El día que Michael visitó La Charneca

Cuando se habla de La Charneca, es un populoso barrio caraqueño, situado en el cerro de San Agustín del Sur; este barrio se hizo muy conocido y famoso después de la caída del dictador General Marcos Pérez Jiménez, cuando sus habitantes bajaron a reclamar sus derechos y buscar el sustento diario, de igual manera hay que recordar que este lugar ha dado un semillero de artistas que en el tiempo se han hecho famosos y hay mucho material para hablar de él, pero hoy me voy a dedicar a recordar cuando Michael Jackson quiso conocer personalmente este barrio caraqueño.

Los vientos con sabor salado de Maiquetía se estrellaron fuertemente contra los cabellos de los hermanos Jackson, el 24 del segundo mes del año 1977, llegaron a la capital ostentando orgullosamente sus afros los cuales estaban de moda y era una manera de mostrar el emblema de su raza, ya venían acompañados de su precoz fama. Ya su fortuna les había regalado sus mejores glorias, ya en esa fecha se habían vendido 70 millones de “L.P”. y había pasado de tiempo los éxitos como “ABC”, “Never Can Say Good bye” o “Ben”, para que los fanáticos venezolanos conocieran sus ritmos de memoria. Aunque ellos no sabían que estaban muy cerca del final de su banda, que de su promisorio comienzo. No llegaron desprovistos, “trajeron siete mil kilos de equipaje y con ellos viajaron un grupo de 14 personas, entre ellos, unas jóvenes rubias que nunca se pudo saber cuál era su oficio”.

Luego, después de su llegada, Michael se colocó una franela a rayas, una correa con una hebilla ostentosa y bajó junto a sus hermanos de la habitación del Hotel Caracas Hilton (este ubicado frente a La Charneca)  para encontrarse con una multitud de fotógrafos, periodistas y público en general, se llegó a comentar que de mala gana se dejaron tomar algunas fotos, aunque al comienzo estaban reacios terminaron posando sonreídos, ahí estaban Tito, Marlon, Randy, Jackie y por supuesto Michael, Jermain estuvo ausente para las instantáneas, se brindó un coctel con ellos, no es que fueran dóciles, pero firmaron autógrafos y dieron muestras de agradecimiento a las personas que quería conocer sus canciones.

A pesar de todo este comentario, hay que reconocer, no por famosos, los muchachos fueron extravagantes en sus pedidos, fueron muy sencillos, que se sepa: no exigieron nada antes de venir, no como existen muchos artistas que exigen hasta una marca de agua para ingerir. Lo que sí se recuerda que “El PAPÁ DE LOS HELADOS” tuvo el antojo que despertó la inquietud de sus anfitriones, el de querer conocer los barrios caraqueños en persona.

Es de suponer que a sus 19 años de edad anhelaba extremas. ¿Y que mas remedio? Habia que complacerlo, esto no estaba en el libreto. Lo llevaron muy bien acompañado, en una camioneta en una expedición a La Charneca. No solo eso, sino que exigió y se bajó en una esquina en pleno barrio, donde estaba una bodega para tomarse un refresco, y como él no era en ese momento tan famoso, pocas personas se dieron cuenta. Quienes lo acompañaron estaban asustados, en cambio él estaba sumamente feliz de haber podido saciar su deseo. Alguien del barrio lo reconoció preguntando ¿Quién era aquel moreno de pelo afro, de rostro familiar, que tomaba una gaseosa en la conocida bodega?

Historia de los cinco hermanos

Katherine, madre de los Jackson , atribuía la iniciación musical de su prole a la ausencia de la T.V., decía “ya sabes cómo son los muchachos” si no tienen televisor hacen otras cosas, el papá Joe, quizás tuviese otra respuesta. Este señor, quien era conductor de grúas, reunió a cinco de sus hijos, los entrenó en su casa de Indiana, y formó el grupo que se llamó sin muchos eufemismos The Jackson Five.  En el año 1963 se estrenaron en un Supermarket y de allí viajaron en una camioneta tipo Van hacia la fortuna que les tenia las puertas abiertas en algún lugar del sueño americano.

Bastaron cinco años para que firmaran contrato con Motown, y Diana Ross los presentó con su característica sonrisa de nieve en un Club de Bervery Hills, para sellar la leyenda de que ella era “la descubridora”. Durante los seis años siguientes probaron el gusto de la fama, ya la “mesa estaba servida” la comunidad de color de los EE. UU. Estaba satisfecha. Después, en los años siguientes (60), estos jovencitos de color eran un emblema que se agradecía.

The Jackson Five era una familia muy unida, de padres no separados moldeando los valores de sus hijos. La Motown, cierra sus puertas en el año 1975 ellos clamaban que no les dejaban escribir sus propias canciones y que apenas estaban recibiendo 2.7 % en royalties de todas las ventas. Los años que siguieron fueron de nuevos éxitos, junto a su nuevo sello Epic Records, pero también; tiempo para la separación. Michael pisó el acelerador de su carrera llevándola al cielo de las estrellas pop. En 1984, bajó de su firmamento para hacer el tour con sus hermanos. Don King, manager del espectáculo anunció de manera rimbombante al igual que su peinado: “QUIEN VAYA A ESTE SHOW SERA UNA MEJOR PERSONA EN EL FUTURO” de verdad fue un éxito reservado sin precedentes en la historia musical.

En la historia se sabe que Michael solo tenía 5 años cuando su madre lo vio bailando frente a un espejo, éxito que fue compartido hasta mediados de los años 70,  el tema que marcó sus inicios fue Off the Wall (1979), vendió 8 millones de copias, luego llegó la apoteosis con TRILLER (1982) el álbum fue premiado con 8 premios Grammy, se vendieron 40 millones de discos, estuvo en el primer lugar en las carteleras norteamericanas por espacio de 37 semanas, a sus 25 años de edad Michael tenía un éxito que desbarataba los asombros. “Ninguna otra estrella del pop ha logrado vender tantos discos, ningún álbum ha logrado que siete sencillos encabecen la lista de “Top Ten”.