Tragedia en el río Caroní cumple dos meses
Domingo Labastida, tenía 55 años. Todavía sus restos no han sido localizados.
Él es una de las cinco personas que abordaban un bote de fabricación casera que trabucó en el río Caroní el pasado 24 de octubre.
Este 24 de diciembre se cumplen dos meses de la tragedia y familiares de Labastida lamentan que “no puedan darle la santa sepultura”.
Expresaron que pese a que las autoridades paralizaron la búsqueda, ellos continuaron por cuenta propia.
Sin embargo, tampoco dieron con él. Y ante lo riesgoso del rastreo decidieron no continuar.
No obstante, reiteraron que el cadáver de su pariente debió quedar atrapado en las profundidades del fluvial, por lo que con nostalgia aseguraron que de haberse sumado unos buzos a la búsqueda, como lo solicitaron a las autoridades varias veces, los resultados serían otros.
Solo uno sobrevivió
Marcos Reyes, Harold Canales y Daniel Gonzales, son los nombres de las otras tres víctimas fatales del siniestro fluvial.
Una sola persona logró sobrevivir, se trata de Máximo González, el cual fue rescatado por un pescador y fue él quien relató lo que pasó.
Los cadáveres de Reyes y Canales fueron localizados 24 horas después de iniciada la búsqueda. Uno de ellos cerca de Ruinas de Caroní y el otro en los alrededores del embalse Macagua.
Y los restos de Daniel, los hallaron un mes después en una zona de difícil acceso en las inmediaciones del parque La Llovizna.
Los arrastró la corriente
El grupo de amigos salió la mañana del domingo 24 de octubre hacia un conuco en el sector Caruachi. Iban a recoger la cosecha.
Era su rutina pero esta vez no regresaron. La fuerte corriente de esa tarde cuando regresaban hizo que la embarcación de fabricación casera en la que se movilizaban trabucara.
Aunque nadaron, el oleaje no les dejó avanzar.
Una vez que se conoció el hecho, comisiones de Bomberos Municipales, Protección Civil, Guardia Costera, el equipo de Rescate Acuático y lancheros del Club Italo Venezolano iniciaron el rastreo.
Más tarde, también se sumaron comisiones de Bomberos Forestales.
Compartían la agricultura como oficio
Domingo Labastida y Marcos Reyes, eran parientes. Sus familiares los recuerdan como personas tranquilas y trabajadoras. Ambos dejaron tres hijos en orfandad. De Reyes contaron que era trabajador de Ferrominera Orinoco, mientras que de Labastida mencionaron que por su discapacidad no tenía empleo pero su pasión era la agricultura; oficio que compartía con el resto de los ocupantes.
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