que llegó por el deseo de enseñar y aprovechar sus habilidades en las aulas de preescolar.

“Mi experiencia como docente ha sido maravillosa, conté con ayuda de otras maestras de mayor experiencia”, relató.

La maestra resaltó sobre su trayectoria el poder ayudar a niños de muchas maneras, escuchando sus anécdotas y viendo su crecimiento.

“Con el pasar del tiempo uno aprende más. A veces son ellos (los niños) quienes nos enseñan más que los libros”, confesó.

Gutiérrez acotó que una de las mejores cosas de ser docente es tener la satisfacción “de que esos niños inquietos te prestan atención o el que tiene una necesidad especial de aprendizaje te mire con alegría porque lo logró”.

Indicó que otra de las ventajas es creer en sus alumnos y en su proceso de aprendizaje. Mientras que una de las cosas más difíciles es encontrarse con un niño con problemas familiares y que llegan tristes al salón.

“De alguna manera busco cómo solucionar para que se olviden de ese mal rato o tristeza”, declaró.

En pandemia

Karen Hernández es docente de segundo, tercero y cuarto grado, y contó que en el caso de la institución donde labora están trabajando una semana de forma “online” y otra presencial.

Los alumnos se dividen en dos grupos y asisten a las aulas dos veces por semana. Durante las semanas de clases en línea cada quien tiene su horario.

“No hay mayor dificultad porque se envían recursos mediante el aula virtual, con cuadernillos también se trabaja. La dinámica es más interactiva con los niños”, apuntó.

En cuanto a las medidas de bioseguridad, manifestó que la institución ha sido estricta para evitar los posibles contagios de covid-19.

“Tanto los alumnos como los docentes debemos llevar nuestras mascarillas, caretas, tener nuestro kit que incluye alcohol. Existe el marcaje para cumplir el distanciamiento a la hora del receso, tienen puntos dónde se pueden sentar y las mesas están separadas”, explicó.

Interacción

Yamil Rojas, quien es docente de tercero y cuarto año, expresó que la adaptación a las nuevas medidas, por la pandemia de coronavirus, al principio no fue para nada sencilla.

“No es nada fácil como docente pasar de la pizarra a una computadora, a comunicarnos con los alumnos por medio de correos electrónicos, por eso es que al principio el choque fue bastante fuerte”, admitió.

Señaló que luego de la adaptación, la situación se ha hecho más sencilla y luego de mantener la interacción por chats y videollamadas, han regresado a lo presencial.

“Ya puedo ver alumnos, ya puedo interactuar con ellos de manera más directa y en ese sentido sí ha cambiado bastante a como fue en un principio que todo era por correo electrónico y fue bastante fuerte”, añadió.

Rojas reveló que en 2021 mantenían las clases virtuales y un sistema de asesorías pedagógicas de manera presencial, para aquellos alumnos “que quisieran entender un poco más el contenido que se estaba manejando en ese momento”.

Aunque no son obligatorias las clases presenciales, el docente mencionó que cada vez asisten más alumnos al colegio.

“Lo mejor sin duda alguna es la interacción con los alumnos, me parece que es lo más importante que hay que rescatar de la reincorporación a las aulas de forma presencial”, resaltó.

Por otro lado, opinó que lo más complicado ha sido la comprensión del sistema híbrido, el cual definió como complicado.

“Es un poco confuso y trabajar con los alumnos tan poco tiempo durante cada sesión es lo que se hace más complicado en este nuevo retorno”, reconoció.

Amor y alegría

Para Karina Muñoz, licenciada en Educación Preescolar, ha sido un desafío la adaptación a la nueva modalidad.

Tras 21 años de experiencia, apuntó que los niños en edad preescolar necesitan el contacto y la interacción con compañeros y maestras, parte importante para su proceso de aprendizaje.

Después de casi dos años de pandemia, la educación ha cambiado en muchos aspectos, las maestras deben ser más creativas y comprensivas, según Muñoz.

Subrayó que “hay que tratar en lo posible que los niños se sientan como si están en las aulas de clase, hacer unas clases divertidas, tratar de que los niños se sientan contentos de hacer sus actividades”.

Muñoz destacó que el regreso a las clases presenciales se está llevando a cabo en grupos pequeños de niños, cumpliendo con todas las medidas de bioseguridad.

Lamentó que aún se observa poca asistencia ya que padres y representantes han manifestado temor ante los posibles contagios de covid-19.

La maestra indicó que las clases presenciales se combinan de manera continua con grabaciones y se utilizan varias plataformas y aplicaciones educativas para facilitar el aprendizaje de los niños.

La docente aseguró que lo más difícil de las clases en la modalidad online es no contar con conexión a Internet en ocasiones, lo que interrumpe el proceso de enseñanza y aprendizaje para los niños que se quedan en casa.

Sin embargo, este aspecto queda en segundo plano ante la satisfacción de volver a las aulas.

“Sentir la energía y el amor, las voces de los niños, todo eso me llena de mucha vida, y me da esperanza de que todo esto va a pasar”, afirmó.

Fecha especial

En Venezuela se celebra el Día del Maestro como recordatorio del 15 de enero de 1932, cuando se conformó la Sociedad Venezolana de Maestros de Instrucción Primaria, con el objetivo de defender los derechos laborales de este gremio y luchar por las mejoras en la educación del país.

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