Así fue el discurso de Matthew McConaughey en la Casa Blanca por el control de armas (+video)
Matthew McConaughey es de Uvalde (Texas) y como uno de cada tres estadounidenses es poseedor de armas de fuego. También es uno de los millones de ciudadanos que claman por una ley que restrinja la posesión de armas.
Así lo ha expresado en un desgarrador discurso en la sala de prensa de la Casa Blanca donde ha detallado con la elocuencia del ganador de un Oscar quiénes eran y quiénes podrían haber sido algunas de las víctimas del tiroteo masivo del 24 de mayo en una escuela de Uvalde (el número 212 del año, según Gun Violence).
En total murieron 22 personas: 19 niños, 2 maestras y el perpetrador de la masacre que se suicidó.
“Queremos escuelas seguras y queremos leyes sobre armas que no faciliten que los malos obtengan las malditas armas”, dijo el actor que ha comienzos de este año consideró postularse como gobernador de Texas.
La semana pasada McConaughey y su mujer estuvieron en su ciudad natal reuniéndose con las familias de las víctimas, compartiendo “lágrimas, historias y recuerdos”, que ha querido compartir con todos los estadounidenses desde la Casa Blanca.
En todos los casos encontraron la misma “ira y confusión y tristeza”, dijo al comienzo del discurso, y la necesidad de responder a “cómo pueden hacer que la pérdida de estas vidas importe” (these lives matter, decía McConaughey en resonancia con otras luchas sociales del país).
Antes de entrar en materia recordó cómo fue en Uvalde, donde su madre trabajaba en un jardín de infancia muy cerca de la de Robb Elementary en que sucedió la masacre, donde aprendió a manejar un arma, se sacó la licencia y entendió lo que era el uso responsable de armas de fuego.
Entonces comenzó hablar de sus encuentros con los padres de las víctimas. Habló de Alithia Ramírez y de sus padres Ryan y Jessica.
Con una foto de Alithia tomada un día antes en la mano, McConaughey contó que tenía 10 años cuando fue asesinada.
“Su sueño era ir a la escuela de arte de París y algún día compartir su arte arte con el mundo. Ryan y Jessica estaban ansiosos por compartirlo… dicen que mostrarlo la mantendría con vida de alguna manera”. McConaughey cumplió su voluntad enseñando el autorretrato de Alithia con una amiga observándola dibujar desde el cielo.
Maite Rodríguez, tenía 9 años cuando fue asesinada por una de los 393 millones de armas que hay en Estados Unidos. Soñaba con ser bióloga marina y ya estaba consultando universidades donde hacer su inscripción, “cerca del oceáno”.
“A Maite le preocupaba tanto el medio ambiente que cuando su ciudad le preguntó a su madre si podrían soltar algunos globos hacia el cielo en su memoria su mamá dijo: ‘oh, no, a Maite no le gustaría ensuciar”.
Maite usaba unas deportivas Converse verdes, a las que dibujó un corazón en la punta del pie derecho; McConaughey las enseñó. Fue gracias a esas zapatillas que sus padres pudieron identificarla después del tiroteo.
El efecto de un rifle de asalto AR-15 -al alcance y sin controles de un niño de 18 años- es tan devastador que la mayoría de los 22 cuerpos tuvieron que ser identificados por detalles así o por pruebas de ADN.
Ellie García, también de 10 años, también asesinada por un arma al alcance de cualquiera, llevaba una semana preparando un pasaje de la Biblia que iba a leer en la misa del día siguiente. “No pudo llegar a leerlo”, recuerda McConaughey antes de dar voz al pasaje de Ellie.
También habló de Irma García, una de las dos maestras asesinadas y cuyo marido falleció poco después de un ataque al corazón.
La violencia armada es la principal causa de muerte en los menores de 18 años en Estados Unidos, con 18.000 niños y niñas y adolescentes asesinados o heridos por disparos de bala cada año (según Every Town for Gun Safety).
La visita de Mathew McConaughey a la Casa Blanca pretende acabar con esta situación. No prohibiendo las armas, sino restringiendo su acceso para una “posesión responsable”.
Él cree que hay consenso en Estados Unidos independientemente de la ideología de cada uno porque quienes poseen armas están “hartos” de que “individuos trastornados” abusen de la Segunda Enmienda de la Constitución que protege el derecho a las armas. Dice que es una “oportunidad única”.
Para ello, además de su discurso, McConaughey se ha reunido brevemente con Joe Biden y con varios legisladores demócratas y republicanos del Congreso, para contribuir a que el proyecto de ley para aumentar los controles a las armas salga adelante.
Según McConaughey hay “regulaciones razonables y prácticas” que podrían aprobarse como revisar los antecedentes penales o aumentar la edad de posesión de los 18 años a los 21 en un país donde se pueden usar armas antes de tener edad legal para consumir una cerveza.
También reconoce que esto no terminará con los tiroteos masivos, pero sí disminuir las posibilidades de que estas tragedias ocurran con tanta frecuencia. Todavía queda mucho por hacer:
“Necesitamos invertir en salud mental. Necesitamos escuelas más seguras. Necesitamos restringir la cobertura sensacionalista de los medios. Necesitamos restaurar nuestros valores familiares. Necesitamos restaurar nuestros valores estadounidenses y necesitamos una posesión responsable de armas”, cerró.
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